Obama apuesta por la prevenci¨®n en su estrategia contra las drogas
El plan para 2013 se presenta como un ¡°equilibrio¡± entre la legalizaci¨®n y la represi¨®n, las dos corrientes que imperan en Am¨¦rica Latina y en EE UU
La nueva estrategia de la Administraci¨®n Obama para la lucha contra las drogas da preeminencia a las pol¨ªticas de prevenci¨®n y rehabilitaci¨®n sobre las policiales y de seguridad. Durante la presentaci¨®n del Plan para 2013, Gil Kerlikowske, el director de Pol¨ªtica Nacional para el Control de Droga, ha defendido la apuesta de Estados Unidos como la m¨¢s adecuada para combatir el narcotr¨¢fico, al guardar un equilibrio entre la legalizaci¨®n y la guerra directa, las dos corrientes que, con ligeros matices, se defienden en este pa¨ªs y en Am¨¦rica Latina para erradicar el problema de las drogas.
¡°Una pol¨ªtica contra las drogas basada exclusivamente en la represi¨®n se ha demostrado contraproducente, ineficaz y costosa. Pero el extremo contrario, el de la legalizaci¨®n, es perjudicial desde el punto de vista de la salud p¨²blica¡±, ha se?alado Kerlokowske. El plan de este a?o no difiere demasiado del de 2012, que tambi¨¦n puso el ¨¦nfasis en la prevenci¨®n, pero el envite de Obama se ha reflejado de manera notable en su nuevo presupuesto, mucho m¨¢s equilibrado entre seguridad y prevenci¨®n que el del ejercicio anterior.
Una pol¨ªtica contra las drogas basada exclusivamente en la represi¨®n se ha demostrado contraproducente, ineficaz y costosa" Gil Kerlikowske
Aunque la proporci¨®n de la inversi¨®n de la Casa Blanca destinada a seguridad sigue siendo superior, la cantidad fijada en las cuentas de 2014 para la lucha contra la droga en ese apartado se reduce del 62% al 58%, respecto de 2013, mientras que la dedicada a pol¨ªticas de salud p¨²blica y educaci¨®n aumenta del 38% al 42%. -El presupuesto indica que la cantidad destinada al tratamiento es de 10.700 millones de d¨®lares, frente a los 9.600 millones invertidos en pol¨ªtica policial y de prisiones, pero en las cuentas se omiten los 3.700 millones dedicados a la interceptaci¨®n de alijos y los 1.400 millones para el control del narcotr¨¢fico fuera de EE UU, que se incluyen en otra partida-.
Aunque Kerlikowske ha rechazado que la legalizaci¨®n del consumo de drogas sea la mejor respuesta para erradicar el problema del narcotr¨¢fico, el asesor de Obama en esta materia no ha hecho ninguna alusi¨®n a la legalizaci¨®n de la producci¨®n, la venta y el consumo de marihuana aprobada en los Estados de Washington y Colorado. ¡°Puede cambiar la legislaci¨®n estatal, pero sigue siendo un problema de salud p¨²blica¡±, se ha limitado a decir Kerlikowske, que ha remitido al Departamento de Justicia para que explique la respuesta del Gobierno federal ante dos leyes que regularizan un producto que est¨¢ prohibido por el Gobierno federal -de momento el Fiscal General no se ha pronunciado al respecto-.
El plan para 2013 potencia la educaci¨®n, la asistencia sanitaria y la reforma del sistema judicial como herramientas para reducir el abuso del consumo y las consecuencias de la adicci¨®n. ¡°El encarcelamiento no puede ser la soluci¨®n a la cuesti¨®n de las drogas¡±, ha reconocido. De los 2,2 millones de personas encarceladas en EE UU, poco m¨¢s de la mitad est¨¢ en prisi¨®n por delitos relacionados con drogas, seg¨²n el Censo de 2010. El plan de Obama ha incorporado programas para destinar a 100.000 de esos presos a programas de rehabilitaci¨®n en lugar de mantenerlos entre rejas, prev¨¦ crear juzgados especializados y potenciar las condenas a tratamiento de desintoxicaci¨®n sobre las penas de c¨¢rcel en el caso de faltas y delitos menores.
El plan para 2013 potencia la educaci¨®n, la asistencia sanitaria y la reforma del sistema judicial como herramientas para reducir el abuso del consumo y las consecuencias de la adicci¨®n
Aunque la nueva estrategia de la Casa Blanca sintoniza con la emprendida por varios pa¨ªses de Am¨¦rica Latina que han optado por potenciar las pol¨ªticas de tratamiento y prevenci¨®n frente a las de seguridad y represi¨®n, Kerlikowske ha preferido guardar una distancia prudencial antes que equiparar las iniciativas. ¡°Nuestro plan es el m¨¢s inteligente y es un t¨¦rmino medio a lo que propone Am¨¦rica Latina¡±, ha indicado.
En la Cumbre de las Am¨¦ricas del a?o pasado, varios l¨ªderes de la regi¨®n pidieron a Obama que reconsiderara la legalizaci¨®n como una potencial respuesta para acabar con la violencia relacionada con el narcotr¨¢fico que atenaza a varios de los pa¨ªses de la zona. El presidente estadounidense insisti¨® en que ¨¦l no cree en la legalizaci¨®n como soluci¨®n. El fracaso de las pol¨ªticas de represi¨®n ha llevado a varios Estados americanos, como Colombia, Uruguay, M¨¦xico o Guatemala -con una de las mayores tasas de homicidios relacionados con drogas- a variar su estrategia contra las drogas, potenciando pol¨ªticas integrales y apostando por la regularizaci¨®n de determinados cultivos. Otros pa¨ªses, como Chile, Cuba o Paraguay, insisten en mantener pol¨ªticas de tolerancia cero.
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