B¨¦lgica asume hoy la presidencia semestral de la UE

B¨¦lgica releva a Suecia, que ha llevado a cabo una buena gesti¨®n de los asuntos comunitarios, a pesar de su inexperiencia (ingres¨® en la Uni¨®n en 1995), del escepticismo de su poblaci¨®n y su no pertenencia al euro.

En esta ocasi¨®n, el gobierno que preside el liberal flamenco Guy Verhofstadt tiene el dif¨ªcil cometido de encarrilar el debate sobre el futuro de Europa que deber¨¢ desembocar en 2004 en una nueva reforma de los tratados. La tarea no era nada f¨¢cil y el "no" irland¨¦s al Tratado de Niza ha venido a complicarla todav¨ªa m¨¢s.

Por ello, Verhofstadt se ha tomado muy en serio la preparaci¨®n de la llamada "declaraci¨®n de Laeken", en la que se espera que los Quince fijen, a mediados de diciembre, la agenda, el calendario y el m¨¦todo de trabajo para las futuras negociaciones de 2004.

En esa fecha, los gobiernos comunitarios -los quince actuales y tal vez alguno ya de los nuevos socios del centro y este de Europa- van a entrar en una negociaci¨®n constitucional en la que se hablar¨¢, por ejemplo, del reparto de competencias entre la Uni¨®n y sus Estados miembros.

Como prueba de la importancia que la nueva presidencia atribuye a una buena preparaci¨®n de 2004, Verhofstadt ha decidido convocar a un equipo de "sabios" para que le asesoren sobre el desarrollo del semestre belga.

El "grupo de Laeken"

Este "grupo de Laeken", que ya ha celebrado su reuni¨®n constitutiva, est¨¢ formado por el ex presidente de la Comisi¨®n Europea Jacques Delors, el ex ministro polaco de Asuntos Exteriores Bronislaw Geremek, el ex presidente del Consejo italiano Giuliano Amato, el ex primer ministro belga Jean-Luc Dehaene, y el ue ha sido hasta hace muy poco consejero pol¨ªtico de Tony Blair, el joven David Miliband.

Pero aparte de reflexionar sobre el futuro, el Gobierno belga tendr¨¢ otros frentes que atender durante su presidencia comunitaria.

Hasta diecis¨¦is "prioridades" europeas ha llegado a identificar Verhofstadt en su programa, desde continuar a buen ritmo las negociaciones de ampliaci¨®n hasta preparar los ¨²ltimos detalles para la feliz introducci¨®n de las monedas y billetes del euro, el 1 de enero de 2002.

El gobierno "arco iris" de Verhofstadt, en el que se sientan liberales, socialistas y "verdes" de ambas mitades del pa¨ªs, no quiere renunciar a dar impulso a otras pol¨ªticas, como la definici¨®n de indicadores de calidad para el empleo, la puesta en marcha de la estrategia europea de desarrollo sostenible o, por supuesto, el reforzamiento de la implicaci¨®n de la UE en el proceso de paz en Africa central.

El nacimiento de una pol¨ªtica com¨²n en materia de asilo e inmigraci¨®n, la creaci¨®n definitiva de la Fiscal¨ªa europea (Eurojust) y la consolidaci¨®n de la capacidad de defensa ser¨¢n tambi¨¦n prioridades para la nueva presidencia belga.