Cuba, en busca de un modelo

Desde que Ra¨²l Castro asumi¨® el mando debido a la enfermedad de su hermano Fidel, hace m¨¢s de cuatro a?os, expres¨® la necesidad de introducir cambios "estructurales" en el modelo econ¨®mico para hacer sostenible el socialismo cubano, cada vez m¨¢s carcomido por la ineficiencia. Desde entonces, diversas medidas de corte aperturista han sido adoptadas, las primeras tan elementales como permitir que los cubanos se alojen en hoteles o puedan comprar un ordenador o un tel¨¦fono celular, y otras que implican transformaciones de calado, como el reparto de tierras ociosas del Estado a los campesinos o la ampliaci¨®n de los m¨¢rgenes para la iniciativa privada.

En este tiempo, en paralelo a las consignas revolucionarias y los discursos estirados, ha ido avanzando y dibuj¨¢ndose un camino de reformas que, aunque t¨ªmidas y con vaivenes, han marchado en la direcci¨®n de una apertura econ¨®mica, que no pol¨ªtica. Sin embargo, seg¨²n el propio Castro admite, lo hecho hasta ahora es insuficiente. El VI Congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC) tiene como ¨²nico tema en agenda el econ¨®mico, y debe aclarar algunas cosas fundamentales, como definir qu¨¦ tipo de modelo es el que se busca y cu¨¢les son los l¨ªmites de los cambios, al menos los iniciales.

Ya se sabe que en Cuba las palabras reforma y transici¨®n son tab¨², al igual que lo eran en Vietnam durante el VI Congreso de los comunistas de ese pa¨ªs, en 1986, que abri¨® la puertas a la transformaci¨®n del pa¨ªs. Hoy en el PCC se habla s¨®lo de "actualizaci¨®n del modelo", del mismo modo que en Vietnam el concepto era "renovaci¨®n" (Doi Moi). Economistas cubanos aseguran que es muy pronto para establecer similitudes entre ambos procesos, sobre todo en cuanto al alcance. Pero el esp¨ªritu no es muy distinto.

"De lo que se trata es de transitar de un modelo estatal f¨¦rreamente centralizado a otro de econom¨ªa mixta, con espacios cada vez mayores para el mercado y la iniciativa privada, con la diferencia sustancial que Vietnam empez¨® hace 25 a?os", asegura un soci¨®logo cubano.

El documento base que discutir¨¢n - y con toda seguridad aprobar¨¢n - los 1.000 delegados al VI Congreso, tiene 291 propuestas incluidas en el "Proyecto de Lineamientos de la Pol¨ªtica Econ¨®mica y Social de Cuba". Estos lineamentos han sido sometidos en los ¨²ltimos meses a un amplio proceso de discusi¨®n en todo el pa¨ªs, y las sugerencias recogidas han modificado alrededor del 60 % del articulado, seg¨²n declar¨® el ex presidente norteamericano James Carter en una reciente visita a la isla. Lo que no se ha dicho todav¨ªa es qu¨¦ tipo de enmiendas son.

Los lineamientos, en esencia, apuestan por la descentralizaci¨®n y desestatizaci¨®n, la ampliaci¨®n de la iniciativa privada (en los ¨²ltimos meses se ha duplicado el n¨²mero de licencias de trabajo por cuenta propia concedidas) y un mayor uso de los instrumentos de la econom¨ªa de mercado, tanto para gestionar las pol¨ªticas macroecon¨®micas como las decisiones microecon¨®micas.

Se habla de salarios diferenciados y vinculados a la productividad, de reducir gastos sociales y tambi¨¦n de despidos en un pa¨ªs que se enorgullec¨ªa del pleno empleo (el plan era reducir antes del verano las plantillas estatales en m¨¢s de 500.000 personas, pero ha sido aplazado). Adem¨¢s del fin de las pol¨ªticas igualitaristas, se recoge la voluntad de estimular las pymes y cooperativas en diversos sectores y de abrir el mercado inmobiliario.

El conjunto de medidas parecen apuntar hacia la creaci¨®n de un escenario de "socialismo de mercado" que poco tiene que ver con la realidad cubana actual, pero hay demasiadas cuestiones sin definir todav¨ªa, aseguran diversas voces. Un ejemplo es c¨®mo hacer compatible el sistema de planificaci¨®n socialista, que se mantiene, con la ampliaci¨®n del mercado. "El plan est¨¢ por encima del mercado, pero... ?cu¨¢les son los l¨ªmites?, se preguntaba recientemente el economista cubano Pavel Vidal en una entrevista. "Se tiende a pensar que con control, previsi¨®n y disciplina se van a resolver los problemas (...) Si vamos a intentar perfeccionar lo que no ha funcionado por d¨¦cadas, entonces no llegaremos a ning¨²n lado", indicaba.

Adem¨¢s del contenido, est¨¢ el ritmo de las reformas. Algunos aseguran que aunque se haga todo bien ya no queda tiempo, y de cambios pol¨ªticos el VI Congreso del PCC ni hablar¨¢