La UE se presenta ante el Nobel como un nuevo s¨ªmbolo de esperanza
Cientos de noruegos protestan contra la concesi¨®n del premio de la paz a una Europa presa de los recortes Barroso, Van Rompuy y Schulz alaban la historia de la construcci¨®n europea y evitan hablar de austeridad un d¨ªa antes de recibir el galard¨®n
Discursos oficialistas en los salones del Instituto Noruego del Nobel y manifestaciones en las g¨¦lidas calles de Oslo. En v¨ªsperas de la ceremonia de entrega del premio de la paz, que se celebrar¨¢ este lunes, los tres l¨ªderes encargados de recoger el galard¨®n han alabado la apuesta por la unidad que seis pa¨ªses iniciaron despu¨¦s de quedar sembrados de cad¨¢veres durante la II Guerra Mundial. Tambi¨¦n han se?alado que el reto pendiente es avanzar hacia una uni¨®n econ¨®mica y monetaria que la crisis ha demostrado que estaba coja, pero se han olvidado de mencionar aquello que m¨¢s preocupa a los europeos (por lo menos a los del sur): c¨®mo hacer frente a una depresi¨®n que ya dura demasiados a?os, que ha disparado el nivel de desempleo y que amenaza con alargarse.
¡°Queremos que la Uni¨®n Europa sea de nuevo un s¨ªmbolo de esperanza¡±, dijo el presidente del Consejo Europeo. Herman van Rompuy destac¨® el cambio hist¨®rico que supuso la construcci¨®n europea, al convertir un continente de guerra en uno de paz. Es este un proceso en el que ¡°triunf¨® la voluntad pol¨ªtica y la imaginaci¨®n¡±, seg¨²n afirm¨® durante la rueda de prensa previa a la ceremonia en la que el lunes se reconocer¨¢ la contribuci¨®n que Europa ha hecho en las seis ¨²ltimas d¨¦cadas a la paz, la reconciliaci¨®n, la democracia y los derechos humanos.
Una m¨ªnima dosis de autocr¨ªtica lleg¨® solo de la boca del presidente de la Comisi¨®n, Jos¨¦ Manuel Barroso. En respuesta a una pregunta sobre el papel que desempe?¨® Europa en la guerra de Bosnia, el l¨ªder portugu¨¦s admiti¨® que la UE fue incapaz de estar a la altura por la desuni¨®n de sus Estados miembros. ¡°Es una lecci¨®n que debemos aprender. Cuando estamos divididos es m¨¢s dif¨ªcil proyectar paz a nuestros vecinos y en todo el mundo¡±, a?adi¨®.
Pero incluso esta leve flagelaci¨®n le sirvi¨® al presidente de la Comisi¨®n para insistir en el efecto bals¨¢mico que atribuye a las instituciones europeas. ¡°La UE es la mejor forma de consolidar la paz y la democracia en la regi¨®n¡±, a?adi¨® tras poner como ejemplo la integraci¨®n en la UE de una antigua rep¨²blica yugoslava, Eslovenia, y la incorporaci¨®n el pr¨®ximo 1 de julio de otra, Croacia.
El tercero en hablar fue el presidente del Europarlamento. Como antiguo librero que es, el alem¨¢n Martin Schulz ech¨® mano de la literatura para ejemplificar qu¨¦ es lo que no quiere para la Europa del futuro. Su compatriota Thomas Mann narr¨® en Los Buddenbrook una historia familiar en la que la primera generaci¨®n amasa una fortuna gracias al comercio, la segunda la consolida y la tercera la despilfarra. ¡°No quiero pertenecer a esa tercera generaci¨®n¡±, dijo Schulz, en una comparaci¨®n en la que la pareja de l¨ªderes francoalemanes Konrad Adenauer y Charles de Gaulle habr¨ªan sido los iniciadores, Helmut Kohl y Fran?ois Mitterand los continuadores, mientras que a la canciller Angela Merkel le ha ca¨ªdo la responsabilidad de estar ahora, pr¨¢cticamente en solitario, en la sala de mandos de un continente amenazado por la recesi¨®n y la falta de rumbo.
Tan solo unas horas despu¨¦s del acto protagonizado por Van Rompuy, Barroso y Schulz se manifestaron en el centro de Oslo medio millar de personas convocadas por 50 organizaciones para protestar contra la concesi¨®n del Nobel de la Paz 2012 a la UE. ¡°No sentimos que se merezcan este premio unos l¨ªderes que, con sus pol¨ªticas de recorte, est¨¢n incendiando los pa¨ªses del sur¡±, comenta Anaa Tresse, una afiliada al partido socialista de 21 a?os que aguanta sin inmutarse los cinco grados bajo cero.
¡°La UE, con todas las armas que exporta, no es un proyecto de paz, sino que ha creado m¨¢s tensiones¡±, a?ade Christofer Birknes, sindicalista de 25 a?os, mientras en el podio clama contra los l¨ªderes europeos un diputado griego de Syriza, el partido izquierdista contrario a los recortes impuestos por Berl¨ªn y Bruselas. Solo la concesi¨®n del Nobel de la Paz al presidente de EE UU, Barack Obama, en 2009 gener¨® una controversia similar a la de este a?o en un premio que suele suscitar bastante consenso.
Los convocantes recuerdan que la crisis financiera que comenz¨® en 2008 amenaza la solvencia de pa¨ªses muy endeudados como Grecia, Espa?a, Portugal, Italia e Irlanda. Ser¨¢ dif¨ªcil encontrar en estas protestas gente que se sienta muy conmovida con el haiku que Van Rompuy ha escrito para la ocasi¨®n: ¡°Despu¨¦s de la guerra lleg¨® la paz / Cumpliendo el deseo m¨¢s antiguo / El sue?o de Nobel se ha hecho realidad¡±.
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