Europa debe acabar este juego macabro
La primera econom¨ªa mundial, la UE, se muestra incapaz de autogestionarse de manera acorde con sus responsabilidades mundiales
Estamos asistiendo a una quincena de infarto. El 30% de la econom¨ªa mundial no acaba de resta?ar sus heridas y la crisis econ¨®mica muestra para Europa su cara m¨¢s cruenta.
Aquella crisis, que se inici¨® en EE UU ¡ªy que algunos ingenuos creyeron que nunca les llegar¨ªa¡ª se convirti¨® en mundial y sus efectos no se hicieron esperar. La r¨¢pida intervenci¨®n internacional consigui¨® frenar en un primer momento los efectos globales m¨¢s dram¨¢ticos. No hay que olvidar y dejar de valorar positivamente las dos primeras reuniones del G-20. Pero, no obstante, esa crisis se fue concentrando poco a poco en los pa¨ªses desarrollados y, desde hace varios a?os, el crecimiento mundial ha ido recayendo sobre las espaldas de los pa¨ªses emergentes.
Hoy nadie discute que Europa, y en concreto la eurozona, se ha convertido en el problema m¨¢s acuciante. Todas las miradas se centran en nosotros, y con raz¨®n. La primera econom¨ªa mundial ¡ªas¨ª es tomada la UE en su conjunto y no conviene olvidarlo¡ª se muestra incapaz de autogestionarse de manera acorde con sus responsabilidades mundiales.
Las pr¨®ximas semanas se presentan inciertas, con las elecciones griegas, los resultados del rescate (?de qui¨¦n estamos cautivos?) a Espa?a y sus posibles salpicaduras a Italia como puntos calientes. Con una reuni¨®n del G-20 que, sin lugar a dudas, versar¨¢ sobre Europa. Y con un Consejo Europeo a finales de junio que tiene que cerrar el c¨ªrculo de tensi¨®n y acabar este juego macabro de incapacidad decisoria en tiempo ¨²til: ya nadie acepta soluciones incompletas.
Mientras, los europeos sufren y el resto del mundo observa enmudecido c¨®mo una bella historia se suicida. Aquella historia de un grupo de pa¨ªses que, tras las tinieblas de las guerras, fueron capaces de enfrentarse arremangados con un ¡°nunca m¨¢s¡± a la bajeza y un ¡°siempre s¨ª¡± al avance visionario hacia el futuro. Ahora esos mismos pueden autofracasar. Nadie se lo merece.
Javier Solana es Distinguido Senior Fellow de Brookings Institution y presidente de ESADEgeo.
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