El Ej¨¦rcito liban¨¦s trata de frenar una espiral de violencia que ha costado 7 vidas

El Ej¨¦rcito liban¨¦s ha salido de los cuarteles, ha tomado las calles de L¨ªbano y ha emitido un comunicado poco habitual. Ha advertido de que el pa¨ªs se encuentra en una fase cr¨ªtica, de que no va a permitir m¨¢s desmanes, y ha pedido a los l¨ªderes pol¨ªticos que extremen la cautela en sus intervenciones. Los militares tratan de hacer lo imposible por contener los brotes de violencia que desde hace tres d¨ªas amenazan con convertirse en un enfrentamiento civil de dimensiones imprevisibles. ¡°La seguridad del pa¨ªs est¨¢ en riesgo¡±, estim¨® el Ej¨¦rcito en el comunicado. ¡°Hay una escalada sin precedentes de la tensi¨®n en algunas zonas¡±, a?ad¨ªa el texto.

La actuaci¨®n del Ej¨¦rcito da una idea de la gravedad de la situaci¨®n, que sobre el terreno ha dejado al menos siete muertos en enfrentamientos sectarios ocurridos entre la noche del domingo y el lunes.

El atentado del viernes pasado en el que muri¨® en el coraz¨®n cristiano de Beirut Wissam al Hassan, jefe del espionaje interno y bestia negra de Damasco, ha destapado la caja de los truenos sectaria. La coalici¨®n antisiria y proocidental 14 de Marzo acusa al r¨¦gimen de Damasco de estar detr¨¢s del asesinato y ha sacado a sus seguidores sun¨ªes a la calle. Pide adem¨¢s la dimisi¨®n del primer ministro, Nayib Mikati, y el fin de la injerencia siria en L¨ªbano de la mano de su aliado. Damasco y Hezbol¨¢ guardan de momento silencio, m¨¢s all¨¢ de las declaraciones de condena al uso. Los choques en la calle no se han hecho esperar.

La violencia ha sido especialmente grave en Tr¨ªpoli, en el norte del pa¨ªs, donde los choques sectarios han dejado seis muertos, incluida una ni?a de nueve a?os por disparos de un francotirador, y medio centenar de heridos, seg¨²n el recuento de la agencia Reuters. Esta zona fronteriza con la vecina Siria se ha convertido en el principal foco de tensi¨®n y en una suerte de r¨¦plica a peque?a escala del conflicto que desangra Siria.

La v¨ªctima m¨¢s joven es una ni?a de 9 a?os, alcanzada por un francotirador en Tr¨ªpoli

Fue hace 19 meses cuando activistas antigubernamentales sirios salieron a la calle para pedir la ca¨ªda del r¨¦gimen al calor de las primaveras ¨¢rabes. Desde entonces 30.000 sirios han muerto, la inmensa mayor¨ªa fruto de la represi¨®n del Ej¨¦rcito, seg¨²n las cifras que ofrece la oposici¨®n. En dos barrios de Tr¨ªpoli, el mayoritariamente sun¨ª de Bab al Taban¨¦ y el alau¨ª Yabal Mohsen, se reproduce desde hace meses el enfrentamiento entre seguidores ¡ªalau¨ªes, pr¨®ximos al ch¨ªismo¡ª y detractores del r¨¦gimen de Bachar el Asad, los rebeldes sun¨ªes. Las v¨ªctimas mortales de los ¨²ltimos d¨ªas se han registrado en esos distritos, igual que los 13 muertos habidos el pasado junio.

En la capital, Beirut, que en los ¨²ltimos meses hab¨ªa logrado escapar de la violencia, se han producido desde el viernes tiroteos en algunos barrios. El Ej¨¦rcito se ha desplegado para evitar la presencia de hombres armados y la quema de neum¨¢ticos y el levantamiento de barricadas, con las que los manifestantes cortan las arterias de la ciudad. Un palestino muri¨® en la ciudad por los disparos de los uniformados, seg¨²n indic¨® el Ej¨¦rcito.

El comunicado que este lunes emiti¨® esta instituci¨®n explicaba el sentir de buena parte de los libaneses. ¡°Tomaremos medidas decisivas, especialmente en las zonas de creciente tensi¨®n religiosa y sectaria, para evitar que L¨ªbano se transforme de nuevo en un lugar para dirimir disputas regionales y para evitar que el asesinato del m¨¢rtir Wissam al Hassan termine por convertirse en el asesinato de todo el pa¨ªs¡±, indica el texto.

El intento de asalto a la oficina del primer ministro, Nayib Mikati, el domingo, tras el multitudinario funeral-manifestaci¨®n del Al Hassan, fruto de la propagaci¨®n de la ira callejera, fue el incidente que hizo saltar todas las alarmas y que acab¨® por provocar la intervenci¨®n de los militares. Lo que no est¨¢ tan claro es que la decisi¨®n del Ej¨¦rcito liban¨¦s vaya a ser suficiente para contener la ira de algunos libaneses y pacificar el pa¨ªs. Especialmente si no cuenta con la colaboraci¨®n de las todopoderosas milicias de Hezbol¨¢, capaces de hacer sombra al propio Ej¨¦rcito.

En el plano pol¨ªtico, est¨¢ por ver si el Ejecutivo de coalici¨®n que encabeza Nayib Mikati y que controla Hezbol¨¢, caer¨¢ a consecuencia de los acontecimientos de los ¨²ltimos d¨ªas. Mikati lleg¨® incluso a presentar su dimisi¨®n durante el fin de semana, pero dijo haberse topado con el rechazo del presidente del pa¨ªs, Michel Suleim¨¢n, quien, como algunos observadores, teme que en este momento un vac¨ªo de poder contribuya a agravar la situaci¨®n. Algunos manifestantes aseguran que no piensan abandonar las calles hasta que Mikati dimita.

Las repercusiones de un nuevo conflicto civil en L¨ªbano han despertado una marea de preocupaci¨®n internacional. Los embajadores de los pa¨ªses miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas se reunieron el lunes con el presidente Suleim¨¢n, al que trasladaron su inquietud, e hicieron un llamamiento a la unidad y la calma.