Las petroleras podr¨¢n hacer prospecciones en una reserva natural de Alaska
El Senado aprueba el plan de Bush tras m¨¢s de tres a?os de bloqueo
La ¨²ltima barrera que imped¨ªa a las compa?¨ªas petroleras clavar sus picas en una reserva natural de Alaska ha cedido hoy, al aprobar el Senado de Estados Unidos, en una muy re?ida votaci¨®n, abrir el refugio ¨¢rtico a las perforaciones, como deseaba el presidente, George W. Bush. Casi cuatro a?os despu¨¦s de que la C¨¢mara de Representantes diera su visto bueno, ha hecho falta que las elecciones parlamentarias del pasado oto?o cambiaran el equilibrio de mayor¨ªas en la C¨¢mara Alta para dar luz verde al plan de la Casa Blanca, denostado por las asociaciones ecologistas.
El Senado ha aprobado por 51 votos a favor y 49 en contra permitir las prospecciones petrol¨ªferas en el Refugio Nacional de Vida Animal en el ?rtico, 79.380 kil¨®metros cuadrados (la extensi¨®n de Castilla la Mancha) sin infraestructuras terrestres, una zona de gran riqueza biol¨®gica a la que s¨®lo se puede acceder en hidroavi¨®n, situada en el extremo norte del Estado. Es conocido como el Serengeti americano por la biodiversidad que acoge: carib¨²es, alces, glotones, gansos, bueyes almizcleros, osos pardos en verano, osos polares en invierno.
De acuerdo con lo aprobado, las perforaciones deber¨ªan realizarse en un ¨¢rea de 810 hect¨¢reas. La zona afectada es utilizada por los carib¨²s para aparearse y guarda unas reservas de petr¨®leo estimadas en 16.000 millones de barriles (el petr¨®leo de Alaska equivale a 70 a?os de importaciones procedentes de Irak, y la mayor¨ªa de los habitantes de la regi¨®n apoyan las prospecciones).
La propuesta de Bush fue tumbada hace un a?o en el Senado por 54 votos en contra. Entonces, el portavoz de la Casa Blanca asegur¨® que el presidente "seguir¨ªa luchando por los 10.000 empleos que supondr¨ªa la explotaci¨®n"; la medida forma parte del plan energ¨¦tico dise?ado por el Gobierno, y ha sido aprobada precisamente el d¨ªa en el que el petr¨®leo marca un nuevo r¨¦cord en el mercado estadounidense, por encima de los 56 d¨®lares el barril, pese a la decisi¨®n de la Organizaci¨®n de Pa¨ªses Exportadores de Petr¨®leo de elevar su producci¨®n en medio mill¨®n de barriles.
Pero es que por entonces los dem¨®cratas ten¨ªan la mayor¨ªa de la C¨¢mara Alta. Su l¨ªder, Tom Daschle, dec¨ªa: "No vamos a permitir que los republicanos destruyan el medio ambiente". Por su parte, el entonces portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer, aseguraba: "En un momento en que est¨¢n subiendo los precios del petr¨®leo y del gas, el Senado ha perdido una oportunidad para llevar a EE UU a una mayor independencia energ¨¦tica".
Hoy la batalla la han perdido los dem¨®cratas y los ecologistas, y la ha ganado Bush, el Partido Republicano, las petroleras y el Estado de Alaska, que no cobra impuesto de la renta a sus ciudadanos y cada a?o le da a cada uno un cheque de 1.500 d¨®lares a cuenta de las petroleras. Pero sobre todo la han perdido animales como los carib¨²es, que recorren cada a?o 600 kil¨®metros desde Canad¨¢ para criar en esa reserva en los meses de verano. Seg¨²n un informe del Servicio Geol¨®gico del Departamento de Interior, ahora se ver¨¢n reducidos sus lugares de cr¨ªa y la supervivencia de las cr¨ªas, poniendo en peligro la situaci¨®n de la manada, que en 1989 s¨®lo contaba con 178.000 ejemplares.
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