Israel y Ham¨¢s ultiman el canje del soldado israel¨ª secuestrado

Los viajes a El Cairo de negociadores israel¨ªes y palestinos se suceden desde hace d¨ªas para ultimar un acuerdo que propicie el canje de 1.500 palestinos por el soldado Gilad Shalit, capturado en Gaza en junio de 2006, y raz¨®n esgrimida por los Gobiernos israel¨ªes para someter a la franja a un asedio econ¨®mico y militar de efectos dram¨¢ticos para la poblaci¨®n civil. El mecanismo no presenta problemas. Egipto se encargar¨ªa de gestionar el intercambio en varias fases. El problema radica a¨²n, y en ello se esmera un mediador alem¨¢n, en la identidad de los prisioneros.

Seg¨²n varios medios ¨¢rabes -en Israel la censura proh¨ªbe informar sobre el tema-, el Gabinete de Benjam¨ªn Netanyahu se acerca a las exigencias de Ham¨¢s y ha accedido a excarcelar a los milicianos implicados en atentados suicidas en suelo israel¨ª. A cambio, el grupo islamista aceptar¨ªa que varios fueran deportados a pa¨ªses ¨¢rabes. Restan, no obstante, escollos que solventar: los fundamentalistas exigen la puesta en libertad de centenar y medio de palestinos con ciudadan¨ªa israel¨ª, un sapo dif¨ªcil de tragar para Netanyahu. El primer ministro deber¨¢ superar tambi¨¦n la tenaz oposici¨®n de varios ministros de su partido, el Likud. El Ej¨¦rcito respalda el canje.

En las ¨²ltimas semanas se ha allanado el camino. A comienzos de octubre, Ham¨¢s entreg¨® un v¨ªdeo en el que Shalit aparece en buen estado. A comienzos de mes, el Ejecutivo hebreo liber¨® a varios diputados islamistas en prisi¨®n desde la captura del militar, y que estaban sometidos al r¨¦gimen de detenci¨®n administrativa, figura que permite encarcelar a personas sin presentar cargos. El hecho de que no se prorrogara dicha detenci¨®n -siguen en prisi¨®n 15 de los 40 l¨ªderes islamistas encerrados en 2006- es otro indicio de que Israel desea dar carpetazo al espinoso asunto.