Aurora Dorada: ¡°Hay que minar las fronteras para frenar la inmigraci¨®n¡±
El partido de ultraderecha consigue 21 esca?os en el Parlamento griego ¡°Mientras haya un solo griego en paro, no nos dan ninguna pena los extranjeros¡±, aseguran
La guardia pretoriana que acompa?a a Nikos Mijaloliakos, l¨ªder del neonazi Aurora Dorada, meti¨® anoche el primer susto en el cuerpo a un grupo de periodistas que aguardaba en la sede del partido al jefe. "Todos de pie", ordenaron los esbirros a la entrada de este; los informadores que no lo hicieron, fueron ¡®invitados¡¯ a salir del local. El pasado militar de Mijaloliakos imprime car¨¢cter.
La sede de Aurora Dorada era el s¨¢bado un torbellino de entusiasmos. Mocetones vestidos de negro, con botas militares y cascos relucientes; tatuajes que casi no abarcan los correspondientes b¨ªceps; caras de malas pulgas, testosterona, anabolizantes: el retrato robot del perfecto militante. Nada de paridades, y eso que los muchachos se cuadran ante Urania Mijaloliakos, hija del l¨ªder y responsable de las nuevas generaciones "y de la secci¨®n femenina" del partido. "S¨ª, claro que hay mujeres en el movimiento, el 30% m¨¢s o menos. En Aurora Dorada hay de todo: tenemos militantes de 16 a 86 a?os; madres, hijas, familias enteras", explica.
No pudo presentarse a los comicios por tener 24 a?os (los candidatos deben haber cumplido los 25), pero se sabe la cartilla de Aurora Dorada como si la hubiera mamado: "No somos neonazis en absoluto, porque no somos alemanes. Ni fascistas, porque no somos italianos ni creemos en el Estado. Somos griegos nacionalistas", dispara. "En 1994 nos presentamos a las elecciones por primera vez, pero ma?ana [por el domingo] vamos a sacar entre el 6% y el 7% de los votos". Clavado: el movimiento, con casi el 7%, ha logrado colocar a 21 de los suyos en el Parlamento.
Entre sentidas referencias a Primo de Rivera, Alcatraz ¨Cel Alc¨¢zar de Toledo- y el neonazi Pedro Varela (encarcelado por difundir ideas genocidas desde su librer¨ªa en Barcelona), Urania Mijaloliakos despliega el (escaso) programa electoral del partido: ¡°Grecia para los griegos; fuera extranjeros¡±. ?Todos? ¡°No tenemos problemas con los legales, pero son un porcentaje muy peque?o. Pero a los indocumentados hay que echarlos a todos. Algunos barrios en el centro de Atenas est¨¢n llenos de extranjeros, y debemos ayudar a nuestros compatriotas.
"Nos temen porque tenemos una ideolog¨ªa. Por esa misma raz¨®n no vamos a traicionar nuestras ideas pactando con cualquiera"
Urania Mijaloliakos, hija del l¨ªder de Aurora Dorada
Desde que empez¨® 2012, 14 griegos han muerto a manos de inmigrantes¡± (datos no confirmados). Aurora Dorada ha cosechado parte de su ¨¦xito con repartos de v¨ªveres y ropa -solo a griegos- en los barrios m¨¢s degradados de Atenas, Patras y Sal¨®nica.
El partido tiene claro c¨®mo solucionar el problema de la inmigraci¨®n ilegal: "Hay que proteger las fronteras, y proponemos poner minas a todo lo largo de las mismas. No para matarlos, sino para impedir que entren en el pa¨ªs. Eso, m¨¢s la vigilancia del Ej¨¦rcito, blindar¨¢ Grecia. Mientras haya un solo griego en paro, no nos dan ninguna pena los extranjeros".
"Nos temen porque tenemos una ideolog¨ªa. Por esa misma raz¨®n no vamos a traicionar nuestras ideas pactando con cualquiera, y menos con los que han saqueado el pa¨ªs", anticipaba Urania Mijaloliakos un d¨ªa antes de las elecciones. "¡ Solo si nos ofrecen las carteras de Defensa, Exteriores, Econom¨ªa y Educaci¨®n en el Gobierno, nos lo pensar¨ªamos", bromea la hija del l¨ªder, a medio camino entre el farol y la bobada.
En la antesala, decenas de j¨®venes black dress code -el uniforme de las marchas, dice Urania Mijaloliakos-, zascandilean entre expositores de libros (t¨ªtulos sobre el White Power, el Mein Kampf, etc¨¦tera) y un peque?o puesto de mercadotecnia en el que se mezclan mecheros y banderitas con las siglas y el anagrama, runas celtas, ced¨¦s de m¨²sica metal y punk, el As¨ª habl¨® Zaratrusta de Strauss y colgantes sospechosamente nazis. Aunque para nacionalsocialista, la ense?a del partido: una casi esv¨¢stica negra sobre fondo rojo.
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