El Partido Socialista resucita en las elecciones regionales francesas
El partido de Martine Aubry se impone como primera fuerza frente al de Sarkozy.- El Gobierno se escuda en la elevada abstenci¨®n para minimizar el rev¨¦s electoral
Tras perder las elecciones presidenciales en 2007 y sufrir un batacazo en las ¨²ltimas europeas, en junio de 2009, con un m¨ªsero 16,4%, los socialistas franceses resurgen y, con un 30% de votos, seg¨²n varios sondeos, se imponen como la primera fuerza pol¨ªtica del pa¨ªs, alz¨¢ndose con la victoria de la primera vuelta de las elecciones regionales celebradas este domingo en Francia.
La Uni¨®n por un Movimiento Popular (UMP), la formaci¨®n de centro-derecha de Nicolas Sarkozy, queda en segundo lugar, con un 25-26% de los votos, y sufre el esperado castigo que le pronosticaban todos los sondeos. Hubo un voto de rechazo a Sarkozy y a su pol¨ªtica anticrisis, pero tambi¨¦n un apoyo expl¨ªcito a los gobernantes socialistas que, en su gran mayor¨ªa, dirigen las distintas regiones en Francia.
Europa Ecolog¨ªa, la formaci¨®n verde comandada por el eurodiputado y ex l¨ªder del Mayo del 68 Daniel Cohn Bendit, se confirma como tercera fuerza pol¨ªtica del pa¨ªs, al haber logrado el 13% de los votos. Su alianza con el PS en la segunda vuelta, que se celebrar¨¢ el pr¨®ximo domingo, ser¨¢ clave a la hora de que la izquierda se alce con la mayor parte -si no la totalidad- de las regiones francesas. Las listas deben estar elaboradas el martes.
Escasa participaci¨®n
Una abstenci¨®n elevad¨ªsima, el 52,7%, marc¨® la jornada. Como se preve¨ªa, la mitad de los franceses convocados a las urnas dieron la espalda a la votaci¨®n. A los veinte minutos de que se supieran los primeros datos de los sondeos, el primer ministro franc¨¦s, Fran?ois Fillon, compareci¨® en la televisi¨®n. Serio, cariacontecido, lo primero que certific¨® es la ¨ªnfima participaci¨®n -"una abstenci¨®n r¨¦cord en todas las elecciones regionales"- para luego asegurar, apoy¨¢ndose en esa escas¨ªsima participaci¨®n, que nada est¨¢ a¨²n escrito de cara a la segunda vuelta. Tambi¨¦n se escud¨® en la abstenci¨®n a la hora de traducir el resultado de esta primera vuelta de "unas elecciones regionales" en un plebiscito nacional.
Poco despu¨¦s, la primera secretaria del Partido Socialista franc¨¦s, Martine Aubry, aparec¨ªa ante las c¨¢maras para refrendar la victoria. Seria, contenida, manifest¨® que el resultado de los socialistas franceses era hist¨®rico y que la victoria de ayer les carga de responsabilidad. Despu¨¦s record¨® a los j¨®venes, a las personas mayores y a todos aquellos "que han perdido nivel de vida con la crisis econ¨®mica". "Os esperamos el domingo que viene", concluy¨®, algo m¨¢s sonriente, saludando.
Con este resultado, Aubry se legitima como l¨ªder del PS franc¨¦s, despu¨¦s de haber sido elegida en noviembre de 2008 en un congreso tormentoso y fracasado. Desde entonces -y hasta ahora probablemente- ha estado cuestionada, m¨¢s si cabe cuando en las pasadas elecciones europeas obtuvo un raqu¨ªtico 16,4% de los votos, a un paso de los ecologistas. En una palabra, Aubry se perfila ya como uno de los dirigentes socialistas que pueden aspirar a disputar a Sarkozy las elecciones presidenciales de 2012.
No estar¨¢ sola en esa carrera. S¨¦gol¨¨ne Royal, su oponente en el citado congreso y su m¨¢s directa rival en las filas socialistas, se ha alzado con la victoria, con un 39,8% de los votos, de la regi¨®n de Poitou-Charentes. Una an¨¦cdota sintom¨¢tica: mientras Martine Aubry se dirig¨ªa a los franceses en una alocuci¨®n desde la sede del PS, en Par¨ªs, al mismo tiempo S¨¦gol¨¨ne Royal lo hac¨ªa desde su feudo de Poitou-Charentes, de la que es presidente. Una an¨¦cdota sintom¨¢tica: mientras Martine Aubry se dirig¨ªa a los franceses en una alocuci¨®n desde la sede del PS, en Par¨ªs, S¨¦gol¨¨ne Royal hac¨ªa lo mismo desde su feudo de Poitou-Charentes. "El resultado de esta votaci¨®n tiene dos lecturas: el de la adhesi¨®n de los electores a sus presidentes regionales y el del voto de castigo severo a la derecha", explic¨® Royal, en un discurso medido. No coment¨® en ning¨²n momento sus aspiraciones para convertirse de nuevo en la candidata del PS, pero su posici¨®n, sin duda, tambi¨¦n se refuerza.
La ultra-izquierda pierde impulso: el Frente de Izquierda se a¨²pa hasta el 6%. Pero el Nuevo Partido Anticapitalista, la reciente formaci¨®n de Olivier Besancenot, se hunde con un raqu¨ªtico 2%, lo que supone un retroceso de tres puntos en relaci¨®n con las ¨²ltimas elecciones europeas. Entre otros factores, la pol¨¦mica que sigui¨® a la presentaci¨®n de una candidata anticapitalista, musulmana, proabortista y con velo confundi¨® a sus electores.
Otra formaci¨®n que cosecha un sonoro fracaso es el partido de centro MoDem, del ex ministro Fran?ois Bayrou. Con un 4%, Bayrou y sus seguidores se despe?an, transform¨¢ndose en algo casi residual. Su l¨ªder ve c¨®mo desaparecen muchas de sus posibilidades de presentarse con ciertas garant¨ªas de no hacer el rid¨ªculo a las pr¨®ximas elecciones presidenciales de 2012. Dio la cara anoche en un discurso elocuente: "Ha sido un d¨ªa inquietante para el pa¨ªs: una abstenci¨®n elevad¨ªsima, el ascenso de la extrema derecha... Francia est¨¢ emitiendo se?ales de alarma. Tambi¨¦n tengo que decir, claro, que nuestro resultado es malo".
El debate se centra en determinar si de unas elecciones regionales con una tasa tan alta de abstenci¨®n se debe extraer una lecci¨®n general para Sarkozy. En la izquierda no ten¨ªan ninguna duda. En la derecha s¨ª. Fillon as¨ª lo asegur¨® este domingo. El mismo Sarkozy, que se las ven¨ªa venir, ya avis¨® el viernes: "Las elecciones regionales tienen consecuencias regionales". As¨ª, no habr¨¢ baile de ministros ni cambio de rumbo, aunque, eso s¨ª, avis¨® de que impondr¨¢ un r¨¦gimen de reformas estructurales y econ¨®micas m¨¢s lento.
Le Pen, el cuarto m¨¢s votado
Los sondeos auguran al Frente Nacional de Jean-Marie Le Pen un 12% de los votos, aproximadamente, lo que le convertir¨ªa en la cuarta fuerza pol¨ªtica del pa¨ªs, detr¨¢s de los ecologistas. Es decir, casi el doble de lo que consigui¨® en las ¨²ltimas elecciones europeas, cuando su formaci¨®n alcanz¨® s¨®lo el 6,8% y algunos pronosticaron la paulatina desaparici¨®n de la ultraderecha francesa, subsumida en el centro-derecha de Sarkozy. No ha sido as¨ª. Su l¨ªder, Jean-Marie Le Pen, de 81 a?os, que se presenta por ¨²ltima vez a una elecci¨®n, lo record¨® en la televisi¨®n: "El presidente de la Rep¨²blica nos dio por muertos y enterrados, pero todav¨ªa somos una fuerza nacional, y cada vez con m¨¢s fuerza gracias a los patriotas".
En la regi¨®n de Provenza-Alpes-Costa Azul, donde Le Pen se presenta como candidato a consejero regional, el Frente Nacional obtiene m¨¢s del 20% de los votos. Al norte de Francia, en la regi¨®n de Nord-Pas-de Calais, la hija de Le Pen, Marine Le Pen, candidata tambi¨¦n, logra un porcentaje similar al de su padre y se convert¨ªa, de paso, en la dirigente del partido con m¨¢s posibilidades de suceder al l¨ªder al frente de la formaci¨®n, dentro de como m¨¢ximo un a?o.
La campa?a del Frente Nacional se desarroll¨® con pol¨¦mica: el partido present¨® un cartel electoral que rezaba "No al islamismo" y mostraba a una mujer con burka ante una silueta del mapa de Francia pintada con los tres colores (blanco, verde y rojo) de la bandera argelina. Fue prohibido. Este domingo, un Le Pen crecido lo peg¨®, con la leyenda "censurado", en la tribuna desde la que pronunci¨® su discurso.
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