B¨¦lgica permitir¨¢ a los extranjeros no comunitarios votar en las municipales en 2006

Los diputados belgas han aprobado esta noche un proyecto de ley que permitir¨¢ a los extranjeros que no pertenezcan a la Uni¨®n Europea (UE) votar, bajo determinadas condiciones, en las elecciones municipales a partir de 2006. El texto ha sido adoptado con los votos al apoyo del partido verde y del democristiano, ambos en la oposici¨®n, ya que la mayor¨ªa liberal socialista estaba muy dividida.

La ley, que se aplicar¨¢ en el pr¨®ximo escrutinio municipal previsto para dentro de dos a?os, estipula que para votar, los ciudadanos extranjeros no comunitarios deber¨¢n estar establecidos en B¨¦lgica desde al menos cinco a?os. Adem¨¢s, tendr¨¢n que inscribirse previamente en un censo electoral, as¨ª como firmar una declaraci¨®n en la que se comprometen a adherirse a los principios de la democracia. Sin embargo, los extranjeros no comunitarios no podr¨¢n presentarse como candidatos en estas elecciones.

El texto ha sido adoptado gracias al apoyo de los partidos franc¨®fonos Ecolo (Verdes) y el Centro Dem¨®crata Cristiano, ambos en la oposici¨®n, ya que la mayor¨ªa liberal socialista estaba muy dividida sobre la cuesti¨®n. El Partido Liberal Dem¨®crata flamenco (VLD) del primer ministro, Guy Verhofstadt, ha votado en contra del texto, adoptado por mayor¨ªa con el apoyo de 80 diputados. En cambio, 58 diputados han dicho no y tres se han abstenido.

El peligro de la extrema derecha

Varios diputados de la oposici¨®n han visto en la adopci¨®n de la ley por una mayor¨ªa "alternativa", que se produce cuatro meses antes de las elecciones regionales, una prueba de la fragilidad de la coalici¨®n de partidos en el poder. Las regionales est¨¢n consideradas como un test para el Gobierno. Adem¨¢s, es una ley que ha salido adelante no sin pol¨¦mica social. Para el diputado cristiano dem¨®crata flamenco (CDV) Pieter De Crem, la medida provocar¨¢ el desplazamiento de numerosos electores hacia la extrema derecha flamenca, representada en el Vlaams Blok. De hecho, el pasado martes, un Comit¨¦ contra el derecho de voto de los extranjeros present¨® 200.000 firmas de ciudadanos flamencos opuestos a la ley.

Por su parte, el diputado liberal franc¨®fono Philippe Monfils, cuyo partido ha votado a favor del texto, considera que unos 120.000 extranjeros se beneficiar¨¢n de este nuevo derecho, que B¨¦lgica lleva discutiendo desde 1970, cuando se present¨® por primera vez en el Parlamento una proposici¨®n de ley sobre la materia. En Europa, Noruega, Suecia, Dinamarca, Holanda e Irlanda ya han reconocido el derecho al voto de los ciudadanos no europeos. Y Espa?a y Portugal se lo han otorgado a aquellos procedentes de pa¨ªses que act¨²an de manera rec¨ªproca. El Reino Unido, por su parte, reconoce el derecho al voto a las personas originarias de la Commonwealth.

Este gesto en favor de los inmigrantes se produce justo cuando la vecina Holanda ha aprobado la ley de asilo m¨¢s controvertida de las ¨²ltimas d¨¦cadas. Esta ley sanciona la expulsi¨®n de 26.000 inmigrantes sin permiso de residencia, que aprobada el pasado martes en el Parlamento por 83 votos a favor y 57 en contra. Propuesto por la coalici¨®n democristiana y liberal en el poder, el plan ha provocado la repulsa del 60% de la poblaci¨®n, el Consejo Nacional de las Iglesias y la organizaci¨®n internacional Human Rigths Watch. La votaci¨®n vino precedida de numerosas manifestaciones en contra de las expulsiones.