El nepotismo en el Parlamento b¨¢varo salpica a Merkel
Durante a?os, dirigentes de la CSU han tenido en n¨®mina a padres, hijos y c¨®nyuges
El desenfado mediterr¨¢neo de los arcos que alivian la fachada monumental del Parlamento b¨¢varo es todo lo contrario de la pesadez prusiana de los muros del Reichstag berlin¨¦s. El mi¨¦rcoles a primera hora de la tarde, el primer ministro regional, Horst Seehofer, sub¨ªa la escalera noble del edificio para defender ante la C¨¢mara una ambiciosa ley con la que quiere atajar los esc¨¢ndalos de nepotismo que acosan desde hace semanas a su formaci¨®n la omn¨ªmoda Uni¨®n Social Cristiana. La CSU es el partido hermano de la CDU de Angela Merkel en el pr¨®spero Estado Libre de Baviera. Cuando los reporteros lo asaltaron frente los grandes ventanales que dominan la ciudad vieja de M¨²nich, Seehofer exhibi¨® su simp¨¢tico aplomo para declararse ignorante de absolutamente todos los detalles del esc¨¢ndalo de contratos a familiares que sacude a su partido: ¡°est¨¢ en manos del Tribunal de Cuentas¡±. Su ejercicio de transparencia se redujo a admitir todas las preguntas con una sonrisa y a no contestar ninguna.
Dar trabajo a familiares fue una com¨²n hasta 2000, cuando se prohibi¨® por ley
Esta ligereza tiene el mismo regusto sure?o de las pr¨¢cticas de sus diputados. Durante d¨¦cadas, destacados miembros de la CSU han tenido en n¨®mina a sus propios padres, hijos o c¨®nyuges. El caso m¨¢s flagrante fue el del dimitido jefe del Grupo parlamentario socialcristiano, Georg Schmid, que contrat¨® los servicios de secretariado y asistencia de su esposa con honorarios de unos 5.500 euros mensuales. M¨¢s IVA. Todo a cargo del contribuyente y en un r¨¦gimen il¨ªcito de falsa aut¨®noma. La suma de las retribuciones de ambos superaba el sueldo de Merkel. Otro Georg, de apellido Winter, contrat¨® a sus propios hijos de 13 y 14 a?os como asesores inform¨¢ticos en su oficina parlamentaria. Adem¨¢s de pagarles con dinero p¨²blico, el presidente de la Comisi¨®n de Presupuestos del Parlamento regional (Landtag) Winter vulner¨® as¨ª las leyes laborales de protecci¨®n de menores.
Dar trabajo a familiares fue una industria com¨²n hasta 2000, cuando se prohibi¨® por ley dejando un per¨ªodo de gracia para los contratos en vigor. Desde entonces, 79 diputados han seguido contando con familiares a sueldo. En la presente legislatura hab¨ªa 17 representantes con parientes contratados, entre ellos cinco ministros. Todos de la CSU. Hasta 34 de los 79 contratos se cerraron a ¨²ltima hora en 2000, como prevenci¨®n ante la ley que los prohibir¨ªa.
El jueves, los diputados b¨¢varos aprobaron con una ¨²nica abstenci¨®n la nueva legislaci¨®n con la que se proh¨ªben a s¨ª mismos contratar parientes de hasta cuarto grado. No es f¨¢cil que en la CSU se pongan nerviosos, pero estos t¨¦rminos dr¨¢sticos revelan inquietud. El mi¨¦rcoles por la tarde, la canciller Merkel se acerc¨® a M¨²nich para sorber cerveza de una jarra de litro y brindar as¨ª su apoyo a los amigos b¨¢varos.
Un desgaste de la CSU afectar¨ªa directamente a la fuerza del partido de Merkel tras las elecciones
Entre los asistentes al pleno parlamentario del jueves estaba el polit¨®logo de Passau Heinrich Oberreuter. Destaca el experto en la CSU que ¡°cinco d¨¦cadas de gobierno ininterrumpido hace que todas las ¨¦lites p¨²blicas formen una suerte de c¨ªrculo cerrado¡± en Baviera. Gobierna desde 1946, con un solo par¨¦ntesis de tres a?os a partir 1954. La insistencia de los b¨¢varos en dar grandes mayor¨ªas al mismo partido impide que se airee la c¨²pula pol¨ªtica en una regi¨®n de crucial influencia econ¨®mica. Para Oberreuter, la anomal¨ªa b¨¢vara es ¡°la continuidad sin parang¨®n de diputados y mandatarios de un solo partido en sus cargos¡±.
Como partido hermano de la CDU, la CSU aporta alrededor de siete puntos a la mayor¨ªa parlamentaria democristiana en la C¨¢mara baja berlinesa (Bundestag) que sostiene el Gobierno de Merkel en coalici¨®n con los liberales del FDP. Un desgaste socialcristiano afectar¨ªa directamente al balance de fuerzas tras las elecciones generales de septiembre. Para las regionales, que se celebrar¨¢n en el mismo mes, la CSU ya se ha despedido de su vieja aspiraci¨®n a la mayor¨ªa absoluta. Una ca¨ªda de uno o dos puntos en las generales se traducir¨ªa en la p¨¦rdida de unas pocas d¨¦cimas de punto para Merkel en Berl¨ªn. Podr¨ªan acabar con la actual mayor¨ªa democristiana-liberal.
En la organizaci¨®n Transparency Internacional, dedicada a denunciar la corrupci¨®n pol¨ªtica y empresarial, consideran que el esc¨¢ndalo de nepotismo b¨¢varo ¡°es indigno de una democracia¡±. Su portavoz, Christian Humborg, destacaba el jueves que ¡°los ciudadanos sienten que se confirma su opini¨®n sobre los pol¨ªticos, con el consiguiente da?o a la democracia parlamentaria¡±.
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