El c¨¢mara que grab¨® su asesinato

Josephine Henrichsen ten¨ªa ocho a?os el d¨ªa que, al volver de sus clases de danza, se encontr¨® con su familia sentada en c¨ªrculo llorando. En la casa de su abuela en Buenos Aires, le contaron que su padre hab¨ªa muerto en Santiago de Chile. Ella no crey¨® lo que escuchaba y durante muchos a?os esper¨® que ¨¦l regresara de aquel viaje. El viernes pasado, Josephine, profesora de danza y ya con 48 a?os, preparaba sus maletas en Bah¨ªa Blanca ¡ªciudad portuaria ubicada al sur de la provincia de Buenos Aires¡ª.

Preparaba su viaje a la capital chilena, donde ten¨ªa previsto participar en la conmemoraci¨®n de los 40 a?os del asesinato de Leonardo Henrichsen, el c¨¢mara argentino que a los 33 a?os grab¨® su propia muerte. Ocurri¨® el 29 de junio de 1973, cuando un grupo de militares protagoniz¨® un frustrado golpe de Estado contra el Gobierno de Salvador Allende, dejando 22 civiles muertos.

Como reportero de un canal de televisi¨®n sueco, Henrichsen hab¨ªa viajado a Santiago para cubrir el agitado clima pol¨ªtico de la ¨¦poca. El d¨ªa que fue asesinado, ¨¦l se levant¨® temprano y sali¨® desde su hotel ubicado en el centro de la ciudad a registrar el alboroto que hab¨ªa comenzado a las nueve de la ma?ana alrededor del palacio presidencial de la Moneda.

La secuencia de dos minutos en la cual grab¨® su muerte comienza con un centenar de personas corriendo entre gritos y sonidos de disparos, y contin¨²a con la llegada de una camioneta desde la que baja una decena de militares, quienes comienzan a disparar contra civiles para dispersarlos. Luego, la imagen se centra en un uniformado con casco que empu?a una pistola y apunta directo a la lente. Alguien grita: ¡°?Cuidado, cuidado!¡±; retumba un disparo, y el encuadre comienza a oscilar hasta que la imagen se va a negro cuando la c¨¢mara cae al suelo.

Encabezado por el teniente coronel Roberto Souper, el llamado Tanquetazo ¡ªmovimiento en el que participaron m¨¢s de un centenar de oficiales, suboficiales y conscriptos de un regimiento¡ª se produjo 75 d¨ªas antes del golpe liderado por Augusto Pinochet que termin¨® con Salvador Allende muerto en La Moneda entre llamas el 11 de septiembre de 1973. Nueve d¨ªas despu¨¦s del golpe de Pinochet, la investigaci¨®n de la justicia militar que persegu¨ªa a los responsables del Tanquetazo se sobresey¨® sin condenados y no fue hasta 2005 cuando un tribunal civil comenz¨® a buscar al culpable del asesinato de Henrichsen.

En 1996, el periodista Ernesto Carmona convoc¨® a un grupo de colegas para investigar los casos de los 30 profesionales de prensa muertos durante la dictadura de Pinochet (1973-1990). El trabajo dur¨® un a?o y culmin¨® con la publicaci¨®n del libro Morir en la noticia, en el que se da cuenta de dos v¨ªctimas extranjeras, Charles Horman ¡ªperiodista en quien se bas¨® el filme Missing, del director Costa-Gavras¡ª y Henrichsen. As¨ª fue como Carmona descubri¨® que el caso del argentino no hab¨ªa sido resuelto pese a las im¨¢genes grabadas, y empez¨® a tratar de identificar al autor del disparo. Despu¨¦s de conseguir el expediente del proceso que se realiz¨® en 1973, Carmona contact¨® con la decena de polic¨ªas y militares mencionados y, tras siete a?os de indagaciones, dio con el nombre de H¨¦ctor Hern¨¢n Bustamante G¨®mez; quien supuestamente dispar¨® a Henrichsen.

¡°Bustamante usaba un uniforme de oficial pese a ser solo un cabo, por eso me cost¨® identificarlo. Cuando di con su direcci¨®n, lo fui a buscar. ?l viv¨ªa en una casa modesta de Conchal¨ª [un barrio popular de la zona norte de Santiago]. La conversaci¨®n fue desagradable y neg¨® ser ¨¦l¡±, recuerda Carmona, quien, tras confirmar el paradero del militar, contact¨® con la viuda e hijos de Henrichsen para contarles que ¡°pod¨ªan venir a Chile a hacer justicia¡±.

El periodista Carmona tard¨® siste a?os en dar con el asesino: ¡°Usaba un uniforme de oficial pese a ser solo un cabo¡±

En octubre de 2005, Josephine y su hermano Andr¨¦s interpusieron una querella criminal en el Segundo Juzgado del Crimen de Santiago contra el entonces cabo en retiro del Ej¨¦rcito H¨¦ctor Hern¨¢n Bustamante G¨®mez. A cargo de la magistrada Rommy Rutheford, la causa se sobresey¨® por prescripci¨®n en 2006. Un a?o m¨¢s tarde, y con el respaldo de la Embajada argentina en Chile, la familia insisti¨® en la Corte de Apelaciones con un recurso que buscaba esclarecer la muerte de Henrichsen y otros tres compatriotas durante la dictadura de Pinochet.

La investigaci¨®n qued¨® en manos del ministro Jorge Zepeda, quien ¡ªen el marco del antiguo sistema procesal chileno, el que se aplica en casos de violaciones de Derechos Humanos (DDHH) previos al retorno de la democracia en 1990¡ª tambi¨¦n actu¨® como juez de primera instancia, y sobresey¨® el caso en forma definitiva. El abogado de la Corporaci¨®n de Promoci¨®n y Defensa de los Derechos del Pueblo Hiram Villagra actu¨® en representaci¨®n de la familia en ambas causas y hoy se?ala que, despu¨¦s de haber sido citado a declarar como inculpado, se logr¨® establecer que H¨¦ctor Bustamante solo hab¨ªa sido el responsable de ordenar abrir fuego, pues hab¨ªa sido el militar de mayor rango que baj¨® a disparar desde la camioneta.

No obstante, en diciembre de 2007, Bustamante muri¨® impune en una cama del Hospital Militar de Santiago, a causa de una neumon¨ªa relacionada con un c¨¢ncer pulmonar. Tanto Villagra como Ernesto Carmona est¨¢n convencidos de que Bustamante fue quien asesin¨® al c¨¢mara, pero hoy la hija del c¨¢mara asegura que el responsable fue otro militar. ¡°La Corte investig¨® los hechos y, gracias a la Embajada argentina, tenemos el expediente de m¨¢s de 400 hojas en nuestras manos. Lo le¨ªmos entero y los resultados de la investigaci¨®n responsabilizan a H¨¦ctor Bustamante de dar la orden, pero el que asesin¨® a mi padre fue otro, que est¨¢ vivo¡±, dice Josephine, y precisa que el impacto que mat¨® al reportero provino de una carabina Garand, un arma larga muy distinta de la pistola con que Bustamante aparece en las im¨¢genes.

Durante las ¨²ltimas cuatro d¨¦cadas el video ha logrado un alcance mundial, ayudado tambi¨¦n por una serie de libros y pel¨ªculas que narran la historia y vida de Henrichsen. La obra m¨¢s reconocida es la del argentino Andr¨¦s Habegger, que en 2010 gan¨® el Gran Premio del festival de documentales Aljazeera con Imagen Final. "En este caso hay mucha gente que opina, pero el expediente ahora no servir¨¢ para ninguna pel¨ªcula, documental ni libro. Servir¨¢ para reclamar justicia", aclara. Agotados los recursos judiciales en Chile, el a?o pasado la familia Henrichsen llev¨® el caso a la Comisi¨®n Interamericana de Derechos Humano.

Josephine conf¨ªa en que el organismo determine que existi¨® denegaci¨®n de justicia e inste al Estado chileno a reabrir la investigaci¨®n. En un plazo que no debiera ser superior a cuatro a?os, otra opci¨®n es que la causa se eleve a la Corte Interamericana de Justicia, lo que suceder¨¢ si la Comisi¨®n establece que hubo violaci¨®n a los DDHH en el caso de su padre ¡°Que hayan pasado 40, 39 o 41 a?os me da igual. Lo que no quisiera es llegar a los 50 a?os y que todav¨ªa exista impunidad¡±, dice la hija del c¨¢mara que grab¨® su propio asesinato.