Israel someter¨¢ a refer¨¦ndum toda cesi¨®n en Jerusal¨¦n

No es f¨¢cil imaginar a un l¨ªder israel¨ª, Benjam¨ªn Netanyahu o cualquier otro, devolviendo la mitad de Jerusal¨¦n a un futuro Estado palestino. Jerusal¨¦n ha sido siempre uno de los puntos m¨¢s dif¨ªciles, y sin duda el m¨¢s emocional y explosivo, en las negociaciones de paz con los palestinos. En adelante, tendr¨¢ una dificultad a?adida: Israel solo podr¨¢ ceder territorio de Jerusal¨¦n si su electorado lo aprueba en refer¨¦ndum.

El Parlamento israel¨ª ha aprobado este lunes, despu¨¦s tras siete horas de debate, una ley que impone la celebraci¨®n de un refer¨¦ndum, en un plazo de 180 d¨ªas, antes de ratificar todo tratado internacional que altere la situaci¨®n de los territorios anexionados. La ley afecta sobre todo a Jerusal¨¦n, cuya mitad oriental, que incluye la Ciudad Vieja y los lugares sagrados para jud¨ªos, cristianos y musulmanes, fue conquistada a Jordania en 1967. En 1980 el Parlamento estableci¨® la llamada Ley de Jerusal¨¦n, seg¨²n la cual toda la ciudad pasaba a formar parte del territorio israel¨ª y se convert¨ªa en la "capital eterna e indivisible" del Estado. Esa ley no es reconocida por la ONU ni por ning¨²n pa¨ªs del mundo.

El otro territorio incluido en la nueva ley de refer¨¦ndum es el Gol¨¢n, la meseta conquistada a Siria en 1967. El Gol¨¢n fue incorporado al territorio israel¨ª en 1981 y a sus habitantes les fue ofrecida la ciudadan¨ªa, sin obligarles a renunciar a la ciudadan¨ªa siria. Aunque la ley que sum¨® el Gol¨¢n a Israel no utilizaba la palabra "anexi¨®n", supon¨ªa una anexi¨®n a todos los efectos. La prueba es que a partir de ahora esa zona elevada, de importante inter¨¦s estrat¨¦gico, quedar¨¢ atada a Israel, como Jerusal¨¦n, con una llave referendaria.

Pese a ello, no resultar¨ªa muy improbable que el electorado israel¨ª aprobara la renuncia al Gol¨¢n en caso de un acuerdo de paz con Siria. Lo de Jerusal¨¦n ser¨ªa distinto. Ni Cisjordania ni Gaza han sido anexionados, por lo que la nueva ley no afecta a esos territorios.

El proyecto de ley sobre el refer¨¦ndum fue redactado y propuesto para tramitaci¨®n parlamentaria hace tres a?os, por diputados ultranacionalistas. El texto qued¨® aparcado en varias ocasiones y en algunos momentos pareci¨® que nunca llegar¨ªa a someterse a votaci¨®n ante el pleno de la C¨¢mara. Ha resurgido precisamente ahora, cuando crecen las dudas sobre la voluntad (o la capacidad) de Benjam¨ªn Netanyahu para negociar un acuerdo de paz con los representantes palestinos.

La propuesta ha recibido el apoyo de 65 de los 120 legisladores, mientras que 33 se han opuesto. El Kadima, principal partido de la oposici¨®n, ha votado en contra, aunque algunos de sus diputados se han abstenido. Su l¨ªder, Tzipi Livni, asegura que Netanyahu pretend¨ªa rehuir responsabilidades. "Lo que tenemos es un primer ministro d¨¦bil", dijo. "No estamos hablando de consultar a la gente, sino de establecer un veto popular sobre las decisiones adoptadas por un Gobierno electo y por el Parlamento. Estas decisiones [las referidas a la renuncia de territorios en acuerdos de paz] est¨¢n relacionadas con consideraciones que no pueden ser expuestas al p¨²blico y que el p¨²blico no puede entender por completo".