HRW acusa a El Asad de estar detr¨¢s del ataque qu¨ªmico en Damasco
Es la primera organizaci¨®n no afiliada a ning¨²n bando que afirma la responsabilidad del r¨¦gimen sirio en el uso de gas t¨®xico
La organizaci¨®n Human Rights Watch (HRW) ha concluido, en una investigaci¨®n independiente sobre dos de los ataques ocurridos en Ghuta, en las afueras de Damasco, el 21 de agosto, que las armas responsables de cientos de muertes ¡°est¨¢n en posesi¨®n de, y son usadas por, el gobierno sirio y sus fuerzas armadas¡±. Se trata de la primera confirmaci¨®n de una organizaci¨®n no afiliada a gobierno alguno, de que no solo se emple¨® gas sar¨ªn en el ataque sino que, con toda probabilidad, fue el r¨¦gimen de Bachar El Asad el responsable. Estados Unidos ha llegado a la misma conclusi¨®n, e incluso ha estimado en 1.429 el n¨²mero de v¨ªctimas, y aunque en un principio dijo que se planteaba atacar al Gobierno sirio por el uso de armas de destrucci¨®n masiva, en las pasadas horas ha aceptado explorar una soluci¨®n negociada a la crisis si El Asad deja su arsenal qu¨ªmico a recaudo internacional.
HRW analiz¨® pormenorizadamente dos ataques, en el este y oeste de Ghuta, separados por 16 kil¨®metros. Como pruebas, sus t¨¦cnicos emplearon testimonios de personas afectadas y los m¨¦dicos que las trataron; un an¨¢lisis de la sintomatolog¨ªa de los heridos, y restos de los misiles empleados. ¡°Nuestra investigaci¨®n cree que los ataques del 21 de agosto fueron con armas qu¨ªmicas, usando un sistema de cohetes tierra-tierra de aproximadamente 330 mm de di¨¢metro, probablemente producidos en Siria y un sistema de cohetes de la era sovi¨¦tica tierra-tierra de 140 mm para diseminar un agente nervioso. Las pistas sugieren que el gas sar¨ªn o un agente nervioso de capacidad armament¨ªstica similar fueron probablemente empleados¡±, reza el informe.
La organizaci¨®n concluye que las pruebas examinadas ¡°sugieren de forma clara que el ataque con armas qu¨ªmicas del 21 de agosto en el este y oeste de Ghuta fue acometido por las fuerzas del gobierno¡±. Cita tres motivos principales para esa aserci¨®n: el uso de misiles y cohetes a gran escala, el tipo de proyectiles empleados y la gran cantidad de gas sar¨ªn requerida para efectuar ese ataque en una zona, adem¨¢s, controlada por opositores en los pasados meses. En los dos ataques estudiados por los t¨¦cnicos de HRW, esta organizaci¨®n ha identificado a 89 fallecidos, aunque las bajas se cuentan a cientos y los heridos, a miles. El r¨¦gimen de El Asad ha negado estar tras el ataque y acusa a los rebeldes de ser los verdaderos responsables.
¡°Los restos de cohetes y los s¨ªntomas de las v¨ªctimas en los ataques del 21 de agosto en Ghuta ofrecen una prueba clara de los sistemas de armas que se usaron... Estas pruebas sugieren de forma clara que las tropas del gobierno sirio lanzaron cohetes cargados con cabezas qu¨ªmicas en las afueras de Damasco aquella terrible ma?ana¡±, seg¨²n Peter Bouckaert, director de emergencias de HRW. ¡°La cada vez mayo evidencia del uso de armas qu¨ªmicas en el terrible conflicto en Siria deber¨ªa encauzar el debate internacional a la prevenci¨®n del uso de esas armas y, m¨¢s ampliamente, a la protecci¨®n de la poblaci¨®n civil en Siria¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.