Muerte anunciada en Mazatl¨¢n
El asesinato de casi una treintena de reclusos a manos de otros reos en una c¨¢rcel de Sinaloa pone en evidencia la esquizofrenia del sistema penal mexicano
En el m¨®dulo 21 de la c¨¢rcel de la localidad mexicana de Mazatl¨¢n no hay ventanas. Es un b¨²nker. Para mayor aislamiento, los accesos ten¨ªan rejas especiales. Por eso mismo, 18 reos que cre¨ªan amenazada su integridad aceptaron hacinarse ah¨ª. Como precauci¨®n extra, 14 de ellos hab¨ªan solicitado ser enviados a un penal de m¨¢xima seguridad. No sab¨ªan que al guarecerse juntos terminar¨ªan facilitando el trabajo a sus ejecutores. Antes de que llegara la orden de un traslado ya aprobado, en el amanecer del lunes pasado, una treintena de reclusos irrumpi¨® y dio muerte a 17 de los 18, dejando armas de gran calibre y un reguero de cuestionamientos sobre el sistema penal de M¨¦xico. "Era una muerte anunciada", dice sin ¨¢nimo po¨¦tico Pedro C¨¢rdenas, director de Prevenci¨®n y Readaptaci¨®n Social del Estado de Sinaloa. "Ellos aceptaron ser recluidos ah¨ª, en penumbras, por su seguridad. En esa c¨¢rcel tenemos cupo para 1.817 presos, y s¨®lo hay 1.650. As¨ª que los pusimos ah¨ª con su consentimiento, en un acuerdo t¨¢cito que buscaba darles seguridad".
Con un mazo, otros internos lograron reventar las puertas, y las c¨¢maras de v¨ªdeo antes de que grabaran la matanza, que perpetraron con un rifle tipo AK 47, una ametralladora tipo Uzi y pistolas de calibre 9 mil¨ªmetros y 38 s¨²per. Luego, los internos recorrieron otros m¨®dulos y, con armas blancas, se cobraron otras 11 vidas.
La gobernaci¨®n sinaloense reprocha al Gobierno federal que no cumpliera el traslado. Y la Administraci¨®n federal responde exigi¨¦ndole que diga c¨®mo es posible que dentro de un penal haya armas como esas. "Ambas partes tienen raz¨®n, pero es un di¨¢logo brutal que pone en evidencia la debilidad del sistema de justicia mexicano: no es posible que el Estado falle al no poder prevenir el delito, como tampoco garantizar hoy la procuraci¨®n de la justicia que impida que haya armas en un penal", opina Emilio ?lvarez Icaza, ex ombudsman del Distrito Federal y promotor de los derechos humanos.
El sistema penal mexicano es, cuando menos, esquizofr¨¦nico. Hay 437 prisiones en el pa¨ªs. Siete de ellas las administra la federaci¨®n. En estas, desde que asumi¨® la presidencia Felipe Calder¨®n, en diciembre de 2006, no ha habido incidentes: ning¨²n muerto, ninguna fuga. Pero en los penales de los Estados la situaci¨®n cambia. Esta semana le toc¨® a Mazatl¨¢n, pero la pasada fue Culiac¨¢n, en el mismo Estado de Sinaloa, donde hubo seis reos asesinados. El mes pasado se registraron incidentes en Tamaulipas, y el a?o pasado, la liberaci¨®n de 53 reos en Cieneguillas, Zacatecas, s¨®lo por mencionar algunos.
Para atender la demanda de los Estados, el Gobierno federal piensa construir 12 penales m¨¢s antes de 2012. Cuando eso ocurra, por primera vez en la historia de un sistema penal que no ha sido modificado en 45 a?os, Estados y federaci¨®n tendr¨¢n cada uno los presos que les corresponden. Pero el sistema de justicia tiene que ser modificado porque, adem¨¢s de la peligrosidad, hay otras aberraciones. La especialista Elena Azaola se?ala que el 90% de las 230.000 personas que componen la poblaci¨®n encarcelada est¨¢ en fase de prisi¨®n preventiva, es decir, sin sentencia. "Y menos del 70% de ellos est¨¢n presos por delitos de baja cuant¨ªa", dice Azaola, al advertir c¨®mo las c¨¢rceles se convierten en universidades del crimen. "Es que en cuanto nos dicen que se trataba de sicarios o de presuntos integrantes del crimen organizado, la sociedad ya no exige que se investigue; pareciera que ya no nos importa si se les hace justicia o no a esas personas, y eso est¨¢ muy mal", se lamenta Mar¨ªa Elena Morera, presidenta de la organizaci¨®n ciudadana Causa en Com¨²n.
Hoy en el penal de Mazatl¨¢n hay 30 reos no identificados, que mataron con armas de fuego y cuchillos a 28 de sus compa?eros, pero esa fue s¨®lo la nota del lunes. Ayer, martes, en M¨¦xico ya casi nadie hablaba de eso.
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