Milosevic acusa de nuevo al Tribunal de La Haya de vulnerar sus derechos
El ex presidente serbio reclama su puesta en libetad provisional asegurando no contar con los mismos recursos que la acusaci¨®n
El ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic ha protagonizado hoy una nueva escena de acusaciones y tensiones con los jueces del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPI), en la d¨¦cima sesi¨®n de su procesamiento por cr¨ªmenes de guerra y contra la Humanidad.
Como en d¨ªas anteriores, el ex l¨ªder serbio no ha dudado en acusar a los magistrados de La Haya de estar limitando sus derechos de defensa.
Nada m¨¢s comenzar la sesi¨®n, Milosevic ha presentado una nueva demanda de puesta en libertad bajo fianza, afirmando que, al permanecer bajo custodia en la c¨¢rcel del TPI, no se le garantiza la igualdad de condiciones con los abogados de la acusaci¨®n ya que estos disponen de "inmensos recursos" y ¨¦l s¨®lo cuenta "con un tel¨¦fono y que ni siquiera funciona".
"Tengo derecho a la igualdad de medios y por tanto pido mi libertad", apunta. Lo cierto es que, antes del juicio, el ex presidente hab¨ªa denunciado a su derecho a un abogado y se defiende a s¨ª mismo ante el Tribunal por propia elecci¨®n. Adem¨¢s, dispone de un equipo de consejeros jur¨ªdicos que le ayudan a reunir la documentaci¨®n y a preparar sus argumentos.
En cualquier caso, el presidente el Tribunal, el juez brit¨¢nico Richard May, ha interrumpido a Milosevic y le ha instado a interrogar al testigo que esperaba en la sala, tal y como estaba previsto en la agenda de la sesi¨®n, afirmando que las cuestiones "t¨¦cnicas" que defensa y acusaci¨®n puedan plantear ser¨¢n examinadas ma?ana.
M¨¢s tensiones
Milosevic ha reanudado su contra-interrogatorio al sexto testigo de la acusaci¨®n, el ginec¨®logo albano-kosovar Agron Berisha, quien trabajaba en Suva Reka, a 20 kil¨®metros al norte de Prizren, en el sureste de la provincia serbia. Ayer, el m¨¦dico record¨® c¨®mo los abusos de las fuerzas serbias le obligaron a ¨¦l y a su familia a huir a la vecina Albania.
De nuevo, el tono ha vuelto a subir cuando el juez May ha pedido a Milosevic que acortase el interrogatorio e incluso le ha cortado el micr¨®fono, como en otras ocasiones en las que el acusado no respeta los l¨ªmites de tiempo o dedica a propaganda y acusaciones contra el TPI tiempos que se le conceden para la defensa o el interrogatrio de testigos. "No comprendo por qu¨¦ me limita usted", ha exclamado el ex presidente en una de sus ya habituales increpaciones directas al magistrado.
De hecho, Milosevic estaba interrogando al testigo sobre la situaci¨®n actual de los serbios en Kosovo, sin referirse a las denuncias concretas que el ginec¨®lo efectu¨® ayer. El fiscal, Geoffrey Nice, ha reclamado a la corte de jueces que el acusado deb¨ªa limitarse "a las cuestiones centrales de este proceso", es decir los cargos en su contra por su responsabilidad en cr¨ªmenes de guerra y contra la humanidad en Kosovo.
Encolerizado, el ex presidente ha respondido que la campa?a de bombardeos de la OTAN en 1999, que la acusaci¨®n presenta como "cuesti¨®n secundaria", es para ¨¦l una "cuesti¨®n central" directamente relacionada con una de las acusaciones que pesan en su contra; as¨ª,
reiter¨® su tesis de que la huida masiva de los albaneses de Kosovo no fue provocada por las fuerzas serbias sino por el ataque aliado.
Esta versi¨®n ha sido negada por Agron Berisha, quien ayer explic¨® al tribunal c¨®mo las fuerzas serbias masacraron a parte de su familia, y que hoy insisti¨® en que si ¨¦l y su familia huyeron fue por miedo al Ej¨¦rcito y la Polic¨ªa.
En este sentido, el testigo de la acusaci¨®n ha reconocido que las fuerzas de seguridad que llegaron a la localidad no les empujaron "a punta de fusil" hacia la frontera, pero que las masacres perpetradas "eran un mensaje a la poblaci¨®n albanesa para que se marchara".
Mira Milosevic, en La Haya
Por otra parte, fuentes del TPI han anunciado hoy que la esposa de Milosevic, Mira Markovic, ha obtenido por fin el visado de las autoridades holandesas para entrar en el pa¨ªs y visitar a su marido en la c¨¢rcel de Scheveningen, algo que no ha podido hacer desde que comenz¨® el procesamiento el pasado 12 de febrero.
Markovic llegar¨¢ a La Haya el pr¨®ximo 7 de marzo y se quedar¨¢ en la ciudad durante todo el fin de semana. Este viaje estaba previsto para la semana pasada, pero la ex 'primera dama' no consigui¨® el permiso del Gobierno holand¨¦s, que contest¨® que su solicitud se hab¨ªa presentado con mucho retraso.
Milosevic se quej¨® de este problema ante el TPI, al que pidi¨® que intercediera ante las autoridades holandesas para que concedieran el permiso de entrada. El juez May ya ha anunciado que la audiencia del 7 de marzo ser¨¢ m¨¢s corta de lo habitual para permitir que el acusado disponga de m¨¢s tiempo para reunirse con su mujer
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