Aplastante triunfo de Bachelet en unas primarias con alta participaci¨®n
La expresidenta se convierte en la candidata del pacto Nueva Mayor¨ªa con el 73,11% de los votos La socialista se medir¨¢ en noviembre con Pablo Longueira, que venci¨® en la derecha La cifra de votaci¨®n sobrepas¨® los pron¨®sticos m¨¢s optimistas, con el 22% del total del padr¨®n
La expresidenta socialista Michelle Bachelet ha obtenido un triunfo holgado en las primarias presidenciales de la oposici¨®n chilena y se ha impuesto a los otros tres candidatos del pacto Nueva Mayor¨ªa con el 73% de los votos. Aunque exist¨ªan pocas dudas sobre qui¨¦n se convertir¨ªa en la candidata del sector, el porcentaje con el que ha ganado la deja en una posici¨®n inmejorable con miras a las presidenciales del 17 de noviembre pr¨®ximo.
¡°Tenemos que trabajar sin descanso para ojal¨¢ ganar en primera vuelta en noviembre¡±, dijo Bachelet acompa?ada de su madre, ?ngela Jeria, en un discurso marcado por las reivindicaciones de su programa de Gobierno que por su alta votaci¨®n podr¨¢ defender con fuerza frente a los sectores moderados de su bloque.
La exdirectora de ONU Mujeres se medir¨¢ en cinco meses con el vencedor de las primarias de la derecha, el ex ministro de Econom¨ªa Pablo Longueira, de la Uni¨®n Dem¨®crata Independiente (UDI), donde se ancla la derecha conservadora chilena. El candidato de la colectividad m¨¢s grande del pa¨ªs se impuso por un estrecho margen al ex titular de Defensa Andr¨¦s Allamand, del partido del presidente Sebasti¨¢n Pi?era, Renovaci¨®n Nacional (RN): 51% contra 48%.
Una de las principales inc¨®gnitas de estas elecciones era el nivel de participaci¨®n ciudadana, con un sistema de voto voluntario e inscripci¨®n autom¨¢tica que debut¨® en las municipales de octubre con un 57% de abstenci¨®n. Los c¨¢lculos m¨¢s optimistas hablaban de que si votaba un 10% del padr¨®n ¨Ccompuesto por 13,3 millones de chilenos- el proceso iba a ser un ¨¦xito. Las cifras, sin embargo, fueron mejores que las proyectadas por los analistas: m¨¢s de tres millones de ciudadanos concurrieron este domingo 30 de junio a las urnas (22,6%).
La oposici¨®n mostr¨® que es capaz de atraer una mayor cantidad de votantes que la derecha. En la primaria de la Nueva Mayor¨ªa participaron casi el triple de personas que en las de la Alianza, lo que para los analistas en una se?al de que los partidarios de centroderecha ven pocas posibilidades de que su candidato ¨Cindependientemente de cu¨¢l haya sido el resultado- gane en las elecciones de noviembre frente a Bachelet.
El oficialismo ha quedado en una situaci¨®n compleja: del total de votantes de las primarias, s¨®lo un 27% vot¨® por alguno de los candidatos de la derecha. La tensi¨®n de instal¨® en el sector, sobre todo con miras a las Parlamentarias de noviembre, y este hecho qued¨® reflejado en que Allamand evit¨® saludar a Longueira en p¨²blico.
Bachelet ha demostrado que las encuestas en su caso no fallan y que es un fen¨®meno pol¨ªtico incombustible y de tefl¨®n. Pese a que vivi¨® en Nueva York desde septiembre de 2010 hasta marzo pasado, y mantuvo un estricto silencio respecto de la coyuntura local, la expresidente obtuvo 1,5 millones de votos, lo que supera a la suma de los otros cinco candidatos de la oposici¨®n y la derecha.
Una de las grandes sorpresas de la jornada fue la votaci¨®n que obtuvo el candidato independiente Andr¨¦s Velasco (13%). El exministro de Hacienda de Bachelet y hombre clave de su Gobierno, sin el apoyo de ning¨²n partido, obtuvo el segundo lugar detr¨¢s de su ex jefa, con quien mantiene una relaci¨®n distante en lo pol¨ªtico y lo personal. El profesor de Harvard apuntaba a los votantes del centro pol¨ªtico, al igual que el candidato democristiano Claudio Orrego, que qued¨® en el tercer lugar con un 8,86% de los votos.
El desempe?o electoral del exalcalde de Pe?alol¨¦n deja en una inc¨®moda situaci¨®n a la Democracia Cristiana (DC), uno de los pilares de la coalici¨®n que sac¨® a Augusto Pinochet del poder y gobern¨® el pa¨ªs desde que finaliz¨® la dictadura en 1990 hasta 2010. El partido alguna vez fue la colectividad m¨¢s importante de Chile, pero en los ¨²ltimos a?os ha ido perdiendo poder e influencia.
La suma de votos de Velasco y Orrego ¨Cque apuntaban a influir en el programa de Gobierno de Bachelet desde la centroizquierda moderada- es de apenas un 21,86% frente al 73% de la exjefa de Estado. La indiscutida victoria de Bachelet los deja sin capacidad de maniobra para influir en la campa?a opositora.
Los dos candidatos, sin embargo, tienen estrategias distintas. El democristiano se ha puesto de inmediato a disposici¨®n de Bachelet, mientras que el independiente anunci¨® que iba a trabajar y a votar por la expresidenta, pero que no llamar¨¢ a sus votantes a sufragar por ella el 17 de noviembre.
Los dos abanderados se acercaron la noche del domingo hasta el hotel plaza San Francisco de Santiago, donde se instalaron Bachelet y sus partidarios, para saludar a la triunfadora. El cuarto candidato, el presidente del Partido Radical, Jos¨¦ Antonio G¨®mez (5%), fue el primero en llegar y plegarse al equipo de la expresidenta.
Bachelet pretende liderar un nuevo ciclo pol¨ªtico y, en sus tres meses de campa?a, se ha mostrado decidida a ampliar la coalici¨®n de centroizquierda que la llev¨® al poder en 2006. La candidata habla de una Nueva Mayor¨ªa, que por primera vez incluye a los comunistas, y ha propuesto medidas que ni en su Gobierno ni en las anteriores administraciones de centroizquierda se ejecutaron: una reforma tributaria profunda, una nueva Constituci¨®n y la educaci¨®n gratuita universal.
Desde este lunes, la exjefa de Estado deber¨¢ enfrentarse a una dif¨ªcil misi¨®n: conjugar en un mismo pacto de Gobierno las diferentes posiciones pol¨ªticas de la oposici¨®n, que abarcan desde la Democracia Cristiana hasta el Partido Comunista. Bachelet deber¨¢ cuidarse de no decepcionar a los movimientos sociales ¨Csobre todo al estudiantil, que le ha sido esquivo- y cerrar los flancos al resto de candidaturas de izquierda que no han participado del proceso de primarias. Pero lo m¨¢s complejo, de ganar, comenzar¨¢ en marzo de 2014: gobernar con un pacto que tiene diferencias b¨¢sicas.
Otros seis candidatos pretenden medirse con Bachelet y Longueira en noviembre: el ecologista Alfredo Sfeir, el humanista Marcel Claude, Roxana Miranda (del Partido Igualdad), el economista Franco Parisi, el independiente Tom¨¢s Jocelyn-Holt y Marco Enr¨ªquez-Ominami (PRO), que en las presidenciales de 2009 obtuvo un 20% de los sufragios, capturando al votante desencantado de la Concertaci¨®n.
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