Los franceses dan la espalda al giro ultra de Sarkozy
El socialista Fran?ois Hollande mantiene una c¨®moda ventaja de entre ocho y diez puntos de ventaja, mientras Fran?ois Fillon se desmarca del extremismo del presidente
El cambio desde Merkozy a Sarkopen no rinde de momento el menor fruto. Las ¨²ltimas encuestas para las presidenciales francesas reflejan que la estrategia electoral de Nicolas Sarkozy -abandonar su idea original de hacer una campa?a basada en la colaboraci¨®n con la canciller alemana para acabar abrazando las tesis ultranacionalistas y de extrema derecha de Marine Le Pen- est¨¢ resultando un fiasco en toda regla. Fran?ois Hollande, el candidato socialista, no solo aguanta el tir¨®n sino que parece consolidar su c¨®moda ventaja; los cuatro sondeos publicados el jueves y el viernes le dan ganador el 6 de mayo por una diferencia de entre ocho y diez puntos, y tres de ellos anotan un descenso en la intenci¨®n de voto del presidente saliente.
La encuesta de BVA da una ventaja de nueve puntos a Hollande, que sube un punto y medio en cuatro d¨ªas y se coloca en el 54,5%. El sondeo diario de IFOP del viernes mantiene intacta su ventaja de diez puntos, como el de Opinionway, donde el socialista sube dos puntos desde el primer turno. Solo CSA registra (el d¨ªa 24) una ganancia de dos puntos de Sarkozy, que as¨ª y todo seguir¨ªa ocho por debajo.
En las presidenciales de 2007, los sondeos del 28 de abril clavaron (medio punto arriba o abajo) el resultado final. Esta vez el trasvase de votos de los perdedores es m¨¢s complejo, porque Sarkozy necesita captar casi todo el apoyo de los votantes del Frente Nacional (18% en la primera vuelta) y del centrista Fran?ois Bayrou (9,6%). Una media de los sondeos sugiere que el presidente recoger¨ªa hoy el 48% de los votantes de Le Pen, y el 21% de los de Bayrou. Mientras que Hollande recibe menos de la derecha (uno de cada cinco) pero m¨¢s del centro (un 31%).
Sarkozy conf¨ªa en remontar con el debate televisado del mi¨¦rcoles pr¨®ximo. El miedo a la crisis y al paro (4,3 millones de personas en marzo) acent¨²an la incerteza, y la cifra de indecisos sigue siendo alta (19%). Pero si en 2007 tanto Sarkozy como su rival, S¨¦gol¨¨ne Royal, eran aspirantes sin experiencia, hoy el l¨ªder de la derecha se presenta con su pasado a cuestas y un mill¨®n m¨¢s de parados.
Tampoco el presente da muchas esperanzas a los suyos: su campa?a estridente, populista y brutal, dise?ada por su asesor Patrick Buisson, palad¨ªn de la uni¨®n de todas las derechas, ha fracturado a la UMP. Aunque Sarkozy ha impuesto la ¡®omert¨¤¡¯, los moderados no ocultan su desolaci¨®n ante un giro de tuerca que pone al gaullismo a los pies de Le Pen. Solo el primer ministro, Fran?ois Fillon, ha tomado t¨ªmidamente distancia de este nuevo cruce llamado ¡®Sarkopen¡¯ al declarar que ¡°hay ideas del Frente Nacional que no son compatibles con los valores de la Rep¨²blica¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.