Detenido en Palermo Salvatore Lo Piccolo, 'capo' de la Cosa Nostra
El considerado sucesor de Bernardo Provenzano era buscado desde hace 25 a?os
Salvatore Lo Piccolo, uno de los m¨¢s destacados capos de la mafia siciliana, jefe de la Cosa Nostra, buscado por la polic¨ªa desde hace 25 a?os, ha sido detenido hoy cerca de Palermo. El capo mafioso ha ca¨ªdo junto con su hijo Sandro, tambi¨¦n en busca y captura, desde hace seis a?os, seg¨²n han informado fuentes policiales.
La Polic¨ªa cree que Salvatore Lo Piccolo, alias el Bar¨®n, de 64 a?os y del que no se conoc¨ªa su paradero desde 1983, es el jefe de Cosa Nostra en Sicilia tras la detenci¨®n de Bernardo Provenzano, detenido en abril de 2006 tras cuatro d¨¦cadas de b¨²squeda. Provenzano se escond¨ªa en un caser¨ªo de su localidad natal, Corleone.
En la redada, llevada a cabo en la localidad de Carini, a pocos kil¨®metros de Palermo, han ca¨ªdo tambi¨¦n Andrea Adamo y Gaspare Pulizzi, cuyos nombres figuraban entre los 30 delincuentes m¨¢s buscados de Italia.
Los cuatro han sido detenidos durante una reuni¨®n que manten¨ªan en una casa de campo en Giardinello, a escasos 15 kil¨®metros de Palermo. "Estamos extremadamente satisfechos. Las personas arrestadas no son solamente fugitivos, sino jefes mafiosos que estaban ejerciendo su poder", ha subrayado el fiscal antimafia de Palermo, Francesco Messineo. "Ahora podemos esperar consecuencias positivas en lo relativo al desmantelamiento de su aparato criminal". El jefe de la polic¨ªa de Palermo, Giuseppe Caruso, tambi¨¦n se ha felicitado por las detenciones. "Es un gran resultado, est¨¢bamos sobre la pista de estos jefes desde hace mucho tiempo", ha dicho.
Lo Piccolo comenz¨® su carrera criminal como guardaespaldas de un mafioso siciliano y fue escalando hacia la c¨²pula de la mafia hasta que tom¨® el mando tras el arresto de Provenzano el a?o pasado. En su lucha por el sill¨®n de Provenzano, Lo Piccolo desplaz¨® a otro capo,Matteo Messina Denaro. De hecho, la polic¨ªa cree que en los 18 meses que median entre la captura de Provenzano y la de Lo Piccolo, se han producido cuatro asesinatos que vinculan a la lucha de poder entre ¨¦ste y Denaro.
"Ti amo pap¨¤"
Los Lo Piccolo han sido arrestados en dos chalets, dos casitas de hormig¨®n completamente amuebladas. Al contrario de Bernardo Provenzano, que viv¨ªa en una caba?a en la campi?a, los dos viv¨ªan en verdaderas casas cerca del mar. Para dar con ellos ha sido fundamental la contribuci¨®n de Francesco Franzese, que fue el fiduciario de Lo Piccolo en la gesti¨®n de las extorsiones, informa La Repubblica en su p¨¢gina web.
Hoy, cuando los polic¨ªas llegaron a los chalets e hicieron irrupci¨®n, descubrieron a los cuatros mafiosos reunidos en el garaje. Todos estaban armados y los agentes dispararon algunos golpes. El hijo de Lo Piccolo, Sandro, sali¨® primero, llorando. Seg¨²n los agentes tambi¨¦n grit¨® "ti am¨® pap¨¤" varias veces, como si se estuviera despidiendo. Sin embargo, Salvatore Lo Piccolo sali¨® tambi¨¦n de la casa minutos despu¨¦s. En ella, la polic¨ªa encontr¨® ochos pistolas, muchas agendas llenas de apuntes, dinero, y algunos 'pizzini' - los mensajes en c¨®digo que utilizan los boss para impartir ¨®rdenes- en el ba?o.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
