Cambio de Gobierno, cambio de estilo

Ya son cuatro los ministros designados por el presidente electo de Colombia, Juan Manuel Santos; todos ellos t¨¦cnicos, expertos en los temas a los que van a enfrentarse. La canciller, a partir del pr¨®ximo 7 de agosto, ser¨¢ Mar¨ªa ?ngela Holgu¨ªn, ex embajadora en Venezuela y en la ONU y experta en relaciones internacionales. La cartera de Hacienda estar¨¢ en manos de Juan Carlos Echeverry y la de Transporte en las de Germ¨¢n Cardona. La bi¨®loga marina Sandra Bessudo estar¨¢, adem¨¢s, al frente del nuevo Ministerio de Medio Ambiente, seg¨²n anunci¨® Santos ayer desde Londres, donde se reuni¨® con el ex primer ministro brit¨¢nico Tony Blair.

Holgu¨ªn tendr¨¢ como tarea primordial recomponer las relaciones con los vecinos Venezuela y Ecuador y acercarse a la dif¨ªcil Nicaragua; Echeverry, enfrentarse a un d¨¦ficit fiscal del 4,5% del PIB y frenar el creciente desempleo; y Cardona, sacar a Colombia del atraso abismal en materia de infraestructura vial. Bessudo tambi¨¦n cobrar¨¢ protagonismo: aunque Santos ayer no quiso dar muchos detalles, explic¨® que desaparecer¨¢ la actual cartera de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, creada por el Gobierno del presidente saliente, ?lvaro Uribe, para dar paso al Ministerio de Medio Ambiente como entidad independiente en el pa¨ªs con mayor biodiversidad del mundo.

Con estos nombramientos, Santos muestra la intenci¨®n de imponer un nuevo estilo de gobernar. Uribe delegaba poco, rega?aba en p¨²blico a sus ministros y quer¨ªa controlar todos los hilos del poder. Hasta sus cr¨ªticos reconocen las cualidades de Santos para elegir equipo.

La elecci¨®n de Holgu¨ªn fue interpretada por algunos analistas como un hecho esperanzador. La catedr¨¢tica de la Universidad de los Andes Arlene Tickner, experta en las relaciones colombo-venezolanas, le pone un poco de reserva a este optimismo. Piensa que los v¨ªnculos entre ambos pa¨ªses est¨¢n tan deteriorados que volver a enderezarlos ser¨¢ tarea dif¨ªcil. Pero ve se?ales positivas: el discurso conciliador del presidente electo "marca un cambio", y la designaci¨®n de Holgu¨ªn "es una se?al de que el Ministerio de Relaciones Exteriores recobrar¨¢ el protagonismo en el manejo de las relaciones con los pa¨ªses vecinos que estuvo en manos del Ministerio de Defensa", dijo a este peri¨®dico. La trayectoria de Holgu¨ªn indica que es una mujer que no se deja manipular.

Pero no todo estar¨¢ determinado por el deseo de cambio del nuevo presidente, uno de los m¨¢s duros cr¨ªticos de Ch¨¢vez y uno de los primeros en se?alar como muy peligrosa la carrera armamentista del Gobierno bolivariano. El talante impredecible del presidente vecino seguir¨¢ marcando los altibajos de las conflictivas relaciones.

Ch¨¢vez, luego de atacar y amenazar a Santos durante la campa?a presidencial, fue uno de los primeros en felicitarlo y en desearle ¨¦xitos en el "ejercicio de su nueva responsabilidad". Pero en su discurso en la cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Am¨¦rica (Alba), hace m¨¢s de una semana en Ecuador, volvi¨® a la cr¨ªtica: "Ojal¨¢ el nuevo Gobierno de Colombia retire las bases yanquis de territorio sagrado de la hermana patria colombiana; esto ser¨ªa un fruto para evaluar el deseo de cambio". La presencia estadounidense en 12 bases militares colombianas, permitida desde el a?o pasado, fue el ¨²ltimo y m¨¢s grave encontronazo entre los dos pa¨ªses. "Era de esperar que llamara de nuevo la atenci¨®n sobre este tema. Pero su tono no fue agresivo, eso es importante. No le tir¨® a Santos la puerta en la cara", opina Tickner.

En los d¨ªas siguientes a la elecci¨®n de Santos hubo optimismo sobre una pronta normalizaci¨®n de la relaciones con Ecuador, quebradas desde marzo de 2008 por el bombardeo a un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en ese pa¨ªs; murieron 26 personas, entre ellas, el segundo hombre de las FARC, Ra¨²l Reyes. Santos, entonces ministro de Defensa, fue protagonista de ese hecho y existe una orden de captura contra ¨¦l en Ecuador. Si Santos cumple con lo prometido en campa?a ?entregar al presidente Rafael Correa toda la informaci¨®n encontrada en los ordenadores de Reyes?, se acortar¨ªa el camino para una soluci¨®n. Lo divulgado hasta ahora ech¨® m¨¢s le?a al fuego: revela posibles relaciones entre funcionarios del Gobierno ecuatoriano y las FARC. Una de las exigencias inamovibles de Correa para reconducir a su cauce normal la relaci¨®n bilateral es la entrega de ese material.

Pero las cosas se complicaron en los ¨²ltimos d¨ªas: un diario ecuatoriano asegur¨® que el organismo de inteligencia colombiano (DAS) hab¨ªa interceptado las comunicaciones del presidente Rafael Correa, que reaccion¨® indignado. De resultar cierto que lo estaban "espiando", dijo, cerrar¨ªa definitivamente la posibilidad de un arreglo. Las cosas est¨¢n calmadas, de momento, ya que el vecino pa¨ªs vio con buenos ojos las explicaciones del presidente Uribe, que ech¨® la culpa a declaraciones "malintencionadas, probablemente de personas cercanas al DAS". En Colombia hay un esc¨¢ndalo de proporciones gigantescas por las intervenciones telef¨®nicas y los seguimientos ilegales a periodistas, magistrados y pol¨ªticos opositores al Gobierno, por parte de este organismo que depende de la presidencia. El reto de la nueva canciller no ser¨¢ tarea f¨¢cil.