La familia Mandela se re¨²ne de urgencia en la ciudad natal de Madiba

Reuni¨®n de urgencia de la familia Mandela en Qunu, la localidad cercana a la costa del oc¨¦ano ?ndico donde Nelson Mandela pas¨® su infancia y d¨®nde siempre dijo que desear¨ªa ser enterrado. La convocatoria ha partido de la hija mayor de Madiba, Makaziwe, y se espera que los integrantes del encuentro discutan ¡°aspectos delicados¡± sobre la salud del viejo presidente, ha declarado un participante a la cadena p¨²blica Sabc. Mandela, que en julio cumplir¨¢ 95 a?os, lleva cuatro d¨ªas en estado ¡°cr¨ªtico¡± y 19 ingresado en el hospital de Pretoria aquejado por una infecci¨®n pulmonar y, seg¨²n algunas fuentes, con la funci¨®n renal y de h¨ªgado a la mitad.

El encuentro se celebra en la casa que Mandela compr¨® tras salir de la prisi¨®n de Robben Island, donde pas¨® 27 a?os acusado de terrorismo por el r¨¦gimen del apartheid. Adem¨¢s de la hija y dos nietos de Mandela tambi¨¦n asisten los ancianos de la familia real de Abathembu, seg¨²n informa la agencia sudafricana Sapa. En la cultura tradicional africana este tipo de reuniones tienen un gran significado porque existe la creencia de que la familia d¨¦ permiso para irse al enfermo grave o a una persona mayor. Por eso no es descartable que, familia y jefes tribales cercanos a Mandela decidan qu¨¦ pasos m¨¦dicos se van seguir a partir de ahora con el Premio Nobel de la Paz de 1993.

No paran de llegar ciudadanos an¨®nimos para mostrar su apoyo al ¡°tata (padre) de Sud¨¢frica¡±

Mientras, en el Mediclinic Heart Hospital de Pretoria donde est¨¢ hospitalizado Mandela, no paran de llegar ciudadanos an¨®nimos para mostrar su apoyo al ¡°tata (padre) de Sud¨¢frica¡± y las paredes de la verja de la entrada se llenan de dibujos, mensajes y flores.

Precisamente, una veintena de agentes de la polic¨ªa sudafricana han depositado ramos de flores, en medio de un gran despliegue medi¨¢tico. ¡°Voy cada d¨ªa a misa a rezar por Mandela y vengo cada d¨ªa aqu¨ª, al hospital. Nunca me olvido de ¨¦l¡±, dice una emocionada In¨¦s Longuera, portuguesa con 50 a?os de residencia en el pa¨ªs.

A su lado, Christine Rathombo tambi¨¦n muestra orgullosa el ramo de flores que ha dejado y afirma que, a pesar de los ¨²ltimos partes m¨¦dicos, a¨²n ¡°conf¨ªa en que Madiba se pondr¨¢ bien¡±. Colgada en la pared, una camiseta blanca tambi¨¦n muestra alguna esperanza y pide a Dios que le d¨¦ m¨¢s tiempo de vida a Mandela.

Las muestras de amor y de gratitud hacia Madiba no paran en este centro hospitalario. Calvin Hugo llega con dos cajas de mimbre y una verborrea que invita a todos los periodistas acercarse hacia ¨¦l. Lleva una decena de palomas blancas que libera para Mandela. ¡°Madiba nos dio la libertad y estas palomas son el s¨ªmbolo de la libertad y de la paz¡±, explica.

La tranquilidad de una ma?ana invernal con temperaturas agradables la han roto hasta seis helic¨®pteros y aviones del Ej¨¦rcito de los Estados Unidos, que han sobrevolado durante breves minutos el cielo de Pretoria. El presidente Barack Obama tiene previsto llegar a Sud¨¢frica el pr¨®ximo viernes y no se descarta que se acerque hasta el hospital de Pretoria a visitar a Mandela, si sus condiciones de salud no lo descartan. Las apuestas ahora en Pretoria se centran en si es Madiba esperar¨¢ a Obama, los dos primeros presidentes negros de sus respectivos pa¨ªses, o se apagar¨¢ antes.