Muere en Chile Paul Sch?fer, fundador de Colonia Dignidad
El ex soldado nazi estaba encarcelado por homicidio, torturas y pederastia
En el hospital de una c¨¢rcel y llev¨¢ndose numerosos secretos a la tumba, falleci¨® el s¨¢bdo por un paro cardiorespiratorio a los 88 a?os Paul Sch?fer, fundador y ex l¨ªder de Colonia Dignidad, un enclave que us¨® como centro de tortura y exterminio de presos pol¨ªticos, durante la dictadura del general Augusto Pinochet (1973-1990). Ah¨ª viol¨® a decenas de ni?os durante a?os, y retuvo a cientos de personas bajo un r¨¦gimen tir¨¢nico propio, que operaba como un territorio aparte dentro del pa¨ªs, en el que se hablaba alem¨¢n.
El juez Jorge Zepeda, que investiga los delitos cometidos en Colonia Dignidad, inform¨® de que Sch?fer estaba inconsciente al morir. Se encontraba cumpliendo cuatro condenas que sumaban un total de 33 a?os: siete a?os por homicidio calificado; tres por infracci¨®n a la ley de armas; otros tres por torturas y 20 m¨¢s por abusos sexuales contra menores.
Uno de los abogados querellantes contra Colonia Dignidad, Hern¨¢n Fern¨¢ndez, sostuvo que la muerte de Sch?fer debe ayudar a dar un impulso final a la investigaci¨®n judicial contra sus c¨®mplices para que haya justicia y reparaci¨®n. Todav¨ªa faltan sentencias de segunda instancia y que termine el sumario por los delitos contra los colonos, incluido el de secuestro.
Nacido en 1921 en Siegburg (Alemania), Sch?fer, ex suboficial del Ej¨¦rcito nazi, emigr¨® a Chile tras la Segunda Guerra Mundial, huyendo de acusaciones de abuso de menores. Carism¨¢tico y dominante, consigui¨® arrastrar a otros para que emigrasen a Chile y erigiesen una misi¨®n social bautista en la zona rural del pa¨ªs, benefactora de los pobres.
Para instalarse eligi¨® un terreno de unas 16.000 hect¨¢reas, situado 400 kil¨®metros al sur de Santiago, que se extend¨ªa hasta la frontera con Argentina, al que bautiz¨® como Villa Baviera. Fue su imperio y para¨ªso particular desde 1961. Cerc¨® el lugar e instal¨® un r¨¦gimen tir¨¢nico, aislado del exterior, donde los emigrantes alemanes que llegaron al lugar, unas 300 personas, trabajaron durante d¨¦cadas sin cobrar salario. Hombres y mujeres deb¨ªan vivir separados.
Como adem¨¢s consigui¨® no pagar impuestos, la Colonia prosper¨® con rapidez. Poco se sab¨ªa de ella, hasta que a mediados de los sesenta comenzaron las primeras fugas de colonos, dando cuenta de que Sch?fer, a quien llamaban el "t¨ªo permanente", violaba a adolescentes y ni?os y reprim¨ªa a los colonos, muchos de los cuales ve¨ªan en ¨¦l a un ser superior. Los ni?os y sus padres sent¨ªan que era un "honor" que Sch?fer eligiera a uno de los menores para dormir con ¨¦l.
Profundamente anticomunista y de formaci¨®n nazi, Sch?fer se sum¨® en los setenta a la represi¨®n de la dictadura. La Colonia fue uno de los campos de tortura y exterminio de la Direcci¨®n de Inteligencia Nacional (DINA), el aparato represivo de Pinochet. Las torturas que practicaban en el lugar eran las m¨¢s brutales, cuentan los presos pol¨ªticos supervivientes. Existen denuncias de que en un cerro al interior de la Colonia fueron masacradas m¨¢s de cien personas, que permanecen desaparecidas hasta hoy. Pinochet, su esposa Luc¨ªa, el ex jefe de la DINA, Manuel Contreras, y muchos dirigentes actuales de la derecha, as¨ª como empresarios, eran visitantes asiduos de la Colonia, conocieron a Sch?fer y lo defend¨ªan frente a las acusaciones. Tambi¨¦n recibi¨® en Villa Baviera a dirigentes de la CDU alemana.
Tras el fin de la dictadura, Sch?fer huy¨® de Chile en 1996 para evitar ser encarcelado, una vez que en democracia se abrieron las investigaciones por violaciones a los derechos humanos y abusos contra menores. La polic¨ªa descubri¨® entonces que en la Colonia hab¨ªa c¨¢maras y micr¨®fonos ocultos en ¨¢rboles y postes para vigilar a los colonos, dep¨®sitos subterr¨¢neos de armas, y un archivo con miles de fichas de personajes pol¨ªticos, cuyo contenido no se revel¨®.
Detenido en Argentina, fue trasladado a Chile en 2005. Desde entonces estaba encarcelado. Sch?fer se llev¨® a la tumba el secreto de c¨®mo logr¨® su influencia en altas esferas del poder, qu¨¦ hizo con la fortuna que acumul¨® la Colonia y d¨®nde y c¨®mo hizo desaparecer los cuerpos de los detenidos. Colonia Dignidad sigue existiendo, pero sin el poder de antes, menos aislada del resto del pa¨ªs y con nuevos dirigentes.
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