China inicia el fin de los campos de reeducaci¨®n por el trabajo
Las detenciones de hasta cuatro a?os sin juicio ser¨¢n eliminadas en la ciudad sure?a de Guangzhou, en la provincia de Guangdong
La reeducaci¨®n por el trabajo -un controvertido sistema de detenci¨®n que permite a la polic¨ªa encarcelar hasta cuatro a?os sin necesidad de juicio- ser¨¢ eliminada en la ciudad china de Guangzhou (capital de la provincia sure?a de Guangdong) para finales de este a?o, seg¨²n ha publicado la prensa oficial. Los 100 presos que quedan en sus c¨¢rceles ser¨¢n puestos en libertad para entonces, cuando habr¨¢n completado sus sentencias, seg¨²n ha afirmado Yu Mingyong, vicepresidente del tribunal provincial de Guangzhou. Las autoridades dejaron de enviar supuestos criminales a los campos de reeducaci¨®n de esta ciudad -una de las m¨¢s grandes de China- en marzo pasado.
El pa¨ªs asi¨¢tico estudia desde hace a?os reformar esta v¨ªa de castigo -muy criticada tanto fuera como dentro de China-, pero la decisi¨®n ha sido retrasada una y otra vez. Ahora, tras la llegada al poder en marzo de la nueva Administraci¨®n liderada por el presidente, Xi Jinping, y el primer ministro, Li Keqiang, la reforma est¨¢ avanzando. En su primera rueda de prensa tras asumir la jefatura de Gobierno, Li prometi¨® cambios en la legislaci¨®n este a?o, y, aunque a¨²n no ha sido anunciado un plan nacional, algunos gobiernos provinciales ya han dado pasos en este sentido.
El pa¨ªs asi¨¢tico estudia desde hace a?os reformar esta v¨ªa de castigo
"La polic¨ªa y muchos expertos legales se han dado cuenta de los inconvenientes de la reeducaci¨®n por el trabajo y han pedido la abolici¨®n del sistema (conocido como 'laojiao'), que se ha quedado obsoleto", afirma Yu en el peri¨®dico China Daily. "Muchos de quienes son puestos en libertad tras pasar por estos campos tienen muchas dificultades para reintegrarse en la sociedad y las familias, y trabajar despu¨¦s (¡) Su libertad personal ha sido limitada durante varios a?os".
Los campos de reeducaci¨®n han sido muy criticados por organizaciones de derechos humanos y Naciones Unidas. En China, abogados y acad¨¦micos han asegurado que son ilegales, son fuente de abusos de poder, violan la Constituci¨®n y son abono para la corrupci¨®n, ya que muchos familiares de los presos sobornan a los funcionarios para reducir las penas o mejorar sus condiciones en la c¨¢rcel.
Seg¨²n el Ministerio de Justicia 160.000 personas est¨¢n en los campos de reeducaci¨®n, la ONU eleva la cifra hasta las 190.000
La reforma del sistema se ha visto frenada por la posici¨®n del Ministerio de Seguridad P¨²blica, que ha advertido del riesgo que puede representar para la estabilidad social. Sus partidarios aseguran que contribuye a frenar la criminalidad. La eliminaci¨®n supondr¨ªa tambi¨¦n la desaparici¨®n de una fuente de ingresos para los Gobiernos locales. Estos se benefician de la mano de obra gratis de los internos, que fabrican, entre otros, componentes de automoci¨®n.
Algunos expertos creen que la modificaci¨®n del sistema precisar¨ªa una redistribuci¨®n de los poderes entre distintos organismos gubernamentales, como los Ministerios de Justicia y de Seguridad P¨²blica, y una revisi¨®n de leyes y regulaciones que van en contra de la reforma.
El sistema de 'laojiao' fue creado en la d¨¦cada de 1950, a partir del modelo sovi¨¦tico, poco despu¨¦s de la llegada al poder de Mao Zedong en 1949, y fue legalizado por el Congreso chino en 1957. Inicialmente, surgi¨® para encarcelar a "contrarrevolucionarios", "capitalistas" y cr¨ªticos con el nuevo Gobierno comunista. M¨¢s tarde, fue extendido a autores de otros supuestos delitos, prostitutas y drogadictos. Tambi¨¦n es utilizado ampliamente contra activistas pol¨ªticos y religiosos, y los miembros del movimiento de inspiraci¨®n budista Falun Gong, que Pek¨ªn ilegaliz¨® a finales de la d¨¦cada de 1990.
Las estimaciones sobre el n¨²mero de personas en los campos reeducaci¨®n por el trabajo var¨ªan. Seg¨²n el Ministerio de Justicia, en 2008 hab¨ªa 160.000 internos en un total de 350 de estos centros. La cadena de televisi¨®n p¨²blica CCTV eleva el n¨²mero a 310.000, en 310 centros. Naciones Unidas estim¨® en 2009 la cifra en 190.000.
La reeducaci¨®n por el trabajo es un sistema de detenci¨®n administrativa para delitos menores, dictada al margen del sistema judicial, que permite a la polic¨ªa encarcelar hasta cuatro a?os. Es distinta de la antes denominada reforma por el trabajo o 'laogai', que incluye prisiones, granjas y campos de trabajos forzados para condenados por un tribunal, con penas m¨¢s extensas. Estas ¨²ltimas instalaciones contin¨²an existiendo, pero el Gobierno no emplea el t¨¦rmino 'laogai' desde mediados de la d¨¦cada de 1990.
Seg¨²n Wang Da, profesor de la Universidad de Guangzhou, el 'laojiao' fue importante para garantizar el orden y gestionar la sociedad en un momento en que el pa¨ªs no ten¨ªa un sistema judicial avanzado. "Pero ahora China ha creado procedimientos legales e instalaciones para procesar y castigar a los peque?os criminales, lo que ha hecho obsoleta la reeducaci¨®n por el trabajo", afirma en China Daily. "El sistema deber¨ªa finalizar, ya que va en contra de los procedimientos legales y viola los derechos del ciudadano. La abolici¨®n es importante para promover el gobierno de la ley, proteger los derechos humanos y estandarizar los procedimientos legales". Los expertos presagian que la transici¨®n ser¨¢ progresiva, y que el caso de Guangzhou podr¨ªa servir de ejemplo a otras ciudades para la abolici¨®n gradual de un m¨¦todo de punici¨®n que lleva en vigor m¨¢s de medio siglo.
En febrero, la provincia suroccidental de Yunnan dijo que dejar¨ªa de enviar gente a campos de reeducaci¨®n por algunos delitos, como "amenazar la seguridad nacional" o "manchar la imagen de los funcionarios". La prensa afirm¨® entonces que cuatro ciudades hab¨ªan sido designadas como lugares de ensayo para sustituir el sistema por un programa de "rectificaci¨®n del comportamiento ilegal a trav¨¦s de la educaci¨®n". Algunos cr¨ªticos temen que la futura reforma sea solo una operaci¨®n de maquillaje.
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