David contra Goliat
Un buen resultado, aun perdiendo, impedir¨¢ que se diluya el impulso pol¨ªtico de Capriles
Puede pasar cualquier cosa en las elecciones de ayer en Venezuela, pero hay buenas posibilidades de que el candidato de la oposici¨®n Henrique Capriles Radonski obtenga mejores resultados en los comicios que cualquiera de sus antecesores, y que ¡ªgane o pierda¡ª ponga contra las cuerdas al Gobierno del presidente Hugo Ch¨¢vez. Todo hace pensar que, aun si Capriles perdiera por un estrecho margen, un buen desempe?o en las elecciones del domingo le permitir¨¢ mantener unida a la oposici¨®n, y convertirse en una alternativa viable a un presidente que ya lleva 14 a?os en el poder, tal vez padezca un c¨¢ncer terminal, y que no tiene ning¨²n sucesor que pueda derrotar a Capriles.
Seg¨²n la Constituci¨®n de Venezuela, si el presidente muere durante los primeros cuatro a?os de su mandato deben realizarse nuevas elecciones dentro de 30 d¨ªas. Si Capriles no llega a ganar el domingo, pero sale fortalecido de esta elecci¨®n, tendr¨¢ una buena posibilidad de llegar a la presidencia antes de la conclusi¨®n del periodo de mandato de Ch¨¢vez, en 2019.
Aunque Ch¨¢vez se ha beneficiado de la mayor bonanza petrolera de la historia reciente del pa¨ªs, la oposici¨®n ha ganado terreno. En un informe del 26 de septiembre titulado Ahora, o dentro de muy poco, el banco Barclays dijo a sus clientes que ¡°incluso en el caso de una victoria de Ch¨¢vez, creemos que dadas las evidencias de su pobre estado de salud, si no es ahora, el cambio pol¨ªtico se producir¨¢ dentro de poco tiempo¡±.
Aunque Ch¨¢vez tiene mejor aspecto que hace unos meses y dice que est¨¢ libre de c¨¢ncer, existen motivos para creer que luce mejor porque ha interrumpido su tratamiento, y no porque se haya curado.
Una medici¨®n diaria de las apariciones p¨²blicas de Ch¨¢vez, realizado por la empresa consultora venezolana ODH, revela que su promedio diario de apariciones televisivas durante las tres primeras semanas de septiembre fue mucho m¨¢s bajo que durante el mismo periodo de agosto, y tambi¨¦n m¨¢s bajo que el de sus apariciones p¨²blicas durante el mismo periodo antes de las elecciones de 2006.
Eso es algo que ser¨ªa dif¨ªcil de explicar, a menos que Ch¨¢vez est¨¦ enfermo: no tiene sentido que haya disminuido sus apariciones p¨²blicas en el ¨²ltimo tramo de la campa?a. Y tampoco tiene sentido que haya hecho m¨¢s apariciones p¨²blicas hacia el final de su campa?a de 2006 ¡ªcuando las encuestas le adjudicaban una ventaja mucho mayor¡ª que ahora. En cuanto a las elecciones de ayer, Ch¨¢vez tiene una clara ventaja, gracias al uso masivo de petrod¨®lares del Gobierno, la intimidaci¨®n de votantes opositores, y el control casi absoluto del tiempo televisivo.
Tal como me dijo Capriles en una entrevista reciente, ¡°es la lucha de David contra Goliat, en la que me enfrento a todos los recursos del Estado¡±, y ¡°contra un Gobierno que controla todas las instituciones, y juega sucio¡±. Sin embargo, los venezolanos quieren un cambio porque la inflaci¨®n, la criminalidad, la corrupci¨®n y otros problemas han llegado a niveles intolerables, agrego.
Varias encuestas se?alan que Ch¨¢vez ganar¨¢ por un margen de 10 puntos porcentuales, pero otras, como la de la respetada empresa Consultores 21, se?alan que Capriles ganar¨¢ por hasta 3 puntos porcentuales. Pero casi todas coinciden en que Capriles ha estado cerrando la brecha en las ¨²ltimas semanas.
Todo indica que esta elecci¨®n ser¨¢ mucho m¨¢s pareja que la de 2006, cuando Ch¨¢vez gan¨® el 63% del voto, contra el 37% del l¨ªder opositor, Manuel Rosales.
Si no se produce una victoria opositora ¡ªcomo en Chile en 1989 o en Nicaragua en 1990, donde la oposici¨®n gan¨® pese a enfrentarse a condiciones electorales igualmente injustas¡ª, es probable que Capriles se acerque a la mitad de los votos, lo que le dar¨ªa un aura de ¡°presidenciable¡±.
Los esc¨¦pticos dicen que el escenario planteado en Ahora, o dentro de muy poco es ilusorio porque Capriles ha generado tanto entusiasmo que una derrota el domingo desmoralizar¨ªa, paralizar¨ªa y dividir¨ªa a la oposici¨®n. Millones de opositores concluir¨ªan que hubo fraude, y dejar¨ªan de votar en futuras elecciones, seg¨²n esta l¨ªnea de argumentaci¨®n.
Mi opini¨®n: No estoy de acuerdo. Si Capriles hace una buena elecci¨®n, aunque no gane, jugar¨¢ bien sus cartas y no permitir¨¢ que se evapore su impulso pol¨ªtico.
Si perdiera, lo m¨¢s probable es que no alegue que hubo un fraude, porque eso instalar¨ªa una matriz de opini¨®n de que existe un fraude sistem¨¢tico, y har¨ªa que millones de opositores se queden en su casa para las elecciones de gobernadores del 16 de diciembre y las de alcaldes de abril de 2013.
Capriles es un candidato extraordinario, que tiene mejores posibilidades de suceder a Ch¨¢vez que cualquiera de los l¨ªderes de la oposici¨®n que lo precedieron. Gane o pierda el domingo, no ser¨ªa de extra?ar que termine ganando.
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