La plaza de la Liberaci¨®n se pertrecha para una larga resistencia hasta la marcha de Mubarak
La reuni¨®n del Gobierno con la oposici¨®n para ofrecer reformas no aplaca la protesta y en la plaza de la Liberaci¨®n, epicentro de las protestas, aumentan los acampados.- El Ejecutivo anuncia que subir¨¢ los salarios de los funcionarios un 15%
Reacios ante las moderadas propuestas de reforma del Gobierno, los manifestantes de la plaza de la Liberaci¨®n se preparan para una larga resistencia. No ceder¨¢n hasta que el presidente Hosni Mubarak se vaya. El recinto, centro neur¨¢lgico de las masivas protestas contra el r¨¦gimen, se ha llenado de nuevo hoy, tras dos semanas de manifestaciones, con integrantes de todas las capas sociales. Entre los que permanecen concentrados aumentan quienes deciden acampar, dispuestos a aguantar lo que haga falta hasta la marcha del rais. El presidente se ha reunido esta ma?ana por primera vez con el nuevo Gobierno en pleno y ha anunciado un aumento salarial para los empleados p¨²blicos.
Son varios miles de ciudadanos, la mayor¨ªa hombres, que organizan marchas y c¨¢nticos, desde primeras horas de la ma?ana. Sobre todo intentan impedir que los tanques del Ej¨¦rcito abandonen la plaza (algunos incluso duermen entre las ruedas de los veh¨ªculos). Entienden que su presencia garantiza que la revuelta pueda continuar y ofrecen cierta protecci¨®n ante el hostigamiento de los partidarios del Gobierno. El clamor resuena en el centro de El Cairo. "?Vete! ?Mubarak, vete!", gritan los manifestantes. Desde EE UU, el presidente Barack Obama ha avisado esta ma?ana de que Egipto "ya no volver¨¢ a ser lo que era", y en una nueva comparecencia, horas m¨¢s tarde, ha asegurado que se han hecho "progresos" en el proceso pol¨ªtico. Pero ese proceso es todav¨ªa muy d¨¦bil. Un dirigente de los Hermanos Musulmanes ha asegurado que podr¨ªan retirarse de las conversaciones si el Gobierno no se hace eco de sus peticiones. "Nuestra principal demanda", ha recordado Essam el Erian a Reuters, "es que Mubarak se vaya". Mientras, el pa¨ªs trata poco a poco de volver a la normalidad y s¨®lo lo consigue a duras penas. Los bancos han reabierto pero las escuelas y la bolsa siguen cerrados, seg¨²n informa la BBC.
El Gobierno, sin embargo, resiste y demuestra que, con Mubarak o sin ¨¦l, ser¨¢ dif¨ªcil arrancarle concesiones significativas. Tras la reuni¨®n del Consejo de Ministros, se ha anunciado una subida salarial del 15% a los funcionarios y la creaci¨®n la un fondo para indemnizar a los comercios afectados por las revueltas. Han sido las primeras medidas, anunciadas por la agencia oficial MENA y recogidas por France Presse, tras el encuentro que mantuvo ayer el vicepresidente, Omar Suleim¨¢n, con la oposici¨®n.
Suleim¨¢n se reuni¨® con una delegaci¨®n de opositores en la que figuraba un representante de los Hermanos Musulmanes. Eso supuso una novedad, ya que el ilegal movimiento islamista fue siempre el espantajo del r¨¦gimen, la excusa de la dictadura.
El vicepresidente ofreci¨® ampliar la libertad de prensa, liberar a los presos "de conciencia", establecer una comisi¨®n consultiva sobre la reforma de la Constituci¨®n y cancelar, en un futuro indeterminado, un estado de excepci¨®n que dura desde 1981. Los delegados de la oposici¨®n abandonaron la reuni¨®n entre dubitativos y decepcionados. Llevaban dos semanas exigiendo la dimisi¨®n del presidente y asegurando que no negociar¨ªan mientras no se cumpliera esa reivindicaci¨®n. Su encuentro con Suleim¨¢n se desarroll¨®, sin embargo, bajo un gran retrato del dictador, un punto simb¨®lico a favor del inmovilismo. Ahmed Shafiq, el primer ministro, insisti¨® de nuevo en que Mubarak agotar¨ªa su mandato y solo dejar¨ªa el cargo en septiembre, cuando se eligiera un nuevo presidente.
Sin grandes compromisos
Un an¨¢lisis de las propuestas de Suleim¨¢n indicaba la determinaci¨®n del r¨¦gimen, ahora ya sin¨®nimo de Ej¨¦rcito, de regular cuidadosamente los gestos de apertura y de no comprometerse demasiado. Ofreci¨®, por ejemplo, liberar a los centenares de detenidos desde el martes 25, pero a la vez sigui¨® arrestando a activistas y periodistas extranjeros y, sobre todo, a ciudadanos egipcios. Sin embargo, hoy se ha producido la liberaci¨®n de algunos arrestados en las protestas. Entre otros, un alto cargo de la compa?¨ªa estadounidense Google. Otro gesto de cambio ha sido el interrogatorio por parte de fiscales militares al anterior ministro del Interior, Habib el Adli, a quien han pedido explicaciones sobre su actuaci¨®n en los primeros d¨ªas de protestas. Seg¨²n una fuente de seguridad citada por Reuters, El Adli est¨¢ acusado de ordenar la retirada de las fuerzas de seguridad de las calles el d¨ªa 28 de ese mes, lo que provoc¨® un enorme caos (y el consiguiente relevo de Gabinete en el que perdi¨® su cargo), a la vez que les autoriz¨® para disparar fuego real contra los manifestantes.
En el proceso pol¨ªtico, la idea de crear una comisi¨®n sobre la reforma constitucional que deber¨ªa alcanzar conclusiones a principios de marzo resultaba atractiva; sin embargo, no exist¨ªa garant¨ªa alguna de que esas conclusiones fueran a ser aceptadas. ?Libertad de prensa? La hegem¨®nica televisi¨®n p¨²blica segu¨ªa ofreciendo una cobertura aberrante de la crisis, mostrando im¨¢genes de apoyo a Mubarak y atribuyendo la revuelta a esp¨ªas y conspiradores extranjeros. Esos mensajes de fomento a la paranoia colectiva calaban en amplias capas de la sociedad. En un comunicado tras la reuni¨®n, Suleim¨¢n insisti¨® en referirse a "elementos extranjeros que trabajan para minar nuestra estabilidad".
Contin¨²an las protestas en la calle
La reuni¨®n de Suleim¨¢n con la oposici¨®n no convenci¨® ayer a la multitud de la plaza de la Liberaci¨®n. Arreciaron los gritos contra Mubarak y la voluntad de mantener la protesta (que ayer congreg¨® de nuevo a muchas decenas de miles) hasta lograr sus objetivos, que incluyen la dimisi¨®n inmediata de Mubarak. Tambi¨¦n creci¨® cierta desconfianza frente al Ej¨¦rcito, hasta ahora mimado por la multitud. Los esfuerzos militares por levantar las barricadas que proteg¨ªan a los manifestantes, por reducir su espacio y por aislarlos del resto de El Cairo, junto a las peticiones de disoluci¨®n de la protesta lanzadas por el ministro de Defensa y del jefe del Estado Mayor, dejaban pocas dudas sobre hacia d¨®nde se inclinaban los mandos del Ej¨¦rcito.
Liberado un alto cargo de Google desaparecido tras participar en una manifestaci¨®n
Acaba de ser puesto en libertad, Wael Ghonim, uno de los l¨ªderes de las protestas que se desarrollan desde el pasado 25 de enero en El Cairo. El joven responsable de Marketing de Google para Oriente Medio y el Norte de ?frica, llevaba en paradero desconocido desde el pasado 27 de enero. Ha sido puesto en libertad esta tarde. Viv¨ªa en El Cairo, Egipto, y lo ¨²ltimo que sus amigos sab¨ªan de ¨¦l fueron unos mensajes que dej¨® en la red social twitter .
En la plaza de Tahrir le aclaman como un l¨ªder y llevaban pancartas con su nombre. Al mismo tiempo, los medios afines al Gobierno de Mubarak le presentaban como un traidor al r¨¦gimen. El domingo, las autoridades egipcias, que hasta el momento hab¨ªan permanecido en silencio, hablaron por fin y anunciaron su intenci¨®n de liberarle. Seg¨²n el multimillonario Naguib Sawiris, quien confirm¨® que el vicepresidente Omar Suleiman le hab¨ªa garantizado la liberaci¨®n de Wael Ghonim, "es un her¨®e" para el pueblo egipcio.
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