¡°Europa necesita liderazgo¡±

Michael Bloomberg tiene encima de su mesa un reloj que cuenta los d¨ªas que le quedan a su tercer mandato como alcalde de Nueva York, y lo mira cada ma?ana: ¡°Es una se?al de que me digo: Haz que cada d¨ªa cuente, porque no te queda mucho tiempo¡±.

Pregunta. Europa ha dedicado mucho tiempo a buscar la soluci¨®n a su problema. ?Cu¨¢nta importancia tiene actuar a tiempo en una situaci¨®n de crisis?

Respuesta.?Bueno, la primera vez que surge un problema, si uno no lo arregla, se encuentra con que despu¨¦s es peor. Las cosas no mejoran por casualidad, empeoran por casualidad. Por tanto, creo que los problemas de Europa comenzaron hace tiempo y deber¨ªan haberlos afrontado hace tiempo. Dicho esto, todo eso ya es historia, y no se puede revivir la historia, hay que vivir el presente: lo importante no es lo que deber¨ªa haber hecho Europa sino lo que deber¨ªa hacer hoy.

"Necesitamos m¨¢s inmigrantes, porque crean m¨¢s empleo y crean negocios"

P. ?Qu¨¦ cree que deber¨ªamos hacer ahora en Europa?

R. No es f¨¢cil dar una respuesta, no hay ninguna que sea indolora. Creo que mejorar la productividad, equilibrar el presupuesto, hacer inversiones de futuro, todo eso hay que hacerlo. Son medidas sobre las que todos dicen: 'S¨ª, pero cuando las cosas est¨¢n dif¨ªciles o quiero hacer eso, no puedo, porque la gente no va a estar de acuerdo'. Las medidas de austeridad para equilibrar un presupuesto cuando hay una tasa de paro muy elevada son muy dif¨ªciles de vender; hacer inversiones a largo plazo, cuyos beneficios se ver¨¢n dentro de cinco, 10, 20 a?os, es muy dif¨ªcil de vender, sobre todo si no hay mucho dinero y a los Gobiernos tampoco les sobra. Cambiar las leyes laborales y abrir las fronteras: es muy dif¨ªcil convencer a la gente de ese tipo de medidas que aumentan la productividad cuando existen tantos problemas.

P. ?Cu¨¢l es el error que no deber¨ªamos repetir jam¨¢s?

el verdadero da?o de la crisis de las hipotecas fue que su expansi¨®n ocult¨® un cambio trascendental en la fuerza laboral en todo el mundo

R. Si piensan en la ciudad de Nueva York durante los a?os setenta, ver¨¢n que dej¨® de invertir en el futuro, dej¨® de vigilar las calles, dej¨® de recoger la basura, impidi¨® que hubiera nuevas ideas, y la ciudad se vino abajo. La poblaci¨®n disminuy¨® y tardamos dos o tres d¨¦cadas en salir de aquella situaci¨®n. Es de esperar que nunca volvamos a cometer aquel error. Hace seis a?os, yo dije: ¡°Esto no puede seguir as¨ª. Los ingresos siguen creciendo, los impuestos son bajos, las inversiones est¨¢n generando un enorme volumen de nuevos ingresos, en alg¨²n momento se acabar¨¢¡±. As¨ª que apartamos 6.000 millones de d¨®lares del dinero de los contribuyentes, ingresos fiscales, y esperamos a cuando hubiera una crisis. Y, por supuesto, la crisis lleg¨®, a partir de 2008, y hemos recurrido a ese dinero, y el a?o pr¨®ximo terminaremos de usarlo, pero nos ha servido para superar un periodo muy dif¨ªcil sin interrumpir nuestras inversiones. Hemos puesto dinero en una nueva l¨ªnea de metro, cosa que el Estado no quer¨ªa hacer, hemos construido un nuevo t¨²nel bajo el agua, que ha tardado 50 a?os en completarse porque nuestros predecesores siempre cortaban el dinero porque ten¨ªan otras cosas en qu¨¦ emplearlo. Hemos arreglado todas las calles de la parte sur de Manhattan y hemos renovado l¨ªneas subterr¨¢neas de comunicaci¨®n, conducciones de agua y vapor, electricidad y alcantarillado, hemos hecho cosas de ese tipo que sostendr¨¢n la ciudad durante mucho tiempo. Hemos abierto oficinas de turismo en todo el mundo; este a?o tendremos 52 millones de turistas. Y eso crea muchos puestos de trabajo.

P. ?Cu¨¢ntos turistas ten¨ªan cuando lleg¨® usted a su cargo?

R. Alrededor de la mitad, hemos tenido un aumento de unos 36 millones a unos 52, un 60%.

P. ?Cu¨¢l es la clave para salir de la crisis?

R. Liderazgo. Europa necesita l¨ªderes. No s¨¦ c¨®mo saldr¨¢ al final, pero podr¨ªa decirse que David Cameron est¨¢ actuando como hace falta, que tiene un verdadero presupuesto de austeridad, que no es popular en Inglaterra, en el Reino Unido, pero est¨¢ ocup¨¢ndose de los problemas. No s¨¦ si tiene raz¨®n o no, pero est¨¢ demostrando el valor necesario para dar un paso al frente y actuar. ?Se puede hacer eso mismo en Espa?a con la tremenda tasa de desempleo? ?Se puede hacer lo mismo en Grecia o Italia, donde el n¨²mero de personas que pagan impuestos es relativamente bajo? En Estados Unidos, todo el mundo paga sus impuestos. Quiz¨¢ haya un pu?ado de gente que hace trampas, pero todo el mundo hace su declaraci¨®n, de modo que, si las personas que no pagan son un porcentaje peque?o, es m¨¢s f¨¢cil aplicar la ley, porque perseguirlos es una tarea controlable. Si el 90% de la gente no paga impuestos, ?por d¨®nde se empieza?

P. ?Por d¨®nde se empieza?

R. Christine Lagarde, la directora gerente del FMI, es una persona de mucho peso, pero hay un l¨ªmite a lo que estas organizaciones supranacionales pueden hacer. A la hora de la verdad, los Gobiernos de los distintos pa¨ªses tienen que conseguir convencer a sus votantes, y es dif¨ªcil levantarse y decir: Tenemos que hacer sacrificios¡±. Todo el mundo quiere estabilidad fiscal, pero que no me suban los impuestos ni recorten mis programas. Pues muy bien, responde el Gobierno, pero sin eso no se puede tener estabilidad fiscal. La respuesta que reciben es: usted quer¨ªa ser presidente o primer ministro, discurra la manera.

P. ?Qu¨¦ opina de lo que est¨¢ haciendo Italia para resolver sus problemas y disminuir las repercusiones negativas en Europa?

R. En Italia siempre ha habido joie de vivre. Los italianos poseen un optimismo que est¨¢ en su cultura. Ahora bien, tienen una enorme cantidad de problemas econ¨®micos, probablemente menos que Grecia y probablemente menos que Espa?a, y que otros pa¨ªses. Lo fundamental es que han gastado un dinero que no ten¨ªan y no han invertido en cosas para el futuro. Lo que resulta m¨¢s preocupante aqu¨ª en Estados Unidos es que hemos cerrado nuestras fronteras y aceptamos a menos inmigrantes, y por lo menos en Nueva York necesitamos m¨¢s inmigrantes, porque crean m¨¢s empleo y crean negocios. No s¨¦ si eso es as¨ª o no en Italia, pero el caso es que se observa una ola de anti-inmigraci¨®n en toda Europa, desde Irlanda hasta Turqu¨ªa. De pronto, las diferencias locales son muy importantes. En su d¨ªa hubo discusiones sobre la inmigraci¨®n polaca en Europa, pero hoy resulta que Polonia es la superpotencia econ¨®mica del continente. Hay que traer savia nueva.

P. La crisis comenz¨® en Estados Unidos con la quiebra de Lehman Brothers en 2008. ?Cree que Wall Street tiene una parte de responsabilidad en la crisis del euro?

R. Creo que no estoy de acuerdo con su premisa. En mi opini¨®n, Lehman quebr¨® porque toda la gente, en todo el mundo, quer¨ªa tener una hipoteca, todo el mundo quer¨ªa que su fondo de pensiones subiera de valor, todo el mundo quer¨ªa dinero barato, y entre todos creamos esta burbuja. Fue la gente, fue el Gobierno, fue el sector privado, y entonces todo se vino abajo. Tengo 70 a?os y llevo toda la vida esperando a que alguien invente el movimiento perpetuo, pero nunca lo han hecho. Todas estas cosas suceden en ciclos, se precipita la crisis y luego nos recuperamos poco a poco. Se empiezan a crear excesos, los primeros derivados son as¨ª, los segundos derivados son as¨¢, y luego los terceros derivados son un paso malo. En Estados Unidos, el verdadero da?o de la crisis de las hipotecas fue que su expansi¨®n ocult¨® un cambio trascendental en la fuerza laboral en todo el mundo. Como todo el mundo estaba construyendo, est¨¢bamos creando mucho empleo. Cuando se interrumpi¨®, el empleo dej¨® de existir. Luego f¨ªjense en la clase media: ?qu¨¦ est¨¢ pasando con sus puestos de trabajo? No pueden vivir con lo que ganan. Unas personas que empiezan a subir en la escala socioecon¨®mica, tienen una familia estructurada, un coche, una casa, lo que tengan que tener: no consiguen un trabajo que les pague un buen sueldo. Lo necesitan, pero no lo consiguen. Hacen cosas que son repetitivas, que pueden ser autom¨¢ticas y que, en general no tienen que hacerse cerca del cliente, cerca del usuario, de modo que se pueden llevar a cualquier otra parte del mundo en la que haya salarios m¨¢s bajos. Ese es el problema de la clase media.

P. Durante la actual campa?a presidencial, los dos candidatos han criticado a Europa. Da la impresi¨®n de que Europa se ha convertido casi en un insulto en la pol¨ªtica estadounidense. ?Se ha ensanchado el Oc¨¦ano Atl¨¢ntico debido a la crisis econ¨®mica?

R. El Oc¨¦ano Atl¨¢ntico siempre ha sido muy ancho. Yo he dado muchas veces este ejemplo: si estuviera usted en Roma, e intentase pagar al taxista en libras esterlinas, el taxista protestar¨ªa y se quejar¨ªa, pero le llevar¨ªa a un banco; en Nueva York, si intentase usted pagar en libras, le llevar¨ªa a una comisar¨ªa. S¨¦ que el 11 de septiembre nos ense?¨® que el mundo es m¨¢s peque?o, pero Europa y Estados Unidos siguen siendo diferentes. Tenemos un gran porcentaje de miembros del Congreso que no tienen pasaporte. Nuestros periodistas nunca han viajado por el mundo, nunca han estado en otras ciudades. Dicen que la crisis aqu¨ª es inmensa: una persona tiene que comerse la hamburguesa sin patatas fritas, as¨ª que es pobre. ?Que vayan a otros pa¨ªses donde la gente no tiene nada para comer! Estados Unidos no lo entiende. Creo que no deben preocuparse por las opiniones de Europa ni por las opiniones de Estados Unidos sobre Europa. Los cargos electos los ocupan pol¨ªticos que quieren que los elijan, as¨ª que tienen que echar la culpa a alguien. Hemos creado una cultura en la que alguien tiene la culpa, alguien que no somos nosotros. Por eso atacamos a Europa, por eso atacamos a China.

P. En una situaci¨®n de crisis, cuando los gobiernos nacionales y locales est¨¢n recortando las prestaciones sociales, la educaci¨®n, la ayuda a los pobres, ?puede ser una soluci¨®n la filantrop¨ªa?

R. No, porque las cantidades de dinero son muy distintas. Lo que puede hacer la filantrop¨ªa es financiar proyectos de prueba, o innovaciones, o ensayos, pero, cuando se trata de ofrecer servicios a 6.600 millones de personas en todo el mundo, la filantrop¨ªa privada es tan peque?a que es inapreciable. No se puede utilizar dinero p¨²blico para cosas que no se puede garantizar de antemano que vayan a funcionar. Cosas innovadoras que no se sabe ni en qu¨¦ van a consistir y mucho menos si van a servir de algo. Y ah¨ª es donde la filantrop¨ªa s¨ª puede intervenir. Se pueden hacer cosas. Yo di 50 millones de d¨®lares al Sierra Club para contribuir al cierre de centrales de carb¨®n. He gastado 600 millones de d¨®lares de mi bolsillo en tratar de convencer a la gente para que deje de fumar. El tabaco matar¨¢ a 1.000 millones de personas en este siglo. He invertido 100 millones de d¨®lares hasta ahora en el tr¨¢fico, que de aqu¨ª a unos a?os ser¨¢ el quinto mayor asesino del mundo. Es decir, existen cosas que podemos hacer de manera particular, pero, a grandes rasgos, es el dinero p¨²blico el que debe encargarse. Se puede decidir si se quiere gastar o no y se puede recaudar dinero de la gente que lo tiene.

P. Hablando de prioridades, ?es posible recortar en la cultura y la educaci¨®n?

R. Todo tiene su valor. Yo controlo un presupuesto de 65.000 millones de d¨®lares y, durante los ¨²ltimos a?os, nuestros ingresos fiscales anuales han permanecido estables, mientras que los gastos aumentan. As¨ª que tengo que encontrar formas de ahorrar. Tengo que mantener seguras las calles. ?Por qu¨¦? Porque, si las calles no est¨¢n seguras, la gente no vendr¨¢ a hacer turismo, no vendr¨¢ a vivir, y entonces no tendremos una base de contribuyentes. As¨ª que todo lo dem¨¢s de lo que vamos a hablar enseguida no podr¨ªa hacerse si no empezamos con la seguridad. Luego hay que tener ambulancias que acudan cuando uno sufre un derrame o un ataque al coraz¨®n. Si se incendia la casa, hay que tener un cami¨®n de bomberos que vaya, adem¨¢s de otras cosas. Hay que recoger la basura, si no, tendremos enfermedades y un aspecto terrible, y hay que proporcionar educaci¨®n. Con esto acabo de darles el 80% del presupuesto de la ciudad que es intocable. Y que tiene que aumentar cada a?o, en opini¨®n de la mayor¨ªa, aunque yo he tenido que reducirlos todos, incluida la polic¨ªa. He eliminado 5.000 puestos de polic¨ªa en los ¨²ltimos 10 a?os y la ciudad est¨¢ m¨¢s segura que nunca. Es decir, gastamos menos dinero en estas cosas, pero debemos encontrar maneras de hacerlo con menos a¨²n, y la respuesta que tienen siempre los gobiernos es dedicar m¨¢s dinero al problema. Pero existen dos razones para no hacerlo. Si dedicamos m¨¢s dinero, en primer lugar, estamos despilfarrando el dinero de los contribuyentes. Pero, sobre todo, la gente que se beneficia de ese programa que no funciona sale perdiendo. Cuando tenemos un programa para educar a los ni?os que no funciona, si invertimos m¨¢s dinero en ¨¦l, lo ¨²nico que estamos haciendo es darles un a?o m¨¢s con un sistema que ya sabemos que no funciona, y eso es la mayor tonter¨ªa que se puede hacer. Tambi¨¦n debemos tener instituciones culturales, que es como competimos con otras ciudades, y debemos tener parques. La respuesta, por consiguiente, es: no hay que recortar nunca todo ni eliminar por completo una cosa. Hay que fijar las prioridades. Nosotros gastamos 8.500 millones de d¨®lares cada a?o en nuestro departamento de polic¨ªa, 22.000 millones de d¨®lares en nuestro sistema de ense?anza p¨²blica. No s¨¦ lo que gastamos en asuntos culturales, pero unos 200 millones, probablemente. Tenemos que escoger, pero la mayor¨ªa de las cosas que hace el ayuntamiento de Nueva York son las cosas que la gente quiere y necesita. A m¨ª me toca la responsabilidad de decir no. Eso es el liderazgo.

P. Pol¨ªtica o empresa: ?cu¨¢l ser¨¢ la pr¨®xima aventura de Michael Bloomberg?

R. No tengo ni idea, de verdad que no lo he pensado. No trabajo para ning¨²n jefe desde hace 35 a?os, as¨ª que no podr¨ªa hacerlo ahora, es poco probable. He tenido el mejor cargo oficial que se puede tener, no creo que haya ning¨²n otro cargo de gobierno que me apetezca ocupar, o quiz¨¢s no conseguir¨ªa que me escogieran, porque siempre hay alguien a quien no le gusta mi pol¨ªtica en materia de armas, el aborto, los derechos de los homosexuales. ?Filantrop¨ªa? Me gusta crear grandes estrategias pero despu¨¦s... Bill Gates es buen amigo m¨ªo, trabaja en cuestiones del sida y se ha le¨ªdo todo lo que se ha escrito sobre el sida. Yo le digo que deber¨ªamos ocuparnos de eso, ¨¦l es un experto en el tema, que se encargue ¨¦l y yo le doy dinero. No s¨¦, no s¨¦ c¨®mo responder la pregunta. Me ir¨¦ a descansar unas semanas, llevo 11 a?os sin vacaciones. Me gustar¨ªa recorrer la costa italiana, creo que podr¨ªa hacerlo durante dos semanas, pero despu¨¦s no s¨¦ qu¨¦ har¨¦. No voy a dar clase, no voy a ser asesor de nadie, no voy a dedicarme a las inversiones: no me va ese tipo de actividades. Yo hago cosas.

P. ?No ha tenido demasiado ¨¦xito en la pol¨ªtica para renunciar ahora?

R. Mire, a nadie le caen bien los viejos ricos. El 1 de enero de 2014, cuando expire mi mandato, puedo pronunciar un discurso sobre c¨®mo curar el c¨¢ncer, y nadie ir¨¢ a escucharme. Hay que comprender que uno deja de controlar el escenario, que ya no va a tener el acceso a la prensa que tiene ahora. Es el paso al mundo real, y a algunas personas les cuesta hacer esa transici¨®n. A m¨ª no me resultar¨¢ dif¨ªcil, porque har¨¦ lo mismo que hice cinco minutos despu¨¦s de que me despidieran de Salomon Brothers: tom¨¦ la decisi¨®n consciente de no volver a pensar en ello. No volver a pensarlo. Esas personas que no dejan de fustigarse: deber¨ªa haber hecho esto, tendr¨ªa que, podr¨ªa. ?De qu¨¦ sirve? Creo que ma?ana ser¨¢ mejor que hoy, no s¨¦ qu¨¦ traer¨¢, pero hay que tener una vida muy mala para no asumir esa filosof¨ªa. Ya veremos qu¨¦ ocurre. Si pudiera aprender a hablar espa?ol, mi italiano es un poco mejor, si pudiera aprender a jugar al golf como un profesional, despu¨¦s no s¨¦ qu¨¦ har¨ªa. Si pudiera hacer eso en dos semanas, despu¨¦s tendr¨ªa el mismo problema. Pero no creo que corra ese peligro. ?Buena suerte!