La Casa Blanca revela las comunicaciones tras el atentado en Bengasi

La Casa Blanca ha hecho p¨²blicos los correos electr¨®nicos que revelan c¨®mo se elabor¨® la versi¨®n oficial sobre los ataques al consulado de Estados Unidos en Bengasi del pasado 11 de septiembre, en el que fallecieron cuatro ciudadanos estadounidenses, entre ellos el embajador en Libia, Chris Stevens. Con esta maniobra la Administraci¨®n Obama busca rebatir las acusaciones de que la presidencia particip¨® de manera activa, como sugiere un email filtrado el viernes pasado, en la primera explicaci¨®n del atentado, que ofreci¨® en una cadena de televisi¨®n la embajadora de EE UU ante Naciones Unidas, Susan Rice, en la que se omiti¨® el car¨¢cter terrorista de las agresiones,

Los m¨¢s de 100 documentos, fechados entre el 14 y el 17 de septiembre de 2012, muestran las discrepancias entre los miembros de la Casa Blanca, el Departamento de Estado, la CIA y el FBI a la hora de pactar la explicaci¨®n de la agresi¨®n. Los correos indican que fue el subdirector de la CIA, Mike Morell, quien exigi¨® que se eliminaran de la versi¨®n oficial todas las referencias a Al Qaeda o a otros ataques terroristas sufridos con anterioridad en la regi¨®n,y que su petici¨®n se adelant¨® a la del Departamento de Estado, que tambi¨¦n solicit¨® retirar cualquier alusi¨®n al terrorismo.

La Administraci¨®n Obama busca rebatir las acusaciones de que la presidencia particip¨® de manera activa en la primera explicaci¨®n del atentado en la que se omiti¨® que se trataba de un ataque terrorista

La CIA sugiri¨® que se informara de que los ataques ¡°se produjeron de manera espont¨¢nea siguiendo las protestas frente a la Embajada de EE UU en El Cairo de los d¨ªas previos¡±. La Agencia advirti¨® que ese an¨¢lisis inicial podr¨ªa variar ¡°conforme se fuera recopilando y analizando m¨¢s informaci¨®n¡± pero que, en un primer momento, no se pod¨ªa concluir que Al Qaeda u otros grupos extremistas estuvieran directamente involucrados en la agersi¨®n.

Esa es la versi¨®n que relat¨® Rice, quien, inmediatamente, se convirti¨® en la diana de las cr¨ªticas de los republicanos, quienes le recriminaron estar al tanto de que los atentados de Bengasi eran un ataque terrorista y haberlo ocultado. La diplom¨¢tica defendi¨® siempre que ella se refiri¨® a los datos que le facilit¨® la CIA y en una audiencia en el Congreso reconoci¨® que esa informaci¨®n se demostr¨® que no era correcta.

De los documentos se infiere que ¨²nicamente fue la CIA la que elabor¨® las primeras directrices para explicar la causa de los ataques al consulado y que la Casa Blanca no intervino en esa redacci¨®n, como ha denunciado el Partido Republicano esta semana.

Desde que tuvieron lugar los atentados, los republicanos han acusado a Obama y a la ex secretaria de Estado, Hillary Clinton, de falta de informaci¨®n y de encubrir el car¨¢cter terrorista del atentado, para proteger la reelecci¨®n del presidente, a menos de dos meses de los comicios. Este lunes, visiblemente contrariado, Obama critic¨® los embates de la oposici¨®n, recordando que ¨¦l desde el primer momento se refiri¨® a los ataques como ¡°un acto de terror¡±. ¡°No tenemos tiempo para jugar a este tipo de juego pol¨ªtico en Washington¡±, asegur¨®.

Las cr¨ªticas a la gesti¨®n por parte de la Administraci¨®n Obama del atentado en Bengasi se suman al espionaje del Departamento de Justicia a periodistas de la agencia Associated Press y a las denuncias de discriminaci¨®n de la agencia tributaria estadounidense respecto a grupos conservadores, tres frentes abiertos que impiden al presidente desarrollar la agenda de su segundo mandato como querr¨ªa.