Los sat¨¦lites desnudan la brutalidad en Myanmar

Las sospechas de destrucci¨®n de poblados birmanos y la consiguiente construcci¨®n de campos militares han podido ser confirmadas gracias a las im¨¢genes por sat¨¦lite que ha proporcionado la Asociaci¨®n Americana para el Avance de la Ciencia (AAAS, en sus siglas en ingl¨¦s) a partir de las denuncias realizadas por organizaciones birmanas, que han acusado al ej¨¦rcito de quemar aldeas y de forzar el desplazamiento de poblaciones enteras.

Seg¨²n el AAAS, las tomas de los sat¨¦lites muestran una creciente presencia militar en 25 puntos al este de Myanmar (la antigua Birmania), a costa de la destrucci¨®n de aldeas. "Hemos encontrado evidencias de la total desaparici¨®n de 18 poblaciones", asegura Lars Bromley, investigador del AAAS. "En abril informamos de que algunos pueblos del estado de Karen hab¨ªan sido quemados. Pudimos identificar los restos de los incendios en el suelo y los tejados de las casas", a?ade Bromley.

Los sat¨¦lites han registrado, asimismo, el traslado forzoso de la poblaci¨®n a ¨¢reas remotas controladas por la Junta Militar. Seg¨²n Bromley, en una de las zonas que el AAAS rastre¨®, cercana a un campo del ej¨¦rcito, "aparecieron 31 nuevos poblados en cinco a?os y medio". Aunque podr¨ªa tratarse de un extraordinario baby boom o de alg¨²n programa gubernamental, todo apunta a un reasentamiento obligado de la poblaci¨®n.

"Si recibimos la informaci¨®n de que un ataque en un lugar determinado ha destruido un pueblo, buscamos las im¨¢genes de sat¨¦lite antes y despu¨¦s del suceso", explica Bromley, en cuanto al m¨¦todo del trabajo del AAAS.

Myanmar vive durante estos d¨ªas la mayor protesta que se ha producido en el pa¨ªs desde el golpe de Estado de 1988 que llev¨® al poder a la Junta Militar. La ya conocida como revoluci¨®n del azafr¨¢n, en referencia al color de la t¨²nica de los monjes, que de forma multitudinaria han participado en las manifestaciones, ha recibido un gran apoyo social, a pesar de las amenazas de la Junta Militar, que ha enviado al ej¨¦rcito a reprimir la revuelta. Por el momento, no hay acuerdo con respecto al n¨²mero de v¨ªctimas mortales. Seg¨²n el Gobierno birmano, han muerto 10 personas aunque fuentes diplom¨¢ticas y grupos disidentes elevan a 200 la cifra.