La rebaja del salario m¨ªnimo provoca divisiones en el Gobierno de Grecia

Lleg¨® el momento de la verdad para el Gobierno griego. El Ejecutivo tecnocr¨¢tico, liderado por el conservador Andonis Samar¨¢s y apoyado parlamentariamente por socialistas e izquierda moderada, se enfrenta a su primer examen con la lecci¨®n hilvanada con alfileres: o convence a la troika, de visita en Atenas, de su voluntad real de reformas, o el siguiente tramo de la ayuda (31.000 millones de euros, a desembolsar en septiembre) no llegar¨¢ y el pa¨ªs estar¨¢ varios pasos m¨¢s cerca del impago (en el segundo trimestre, el riesgo de insolvencia lleg¨® al 96,7%, seg¨²n CMA), porque el Estado solo tiene dinero hasta finales de agosto. Entretanto, como para ir calentando motores, desde Alemania proliferan nuevas invitaciones a una salida ordenada del euro de Grecia, el ya famoso #Grexit, mientras los m¨¢s optimistas plantean abiertamente la necesidad de una nueva reestructuraci¨®n de la deuda.

El contexto en que se desarrollar¨¢ la visita de los hombres de negro ¡ªma?ana se entrevistan con el ministro de Econom¨ªa, Yanis Sturnaras; el jueves, con Samar¨¢s¡ª tiene un denominador com¨²n: qu¨¦ recortar, d¨®nde ahorrar, de d¨®nde sacar dinero, en concreto 11.700 millones de euros suplementarios entre 2013 y 2014 a demanda del Fondo Monetario Internacional (FMI), que junto con la Comisi¨®n Europea (CE) y el Banco Central Europeo forma la troika. En el fondo, los tres partidos que apoyan al Gobierno est¨¢n de acuerdo (tambi¨¦n en pedir a la troika un plazo extra de dos a?os para alcanzar el equilibrio presupuestario), pero difieren en la forma: hay determinadas l¨ªneas rojas, como el salario m¨ªnimo o las pensiones, que para algunos integrantes del Ejecutivo no se pueden franquear sin coste social o pol¨ªtico. Sin embargo, este mi¨¦rcoles la patronal de las pymes, que suponen el 55% del tejido empresarial griego, solicit¨® al Gobierno una rebaja del 5% del salario m¨ªnimo, que ya fue recortado en febrero hasta los 585 euros (y un 10% adicional, para los menores de 25 a?os). Las pensiones bajaron entonces un promedio del 15%, con una rebaja suplementaria del 10% para las superiores a 1.300 euros. Algunos medios griegos especulan estos d¨ªas con que el Ejecutivo de Samar¨¢s ofrecer¨¢ a la troika una nueva bajada de las pensiones m¨¢s altas y recortes a granel en ayudas sociales. Pero el salario m¨ªnimo sigue siendo el nudo gordiano, hasta el punto de que el propio ministro de Trabajo, Yanis Vrutsas, se ha mostrado abiertamente en contra de tocarlo; por parecidas razones, dimiti¨® hace unas semanas el n¨²mero dos del ministerio.

Las renuncias de altos cargos muestran las v¨ªas de agua de este Gobierno de circunstancias, que ma?ana recibe la visita del presidente de la Comisi¨®n Europea, Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso (la primera desde 2009). A la renuncia del designado ministro de Econom¨ªa Vasilis R¨¢panos, d¨ªas antes de tomar posesi¨®n del cargo (oficialmente, por razones de salud, pero tambi¨¦n, se dice, por discrepancias sobre la renegociaci¨®n del rescate), se ha a?adido la del encargado del organismo estatal de las privatizaciones, Kostas Mitropulos, que aludi¨® falta de apoyo del Gobierno y retraso en el plan previsto.

Las privatizaciones pretenden ser, para el Ejecutivo de Atenas, el mirlo blanco de su programa de ajustes, pero la realidad contradice sus intenciones: en 2012 solo se privatizar¨¢ la loter¨ªa nacional y se pondr¨¢ a la venta el edificio que alberg¨® el centro de prensa de los Juegos Ol¨ªmpicos de 2004, en Atenas; de los 3.000 millones de euros que el Estado griego pretend¨ªa obtener, entrar¨¢n en caja solo unos 300, seg¨²n Mitropulos. De las 28 privatizaciones previstas hasta 2015, por 20.000 millones de euros, solo se han acometido cuatro (1.800 millones). Hay acuerdo para desmantelar 20 organismos p¨²blicos, pero no hay fecha, que s¨ª tienen, en cambio, las movilizaciones de trabajadores, en pleno trasvase del aparato sindical desde el tradicional Pasok hacia el principal partido de la oposici¨®n, el izquierdista Syriza. As¨ª las cosas, o Andonis Samar¨¢s se guarda un conejo en la chistera en forma de nuevos y convincentes ajustes, o saldr¨¢ con un vistoso cate de su primer encuentro con la troika.