Obama presiona a Hu Jintao para resolver la crisis nuclear con Ir¨¢n

El presidente estadounidense, Barack Obama, realiz¨® el jueves por la noche -ma?ana del hoy en Pek¨ªn- una inusual llamada telef¨®nica de una hora de duraci¨®n a su hom¨®logo chino, Hu Jintao, durante la cual le urgi¨® a que colaboren para presionar a Ir¨¢n sobre su programa nuclear y enfatiz¨® la necesidad de implementar los acuerdos del G20 para impulsar el crecimiento econ¨®mico. Obama "subray¨® la importancia de trabajar juntos para garantizar que Ir¨¢n cumple sus obligaciones internacionales", seg¨²n inform¨® la Casa Blanca en un comunicado.

Hu asegur¨® al presidente estadounidense que "China concede gran importancia al tema de la seguridad nuclear, se opone a la proliferaci¨®n at¨®mica y al terrorismo y apoya los esfuerzos internacionales para incrementar la cooperaci¨®n sobre la seguridad nuclear", seg¨²n la agencia oficial Xinhua, que no menciona Ir¨¢n. Hu tambi¨¦n record¨® a Obama que unas "relaciones econ¨®micas y comerciales saludables y estables entre China y Estados Unidos sirven a los intereses de ambos pa¨ªses" y dijo que ambas partes deben "gestionar de forma adecuada las diferencias y los asuntos sensibles".

La llamada se produjo despu¨¦s de que el mi¨¦rcoles pasado China diera un golpe de tim¨®n sobre la crisis iran¨ª. La embajadora estadounidense en la ONU, Susan Rice, afirm¨® que Pek¨ªn est¨¢ dispuesto a negociar de forma "seria" con los pa¨ªses occidentales la imposici¨®n de sanciones a Teher¨¢n. "China ha aceptado sentarse e iniciar negociaciones serias aqu¨ª en Nueva York..., como primer paso para lograr que todo el Consejo de Seguridad se sume a la imposici¨®n de un r¨¦gimen de duras sanciones contra Ir¨¢n", dijo Rice a la cadena de televisi¨®n estadounidense CNN. El d¨ªa anterior, la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, mostr¨® su convencimiento de que el Consejo de Seguridad alcanzar¨¢ un consenso sobre las penalizaciones.

El Gobierno chino ha declinado confirmar p¨²blicamente la disposici¨®n de Pek¨ªn a negociar posibles castigos a la rep¨²blica isl¨¢mica, lo que le permite dejar la puerta abierta a otras alternativas. El ministro de Exteriores chino, Yang Jiechi, ha pedido "flexibilidad" en su encuentro con Saeed Jalili, principal negociador iran¨ª para los temas at¨®micos, que lleg¨® ayer jueves a Pek¨ªn para tratar la crisis. Las declaraciones de Yang hechas p¨²blicas no mencionan la posibilidad de sanciones, pero, a diferencia de otras ocasiones, tampoco repiten la habitual posici¨®n china de que ¨¦stas no son una soluci¨®n "fundamental" para el conflicto. Jalili, sin embargo, ha dicho hoy que durante sus conversaciones con las autoridades chinas han coincidido en que las sanciones no son efectivas.

Qin Gang, portavoz de Exteriores, dijo ayer que China "est¨¢ muy preocupada por la situaci¨®n actual" y que incrementar¨¢ la comunicaci¨®n con las otras partes "para impulsar una resoluci¨®n adecuada por la v¨ªa diplom¨¢tica".

Hu Jintao tiene previsto asistir los d¨ªas 12 y 13 de abril a una reuni¨®n internacional sobre seguridad y proliferaci¨®n at¨®mica que tendr¨¢ lugar en Washington, para, despu¨¦s, proseguir viaje a Brasil, Venezuela y Chile.

La disposici¨®n a negociar con Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia y Alemania posibles sanciones a Ir¨¢n marca un cambio significativo en la postura de Pek¨ªn, ya que durante meses se hab¨ªa negado a incrementar la presi¨®n. Los pa¨ªses occidentales creen que la rep¨²blica isl¨¢mica est¨¢ desarrollando un programa de armas at¨®micas, aunque Teher¨¢n dice que esta actividad tiene ¨²nicamente fines pac¨ªficos.

Posici¨®n clave

La posici¨®n de Pek¨ªn es clave, ya que, al ser miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, tiene derecho a veto, y, por tanto, puede paralizar cualquier iniciativa que no tenga su visto bueno. Pek¨ªn obtiene en Ir¨¢n -gran productor de petr¨®leo y gas- el 11% de sus necesidades energ¨¦ticas. El Gobierno chino se opone a que Teher¨¢n desarrolle armas nucleares, pero dice que tiene derecho a contar con un programa nuclear de uso civil.

La nueva actitud de Pek¨ªn puede significar que las sanciones son ya inevitables. El presidente estadounidense, Barack Obama, dijo el martes que quiere una resoluci¨®n en este sentido en semanas. Pero, ?qu¨¦ sanciones podr¨ªan ser aplicadas? Entre las distintas posibilidades, est¨¢n, seg¨²n algunas informaciones, embargo de armas, medidas financieras, congelaci¨®n de activos y la imposici¨®n de restricciones de viajes. Algunos expertos chinos creen que Pek¨ªn est¨¢ dispuesto a apretar un poco las tuercas para enviar una se?al a Teher¨¢n y Occidente, pero que no har¨¢ nada que pueda amenazar sus negocios e inversiones energ¨¦ticas en el pa¨ªs. China y Rusia han aceptado a rega?adientes en el pasado tres rondas de sanciones contra Teher¨¢n por negarse a paralizar sus operaciones de enriquecimiento de uranio.

Jalili tambi¨¦n ha repetido el rechazo de su Gobierno a la propuesta de la ONU de enviar el uranio de bajo enriquecimiento al extranjero para ser procesado en combustible y poder ser utilizado en un reactor de investigaci¨®n iran¨ª que produce is¨®topos de uso m¨¦dico.

La flexibilizaci¨®n de la postura china permitir¨¢ a Hu Jintao acudir a Estados Unidos con un b¨¢lsamo con el que aliviar las tensiones que han marcado las relaciones entre los dos pa¨ªses los ¨²ltimos meses, por encontronazos como la venta de armas estadounidenses a Taiwan, el reciente viaje del Dalai Lama a Washington, el caso Google o el valor del yuan -la moneda china-, que Estados Unidos dice que est¨¢ artificialmente infravalorada, lo que proporciona una ventaja competitiva a las empresas asi¨¢ticas.