Pakist¨¢n ignora las cr¨ªticas y prueba su tercer misil en los ¨²ltimos cuatro d¨ªas
Jack Straw se entrevista con Musharraf y se?ala que el riesgo en la zona es "considerable".- India califica de "peligroso" el discurso de Musharraf
El mismo d¨ªa en el que el ministro brit¨¢nico de Exteriores visita Islamabad en un intento de rebajar la tensi¨®n, Pakist¨¢n ha llevado a cabo un lanzamiento de un misil de corto alcance Hataf-II (de tipo Abdali), que puede alcanzar objetivos situados a 180 kil¨®metros. Se trata del tercer ensayo de este tipo realizado en los ¨²ltimos cuatro d¨ªas, una demostraci¨®n de fuerza que ha colocado a Islamabad al borde de librar su cuarta guerra con Nueva Delhi.
Este misil tierra-tierra completa "por ahora" la serie de pruebas que Pakist¨¢n lleva a cabo desde el s¨¢bado, seg¨²n un comunicado oficial. Islamabad inici¨® los ensayos lanzando el Ghauri, un misil de alcance medio capaz de transportar cabezas nucleares a 1.500 kil¨®metros y golpear gran parte de las mayores ciudades en la mitad norte de India.
Ignorando las cr¨ªticas internacionales, realiz¨® otro lanzamiento el domingo, el misil de corto alcance Hataf-III (Ghaznavi), que tambi¨¦n puede transportar cabezas nucleares y es capaz de hacer blanco a 290 kil¨®metros de distancia.
Ofensiva contra la guerra
Pakist¨¢n hab¨ªa informado previamente a India de que llevar¨ªa a cabo estas pruebas, a lo que Nueva Delhi respondi¨®, al igual que lo ha hecho hoy, que no estaba "impresionada" y que son de consumo interno.
Pero los ensayos se han producido en medio de una creciente tensi¨®n, que ha conducido a estas dos potencias a concentrar un mill¨®n de soldados en la frontera de Cachemira. Los analistas advierten de que India podr¨ªa atacar las bases rebeldes en la Cachemira paquistan¨ª, lo que conducir¨ªa a una guerra con riesgo nuclear.
Adem¨¢s, el lanzamiento ha coincidido con la llegada a Islamabad del ministro de Exteriores brit¨¢nico, Jack Straw, enviado por su pa¨ªs, del que tanto India como Pakist¨¢n se independizaron en 1947, para rebajar la tensi¨®n.
Straw ha se?alado tras su encuentro con el presidente paquistan¨ª que el riesgo que supone la situaci¨®n actual en Cahemira es "considerable". El jefe de la diplomacia brit¨¢nica ha asegurado que la entrevista ha sido "constructiva", aunque no ha entrado en detalles
Asimismo, Straw ha explicado que le dijo a Musharraf que es "imperativo" que todos los pa¨ªses que forman parte de las Naciones Unidas adopten medidas contra todas las formas de terrorismo.
Straw ha dicho que la disputa sobre Cachemira s¨®lo puede resolverse con un proceso de di¨¢logo, ya que no puede llegarse a una soluci¨®n por la v¨ªa del conflicto, agregando que el Reino Unido har¨¢ todo lo posible para ayudar a solucionar el conflicto, aunque reconoce que "existen limites a lo que la comunidad internacional puede hacer".
Ma?ana se dirigir¨¢ a Nueva Delhi, donde ser¨¢ recibido por el primer ministro, Atal Bihari Vajpayee, y por su hom¨®logo, Jaswant Singh.
Lejos de una soluci¨®n a la crisis
Mientras tanto, contin¨²a la escalada verbal. Esta ma?ana le ha tocado el turno al ministro de Asuntos Exteriores indio, Jaswant Singh, que ha respondido en rueda de prensa al discurso pronunciado por Musharraf. Si el presidente paquistan¨ª asegur¨® que no iniciar¨¢ la guerra, India ha prometido que no ser¨¢ el primero en usar armas nucleares.
Sin embargo, en un tono muy similar a las palabras paquistan¨ªes, que Singh ha calificado de "peligrosas y decepcionantes", India ha advertido de que responder¨¢ a cualquier acci¨®n militar.
Singh ha se?alado que, de momento, su Gobierno no romper¨¢ relaciones diplom¨¢ticas con Pakist¨¢n y que har¨¢ "alg¨²n gesto hacia Pakist¨¢n" si las autoridades de este pa¨ªs toman medidas contra el terrorismo y cierran de forma definitiva los campos de entrenamiento de terroristas en la parte de Cachemira que controla.
Tras una noche tranquila, esta ma?ana se ha producido un nuevo intercambio de disparos en la frontera, en los que han muerto dos personas y 10 han resultado heridas. Desde la reanudaci¨®n de las hostilidades el pasado d¨ªa 17, 64 personas, 48 paquistan¨ªes y 16 indios, han perdido la vida y unas 60.000 han huido de la zona.
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