Mi 11 de septiembre
Una nieta de Salvador Allende recuerda a los miles de chilenos que padecieron el horror de la represi¨®n bajo la dictadura
El 11 de septiembre se recuerda por la consecuencia y lealtad de mi abuelo, Salvador Allende G. con el pueblo de Chile, pero para m¨ª, esa fecha evoca sentimientos relacionados sobre todo con mi madre: Beatriz Allende Bussi, la Taty. Mi madre estudi¨® Medicina y se especializ¨® en Pediatr¨ªa y Salud P¨²blica, pues sus cari?os siempre estuvieron cerca de los m¨¢s d¨¦biles y profesionalmente decidi¨® dedicar sus energ¨ªas y esfuerzos a ellos, tal como lo hac¨ªa en pol¨ªtica. Ese 11 de septiembre, la Taty concurri¨® a La Moneda. Cerca de las diez y media de aquella ma?ana, mientras los aviones iniciaban sus vuelos rasantes sobre el palacio presidencial. Salvador Allende reuni¨® a todos los que estaban con ¨¦l, y les orden¨® salir a las mujeres.
En ese momento la vida de mi madre cambi¨® para siempre. El 13 de septiembre part¨ªamos al exilio en Cuba, la patria de mi padre. All¨ª la Taty trabaj¨® en el Comit¨¦ Chileno de Solidaridad. Desde ese lugar, promovi¨® la unidad para resistir la dictadura y recuperar la democracia.
Recorri¨® el mundo denunciando las persecuciones y las violaciones de los Derechos Humanos. Sus ¨²ltimos meses de vida trabajaba sin descanso reuniendo informaci¨®n, documentos y testimonios sobre los detenidos desaparecidos, entre los que se encontraban algunos de sus mejores amigos y amigas. Mi madre vislumbr¨® desde la distancia, lo que los partidarios de Pinochet no asum¨ªan: la muerte de militantes de izquierda, pol¨ªtica de exterminio llevada a cabo por agentes del Estado, a trav¨¦s de ejecuciones, desapariciones forzosas, como resultado de torturas, en supuestos enfrentamientos armados, homicidios premeditados, entre otros.
Entre 1973 y 1975 hubo 42.486 detenciones pol¨ªticas. Y de acuerdo a datos entregados por la Vicar¨ªa de la Solidaridad, entre 1976 y 1988 hubo 12.134 detenciones individuales y 26.431 detenciones masivas.
El Informe Rettig y la Corporaci¨®n Nacional para la Reconciliaci¨®n y Reparaci¨®n, conclu¨ªa que en 1996, 3.197 personas murieron o desaparecieron entre el 11 de septiembre de 1973 y el 11 de marzo de 1990 a consecuencias de violaciones a los derechos humanos. De ¨¦stas, 1.102 fueron calificadas como desaparecidos(as) y 2.095 como muertos(as).
El Instituto Latinoamericano de Salud Mental y Derechos Humanos (ILAS), estim¨® que un 10% de la poblaci¨®n chilena, a principios de los a?os ochenta se encontraba afectada por alguna situaci¨®n represiva. De este total ILAS cree que situaciones extremas afectaron a unas 200.000 personas que fueron obligadas a vivir en el exilio, otras torturadas, ejecutadas o desaparecidas, junto a sus familiares directos.
Fue tal el horror de la Dictadura que afect¨® a mi madre, una mujer de sensibilidad inmensa, que sobrepasada por el dolor y los fantasmas de sus seres amados que desaparec¨ªan y mor¨ªan tan lejos de ella, la llev¨® a seguir el camino que el destino traz¨® para ellos, quit¨¢ndose la vida.
A 40 a?os del Golpe de Estado que puso fin al Gobierno de la Unidad Popular, va un homenaje a abuelo, a mi madre y a aquellos que lucharon por un proyecto de sociedad m¨¢s justa, m¨¢s igualitaria, m¨¢s solidaria. Mi homenaje a los miles de chilenos que desaparecieron, que fueron asesinados, torturados o expatriados y a los que lucharon contra la dictadura para recuperar la libertad y la democracia.
A 40 a?os, la memoria muestra que es obstinada, testaruda y regresa con m¨¢s fuerza, pues el paso de los a?os no la borra, m¨¢s bien la refuerza, por la falta de verdad y justicia especialmente de parte de la derecha pol¨ªtica que apoy¨® al dictador.
Maya Fern¨¢ndez Allende es nieta de Salvador Allende y candidata a diputada.
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