El debate de ¡®los otros candidatos¡¯
Los aspirantes a la Casa Blanca del Partido Verde, el de la Justicia, el Libertario y el Constitucionalista debaten sus programs en Chicago sin millonarias audiencias televisivas
No tienen ni una remota posibilidad de ganar las elecciones -a pesar de que tienen papeletas electorales en suficientes Estados como para hacerlo, por ejemplo, Gary Johnson est¨¢ presente en 48; el resto en apenas una veintena-. No salen en la foto de familia pol¨ªtica; no tienen silla en los debates presidenciales; las encuestas les ignoran y sus arcas son exiguas. Y sin embargo, en esta contienda de 2012 podr¨ªan poner en dificultades a los pretendientes a la Casa Blanca de los dos grandes partidos.
Los candidatos de los otros partidos pol¨ªticos -el tercer partido- que existen en Estados Unidos tuvieron su propio debate en la pasada noche del martes en un hotel de Chicago. Moderados por el veterano periodista de rojos tirantes, Larry King, la candidata del Partido Verde, Jill Stein; el l¨ªder del Partido Libertario ¨Cy exgobernador de Nuevo M¨¦xico-, Gary Johnson; el candidato del Partido Constitucionalista ¨Cy es congresista de Virginia tanto por el ala republicana como por la dem¨®crata-, Virgil Goode; y el representante del Partido de la Justicia, Rocky Anderson, trataron temas como la legalizaci¨®n de la marihuana, el sistema educativo, el militarismo estadounidenses , las libertades civiles tras el 11-S y el papel del dinero de las corporaciones en la pol¨ªtica. La ret¨®rica era bien distinta a la que se escuch¨® en los tres anteriores ¨Cy convencionales- debates presidenciales entre Barack Obama y Mitt Romney. No hubo duros intercambios de opiniones sobre impuestos, niveles de paro o sistema sanitario.
Dicen los datos que en 2008 m¨¢s de dos millones de estadounidenses votaron por otra candidato que no era ni Barack Obama ni John McCain. Entonces no import¨® mucho, porque en casi todos los Estados, cada candidato gan¨® por un margen tan importante que la presencia de una tercera candidatura no supuso una amenaza. Este a?o las encuestas dibujan otro panorama y las elecciones podr¨ªan decidirse por un pu?ado de votos. Si un tercer candidato entra en la pugna, Obama y Romney pueden verse en apuros, sobre todo ¨¦ste ¨²ltimo, ya que dos de los aspirantes por esos terceros partidos son ex republicanos que, como es el caso de Goode, por ejemplo, apela en Virginia ¨Cswing state- a que voten por ¨¦l los ciudadanos que deseen poner fin a la presencia de inmigrantes sin papeles.
La campa?a de Obama mantiene una vigilancia estrecha sobre Johnson y Goode y rastrea sus actos a diario. Al equipo de campa?a de Obama le interesa el da?o electoral que Goode puede hacer a Romney y el que Johnson puede hacer a ambos, ya que ¨¦ste ¨²ltimo defiende un programa antibelicista y favorable a la legalizaci¨®n de la droga que puede volcar el voto de los indecisos que podr¨ªan votar dem¨®crata hacia una opci¨®n nueva.
Seg¨²n todos los candidatos de esos terceros partidos que participaron en el debate de Chicago ¨Cy que solo retransmiti¨® la cadena pol¨ªtica C-SPAN; Rusia TV y Al Yazira en ingl¨¦s-, el bipartidismo estadounidense ¡°ahoga la democracia¡±.
Respecto a la legalizaci¨®n de las drogas, todos excepto el l¨ªder del Partido Constitucionalista ¨CGoode-, se definieron partidarios. ¡°No estoy a favor de la legalizaci¨®n. Si desean que eso suceda, voten por uno de ellos. No voten por m¨ª¡±, dijo con honestidad Goode, 66 a?os.
¡°Acabemos de una vez con la guerra de la droga. Legalicemos ya la marihuana¡±, reclam¨® el libertario Johnson, 59. ¡°Deroguemos tambi¨¦n la Ley Patriota [instaurada tras el 11-S y que amenaza derechos civiles]. Yo nunca hubiera firmado una ley que permite que ciudadanos de EEUU sean detenidos en prisi¨®n sin cargos. Esa es la raz¨®n por la que luchamos en guerras en este pa¨ªs¡±, dijo.
Anderson, 61, antiguo alcalde de Salt Lake City (Utah), condujo el tema hacia los Comit¨¦s de Acci¨®n Pol¨ªtica que invierten sumas millonarias en las campa?as de los candidatos convencionales. ¡°Todos sufrimos porque el Gobierno se haya vendido a Wall Street¡±, declar¨® el candidato del Partido de la Justicia. ¡°Millones de familias han perdido sus hogares y mientras tanto los peces gordos de Wall Street est¨¢n comprando las elecciones con dinero que hab¨ªan robado¡±, finaliz¨®. ¡°
¡°El pueblo estadounidense est¨¢ en crisis¡±, afirm¨® la aspirante a la Casa Blanca por el Partido Verde, Jill Stein. ¡°Estamos perdiendo nuestros puestos de trabajo, salarios decentes, nuestras casas¡±, inform¨® Stein, m¨¦dico de 62 a?os. ¡°Mi intenci¨®n es pasar una enmienda que establezca que el dinero no es libertad de expresi¨®n y que las corporaciones no son gente¡±, concluy¨®.
El debate concluy¨® con unas palabras del legendario King, que defini¨® como Don Quijotes contra los molinos a los cuatro candidatos. ¡°Sabemos que los molinos se pueden parar¡±, anim¨® el periodista a los candidatos antes de agradecerles que estuvieran ¡°en la lucha¡±. King quiso tambi¨¦n disculparse porque no hab¨ªa habido discursos de apertura ¨Ccomo le hizo notar Christina Tobin, cuya fundaci¨®n Free and Equal Elections patrocinaba el evento-.
¡°Lo siento, no lo ten¨ªa en mis notas¡±, se explic¨® King. ¡°Soy un chico jud¨ªo de Brooklyn y solo hago lo que me dicen¡±, brome¨® el presentador.
El segundo debate de los terceros partidos tendr¨¢ lugar el pr¨®ximo martes 30 en Washington, pero ser¨¢ s¨®lo entre dos candidatos, aquellos dos que sean elegidos por sus seguidores a trav¨¦s de una votaci¨®n online.
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