Los hombres del Hadramaut
La corresponsal de EL PA?S desgrana en una serie de relatos los aspectos sociales y humanos de la realidad de Yemen
Los hombres del Hadramaut, como los del sur de Yemen, no llevan la t¨ªpica t¨²nica ¨¢rabe. Por arriba, se ponen una camisa o camiseta, y por abajo utilizan el maawiis. Se trata de una tela rectangular que se enrolla alrededor de la cintura, al estilo de un pareo, y luego sobre s¨ª misma para que se sujete. Aunque para mayor seguridad tambi¨¦n hay quien utiliza un cintur¨®n del que cuelga la daga, el omnipresente m¨®vil y, seg¨²n c¨®mo y d¨®nde, incluso un rev¨®lver.
El dise?o de los maawiis es muy variado. Los hay de cuadros Madr¨¢s, de rayas, florales, con arabescos, claros y oscuros. Ahora mismo los que predomina son los de dibujos geom¨¦tricos y colores tierra. Para los aficionados a las telas es la perdici¨®n. Son tan bonitos que resulta dif¨ªcil elegir uno.
Hab¨ªa visto esa peculiar falda masculina en Aden, la capital del sur yemen¨ª, y tambi¨¦n en el vecino Om¨¢n, donde resulta prodigioso c¨®mo los pescadores suben y bajan de las barcas sin que se les descomponga el atuendo. La provincia del Hadramaut es el puente entre ese pa¨ªs y el resto de Yemen. Con su larga costa sobre el mar Arabia resulta natural que sus habitantes compartan costumbres comunes.
Lo que nunca hab¨ªa visto ni en Aden ni en Om¨¢n es la curiosa forma de sentarse de los hombres del Hadramaut. Cruzan las piernas y se atan el pa?uelo del turbante alrededor del cuerpo de forma que su presi¨®n sirva de apoyo a las rodillas. Visto desde fuera el efecto no deja de ser curioso. Da la impresi¨®n de que alguien les hubiera castigado y dejado atados para que no se escapen.
Lo que no se les escapa nunca es una postura comprometida que pueda revelar su intimidad. Y s¨ª, ya s¨¦ que muchos (y muchas) se estar¨¢n preguntando ?y debajo del maawiis qu¨¦? Pues como en el caso de la falda escocesa, se admiten apuestas.
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