Per¨² suspende la ley que motiv¨® los disturbios en los que murieron 34 personas
La oposici¨®n al Gobierno de Alan Garc¨ªa exige la derogaci¨®n definitiva de la norma
El Congreso de Per¨² ha suspendido el decreto conocido como Ley de la selva, tras los violentos enfrentamientos del pasado fin de semana en la Amazonia en los que perdieron la vida 34 personas. Esta ley, que hab¨ªa sido rechazada por las comunidades ind¨ªgenas de la selva peruana, permanecer¨¢ suspendida durante 90 d¨ªas con el objetivo de estudiar posibles modificaciones y encontrar una salida a los problemas con los pueblos nativos amaz¨®nicos, que piden que se respeten sus derechos sobre la tierra.
La suspensi¨®n, acordada tras un debate de cinco horas, recibi¨® el apoyo de Partido Aprista, en el Gobierno, la Alizanza por el Futuro, partido de Fujimori, los conservadores Unidad Nacional y la independiente Alianza Nacional. La oposici¨®n al Gobierno peruano, integrada por el Partido Nacionalista Peruano junto con otros grupos minoritarios, rechaz¨® la iniciativa y exigi¨® la derogaci¨®n definitiva del decreto.
El decreto legislativo 1090, conocido como ley de la selva, que modifica la Ley Forestal del a?o 2000, fue aprobado el 28 de junio de 2008 como parte de un grupo de leyes propuestas por el Ejecutivo peruano para adecuarse a las condiciones del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos. El Gobierno sostiene que la norma pretende regular y supervisar la gesti¨®n y aprovechamiento sostenible de los recursos forestales, incluyendo concesiones de ecoturismo y de conservaci¨®n, a trav¨¦s de una autoridad dependiente del Ministerio de Agricultura.
Protestas ind¨ªgenas
Sin embargo, los ind¨ªgenas de la Amazonia peruana temen que los decretos abran la puerta a una descontrolada inversi¨®n privada y denuncian que la norma fue aprobada sin el consentmiento de los pueblos nativos, contra lo establecido por la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT). Desde hace dos meses, unas 5.000 personas de m¨¢s de 60 tribus peruanas, aglutinadas en la Asociaci¨®n Inter¨¦tnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep), se han pronunciado en contra de dichos decretos y han bloqueado carreteras y v¨ªas fluviales, y han obstaculizado las operaciones petroleras y gas¨ªferas de la regi¨®n, lo que ha causado que varias ciudades sufran desabastecimiento de alimentos y, en los ¨²ltimos d¨ªas, cortes de energ¨ªa.
El episodio m¨¢s violento se produjo el pasado fin de semana, cuando 34 personas murieron en los choques entre los nativos y la polic¨ªa , que intentaba romper los bloqueos en las carreteras y oleoductos que estaban asfixiando a varias ciudades de la selva peruana. Los peores enfrentamientos ocurrieron cerca de la localidad de Bagua Chica, a unos 700 kil¨®metros al norte de Lima.
Alan Garc¨ªa pide una soluci¨®n pac¨ªfica para el conflicto
Por su parte, el presidente de Per¨², Alan Garc¨ªa, ha declarado que el Congreso est¨¢ dispuesto a hacer las "variaciones necesarias" a las leyes propuestas por el Ejecutivo. Garc¨ªa ha recordado que el Parlamento modific¨® la mitad de los art¨ªculos de las leyes propuestas por el Gobierno para "defender la selva de los depredadores y cocaleros" y ha agregado que si el Tribunal Constitucional decide que hay una infracci¨®n ser¨¢ "en buena hora" porque esa es una soluci¨®n pac¨ªfica al conflicto.
Alan Garc¨ªa ha condenado los sucesos del pasado viernes en Bagua y ha dicho que la soluci¨®n "no pasa por matar a 24 polic¨ªas. Eso es un crimen que no puede quedar impune". El jefe de Estado dijo que los polic¨ªas tuvieron "voluntad democr¨¢tica y de di¨¢logo" con los nativos pero que murieron "de una manera salvaje y b¨¢rbara".
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