¡°El Gobierno est¨¢ tratando de asesinar nuestra reputaci¨®n¡±
La batalla entre el Gobierno argentino y grupo Clar¨ªn se va acercando a su fin
Antes de entrar en el despacho del director de Clar¨ªn, Ricardo Kirschbaum, se puede apreciar en la pared un peque?o cuadro donde aparece enmarcado un trozo de papel manuscrito:
¡°A fines de la d¨¦cada de los 20, el maravilloso pianista, organista y compositor Thomas Fats Waller fue interrumpido mientras actuaba en el Hotel Sherman de Chicago por dos individuos armados que lo persuadieron de forma poco amable para que abandonara el piano y los acompa?ase encapuchado hasta la casa de Al Capone. Una vez all¨ª debi¨® aceptar pedidos en el piano que ¨¦l se encarg¨® de cumplimentar. Por cada pedido, fue recibiendo billetes de 100 d¨®lares, que en esa ¨¦poca val¨ªan mucho m¨¢s. Cuando lo liberaron ten¨ªa en sus bolsillos 5.000 d¨®lares.
En abril de 2008, la se?ora presidente de la Naci¨®n se sinti¨® ofendida por un dibujo que firm¨¦ y lo interpret¨® como un hecho ¡®cuasi mafioso¡¯.
Cuatro a?os despu¨¦s, el se?or vicepresidente de la Naci¨®n acaba de doblar la apuesta y nos califica a los integrantes de Clar¨ªn de mafiosos.
Lo ¨²nico que lamento es no poseer armas y no tocar el piano como Fats Waller¡±.
¡°Kirchner le prometi¨® a Magnetto que ser¨ªa el empresario m¨¢s rico de Argentina¡±
El texto, firmado por el dibujante del diario Hermenegildo S¨¢bat, parece una muesca de guerra, una se?al que ilustra la lucha que vienen librando el diario y el Gobierno desde 2008. El peri¨®dico es el buque insignia del grupo del mismo nombre. Pero solo representa el 20% de los ingresos dentro de la compa?¨ªa matriz. La mayor parte de las ganancias provienen de sus canales de televisi¨®n. Y son precisamente esos canales los que ahora podr¨ªan pasar a otras manos.
En 2009 el Gobierno promulg¨® una Ley de Medios que, en aras de la pluralidad y la descentralizaci¨®n, obligaba a una veintena de empresas a desinvertir. El Grupo Clar¨ªn recurri¨® a un juzgado de primera instancia para denunciar como inconstitucionales dos art¨ªculos de esa ley. Tres a?os despu¨¦s, un juez de primera instancia se acaba de pronunciar sobre la constitucionalidad de la ley. La batalla se va acercando a su fin. Pero hubo un tiempo, entre 2003 y 2008, en que el Gobierno argentino y Clar¨ªn mantuvieron una relaci¨®n bien distinta a la actual.
Esta entrevista se realiz¨® el pasado lunes, horas antes de que la C¨¢mara Civil y Comercial se pronunciara a favor del grupo Clar¨ªn en su decisi¨®n de extender la medida cautelar que manten¨ªa en suspenso la aplicaci¨®n de la Ley de Medios.
Pregunta. ?Qu¨¦ ocurri¨® en 2008? ?Por qu¨¦ se lleg¨® a ese enfrentamiento entre el Gobierno y Clar¨ªn?
¡°La batalla templ¨® el car¨¢cter de nuestros periodistas¡±
Respuesta. En el 2001 el pa¨ªs estaba al borde de la desaparici¨®n. No tenia instituciones cre¨ªbles, la econom¨ªa estaba en bancarrota, hab¨ªa un estado de insubordinaci¨®n civil muy importante. Y nosotros apoyamos la reconstrucci¨®n de la autoridad presidencial. Nadie se sorprende si el editor de The New York Times va a la Casa Blanca y habla con Barack Obama; o si el consejero delegado de El PA?S va y habla con el jefe de Gobierno espa?ol. Pero s¨ª se sorprenden si el director ejecutivo del Grupo Clar¨ªn [H¨¦ctor Magnetto] iba a Olivos [casa presidencial]. Nosotros sab¨ªamos, por los antecedentes de los Kirchner, que su objetivo era el control de la prensa en la Argentina. Porque su experiencia en Santa Cruz [provincia donde ejerci¨® de gobernador] era elocuente. Y tuvimos ejemplos, durante ese periodo de relaci¨®n m¨¢s o menos positiva, de lo que pensaba el Gobierno cuando alguna noticia le molestaba. No solo hab¨ªa llamados para tratar de que corrigi¨¦semos la informaci¨®n, sino tambi¨¦n se dec¨ªa p¨²blicamente.
Cuando ocurre lo de 2008 [el choque entre el Gobierno y el sector agrario], nosotros cre¨ªamos y seguimos creyendo que el enfrentamiento afectaba a toda la sociedad y a la democracia. Y deb¨ªa resolverse mediante negociaci¨®n democr¨¢tica. Pero los Kirchner pensaron que era una cuesti¨®n de poder. Y como ellos tienen una especie de t¨¢ctica pol¨ªtica de ir a fondo se gane o se pierda, eres amigo o enemigo¡ No hay grises en su pol¨ªtica¡ A partir de ah¨ª fue creciendo la hostilidad. Hubo un c¨¦lebre discurso de la presidenta en el 2008 en Plaza de Mayo contra Hermenegildo S¨¢bat diciendo que un dibujo de ¨¦l era un mensaje mafioso. Pero solo era una interpretaci¨®n de la realidad por parte de un artista.
Luego de la derrota en el campo en el 2008, Kirchner pens¨® que deb¨ªa encontrar una f¨®rmula para fortalecer su Gobierno. En el 2009 fue derrotado en las elecciones de medio t¨¦rmino. Y en ese periodo, desde junio del 2009 hasta fin de a?o, introdujo la Ley de Medios, que fue hecha exclusivamente contra Clar¨ªn. Es una ley vieja porque, por ejemplo, no regula Internet. Es arbitraria, porque permite que las se?ales del sat¨¦lite lleguen a todo el pa¨ªs mientras las se?ales por cable, que no ocupan frecuencia radioel¨¦ctrica, est¨¢n limitadas. Eran una serie de cuestiones que fueron pensadas para el grupo Clar¨ªn.
P. ?No cree que la ley podr¨ªa tener otros objetivos?
R. Era un traje a medida para el Grupo Clar¨ªn disfrazado con cuestiones vinculadas a la pluralidad de la democr¨¢tica, a la creaci¨®n de nuevas voces, a la democratizaci¨®n de la palabra¡ Son todas frases muy bonitas, pero en la pr¨¢ctica significaron que se cree en base a una pol¨ªtica presuntamente de anti-monopolios un gran monopolio estatal de control de la prensa tanto oficial como privada. Y quiero aclarar lo siguiente: eso pas¨® porque Clar¨ªn tuvo independencia econ¨®mica para resistir la presi¨®n. Al rev¨¦s de otros grupos que no pudieron soportarlo, Clar¨ªn tuvo la espalda econ¨®mica para aguantar. Y eso es la base de la autonom¨ªa de un medio, tener la posibilidad de sustentar la presi¨®n sin ceder.
P. ?Qu¨¦ tiene que decir sobre la versi¨®n que achaca la ruptura al hecho de que Kirchner se opuso a la entrada de Clar¨ªn en Telecom?
R. Eso fue posterior. Hay una cosa que siempre digo respecto a Clar¨ªn y Kirchner: ?qu¨¦ habr¨ªa sido m¨¢s beneficioso en t¨¦rminos econ¨®micos para el grupo? ?Acordar con Kirchner o pelearse con ¨¦l? Y, claramente, la respuesta es acordar. Claramente un acuerdo con Kirchner era mucho m¨¢s provechoso. A ver¡ Kirchner le ofreci¨® a Magnetto negocios de petr¨®leo en el Orinoco con Hugo Ch¨¢vez. Tambi¨¦n le dijo: ¡°Si vos me apoy¨¢s, yo voy a quedar hasta el 2020 y vos vas a ser el empresario m¨¢s rico de la Argentina¡±. Eso le dijo Kirchner a Magnetto. Si uno lo ve desde el punto de vista econ¨®mico, el acuerdo era m¨¢s provechoso que la pelea. Pero el acuerdo, ?qu¨¦ significaba? La subordinaci¨®n absoluta y total a la pol¨ªtica de N¨¦stor Kirchner. Absoluta y total porque ellos no tienen en su concepci¨®n la posibilidad de una cr¨ªtica; es todo o nada. Y uno ve la prensa oficial y se da cuenta de cu¨¢l es el margen que tiene la prensa oficial u oficialista para criticar alg¨²n acto de Gobierno. Muy escaso, ni se animan.
P. ?Cu¨¢ndo fue la ¨²ltima vez que usted o Magnetto hablaron con la presidenta?
R. No recuerdo. Pero era cuando N¨¦stor Kirchner viv¨ªa.
P. ?Es cierto que Clar¨ªn no solo ha perdido ingresos publicitarios por parte del Estado, sino lectores y credibilidad?
R. A nosotros nos pusieron en un lugar que no buscamos estar. Estamos sometidos a la persecuci¨®n del Estado. Yo he tenido ac¨¢ a 200 agentes impositivos que llegaron un d¨ªa, in¨¦dito, enviados por N¨¦stor Kirchner porque no le gust¨® un t¨ªtulo que hablaba de corrupci¨®n. Hemos tenido una campa?a en contra, que se sostiene todav¨ªa pagada con dinero p¨²blico, de difamaci¨®n y descalificaci¨®n. La famosa campa?a de ¡°Clar¨ªn Miente¡± que la empez¨® [Hugo] Moyano [dirigente sindical ahora rival pol¨ªtico de Cristina Fern¨¢ndez], intent¨® afectar al principal capital de un medio de comunicaci¨®n, que es la credibilidad. Pero, adem¨¢s, se combin¨® con eso la crisis del sector. Los diarios argentinos no son ajenos a la situaci¨®n mundial de la prensa. Hemos perdido un poco de circulaci¨®n, pero la verdad es que despu¨¦s de semejante ataque es un ¨¦xito estar como estamos, con finanzas saludables. Seguimos siendo el diario de mayor circulaci¨®n en la Argentina y disputamos los primeros lugares de Am¨¦rica Latina. Esta situaci¨®n templ¨® bastante el car¨¢cter de nuestros periodistas. Somos el diario que m¨¢s enviados especiales tiene. Tenemos las redes de corresponsales m¨¢s grande en el exterior.
P. ?No se ha vuelto demasiado previsible? Uno sabe que siempre en Clar¨ªn va a encontrar cr¨ªticas al Gobierno.
R. Puede ser que haya previsibilidad. Nosotros criticamos al Gobierno en donde creemos que hay que criticarlo, porque el Gobierno inclusive manipula nuestras propias criticas, hace decir cosas que nosotros no dijimos. El mecanismo se llama ¡°el asesinato de la reputaci¨®n¡±. Y estos han tomado el asesinato de la reputaci¨®n como un hecho cotidiano y tienen programas espec¨ªficamente destinados a ¡°asesinar¡± la reputaci¨®n de periodistas que a ellos les molesta.
P. ?Puede mencionar tres acciones positivas del Gobierno?
R. La renovaci¨®n de la Corte Suprema, la pol¨ªtica de derechos humanos y la renegociaci¨®n de la deuda externa.
P. ?Tiene alguna autocr¨ªtica para hacerse?
R. Hacer un diario es exponer una obra de teatro cada 24 horas. Y ahora con la web, cada minuto. Pero el diario siempre te da la posibilidad de corregir los errores que has cometido. Yo creo que no estoy orgulloso del tiempo que estamos viviendo porque es un tiempo de un periodismo demasiado impregnado por la coyuntura. Pero creo que debemos de hacer un esfuerzo por conservar la calidad del periodismo, que al final es lo que va a prevalecer. A veces lo logramos y a veces no.
P. Para un sector de la poblaci¨®n Clar¨ªn ha sido un medio que ha co-gobernado en la historia reciente del pa¨ªs. Y en la ¨¦poca de la dictadura digamos que fue demasiado complaciente con los militares.
R. No puedo hacerme cargo de lo que hac¨ªa el peri¨®dico cuando yo era un colaborador de 22 a?os. Pero s¨ª quiero decir que ahora es muy f¨¢cil hacer grandes diagn¨®sticos sobre determinado momento hist¨®rico. Y no voy a decir que estoy orgulloso de la prensa argentina en esos a?os, ni mucho menos. Quiero tambi¨¦n ponerlo en perspectiva, porque hay muchos valientes a posteriori. Si hubiera habido los h¨¦roes que ahora hay los tiempos hubieran cambiado. Ahora encontramos que hab¨ªa muchos h¨¦roes que uno desconoc¨ªa, entre ellos N¨¦stor Kirchner y su esposa Cristina, que eran resistentes de la dictadura, noticia que reci¨¦n se sabe ahora.
Respecto de la influencia de Clar¨ªn, en la situaci¨®n pol¨ªtica, quiero decir lo siguiente: Clar¨ªn es un diario que vos pod¨¦s comprarlo o no comprarlo. Y si es un diario que tiene una audiencia masiva es porque la gente lo eligi¨® y porque constituy¨® durante mucho tiempo, y a¨²n constituye, un hecho cultural en la pol¨ªtica Argentina comunicacional. Ahora, vos pod¨¦s coincidir o no coincidir con Clar¨ªn. Pero la constituci¨®n de Clar¨ªn como grupo de comunicaciones nacional fue producto de una decisi¨®n pol¨ªtica que est¨¢ m¨¢s all¨¢ de las peque?eces con lo que se ha construido nuestra historia. Uno de los problemas que ha tenido Clar¨ªn, haciendo una autocr¨ªtica, es que como grupo de comunicaci¨®n ha tenido una p¨¦sima comunicaci¨®n institucional durante mucho tiempo. Clar¨ªn ha sido atacado, descalificado, extorsionado, y solo hubo silencio de parte nuestra. Y eso me parece que fue un grave error que todav¨ªa lo estamos pagando. Dejamos que otro, inclusive nuestro enemigo, escriba nuestra propia historia, y eso me parece que fue una equivocaci¨®n.
Clar¨ªn tiene 67 a?os y la Argentina ten¨ªa demasiados vaivenes Institucionales como para que no tenga facetas cr¨ªticas. Sin embargo, junto con La Naci¨®n, Clar¨ªn y quiz¨¢s Perfil, somos el sector que m¨¢s resiste.
P. Ma?ana seguramente la Corte tomar¨¢ una decisi¨®n? ?Qu¨¦ cree que puede ocurrir? [La Corte se pronunci¨® finalmente horas despu¨¦s de producirse esta entrevista, el pasado lunes]
R. La Corte deber¨ªa rechazarlo [el recurso de per saltum interpuesto por el Gobierno]. Pero la presi¨®n del Gobierno es muy fuerte. El m¨¦todo de descalificaci¨®n a la Justicia es constante. Adem¨¢s hay otro suceso que est¨¢ apareciendo con mucha claridad: el proyecto de la presidenta de crear una democracia donde el Ejecutivo tenga preeminencia sobre el poder Legislativo y el Judicial.
Por otro lado, esta idea peligros¨ªsima de decir que una ley es votada en el Parlamento y si los jueces se oponen a esa ley est¨¢n en contra de la democracia, es una actitud ins¨®lita en un sistema democr¨¢tico. Entonces nadie puede oponerse, uno no puede apelar al poder Judicial para resistir una medida abiertamente democr¨¢tica que haya surgido en el Congreso. Me parece que es un pensamiento absolutamente autoritario, y creo que ella [Cristina Kirchner] es una persona que tiene un pensamiento autoritario.
P. ?Por qu¨¦ se siente discriminado el Grupo Clar¨ªn respecto a Telef¨®nica?
R. Lo que el Gobierno est¨¢ haciendo respecto a Telef¨®nica es esconder la relaci¨®n que tiene [el canal argentino] Telefe con Telef¨®nica de Espa?a. Eso es lo que planteamos como un hecho discriminatorio en el sentido que lo que dice el Gobierno es que Telefe no depende de Telef¨®nica de Espa?a, sino de Telef¨®nica Argentina, que es otra empresa. Eso es dif¨ªcilmente sostenible.
Hay una ley que est¨¢ en vigor desde el 2009 y demoraron a?os en reglamentarla. Clar¨ªn cuestion¨® dos art¨ªculos importantes, el 45 y el 161. ?Por qu¨¦ no se aplic¨® en los otros medios mientras Clar¨ªn litigaba?.
P. Si al final la Corte Suprema decide que la ley es constitucional, se agota la medida cautelar y llega el momento de desinvertir, ?a qu¨¦ renunciar¨¢ el Grupo Clar¨ªn?
R. Lo ¨²nico que puedo decir, porque es una decisi¨®n que van a tomar los accionistas, es que nuestra tarea siempre estar¨¢ dentro de la ley. Habr¨¢ que buscar f¨®rmulas determinadas para esa ocasi¨®n. Pero nosotros confiamos que la Justicia nos d¨¦ la raz¨®n.
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