El uso pol¨ªtico de la justicia

Desde fines de los a?os 90 hasta la fecha muchos gobernantes en Am¨¦rica Latina han ido elaborando un modelo pol¨ªtico cuyo objetivo final es permanecer ilimitadamente en el poder. Si bien utilizan la palabra ¡°democracia¡± como bandera y el voto popular para llegar al gobierno, una vez elegidos, reforman sus Constituciones y destruyen sus sistemas judiciales para controlarlos. El control de estos gobiernos sobre el sistema judicial es quiz¨¢s la pieza clave que necesitan para perpetuarse en el poder. Controlando la justicia pueden silenciar a la prensa, ocultar la corrupci¨®n y perseguir a la oposici¨®n. Quiz¨¢s uno de los casos m¨¢s representativos es el Ecuatoriano.

El 21 de Septiembre pasado, durante una cadena nacional, el presidente de Ecuador Rafael Correa rompi¨® en vivo ejemplares de los diarios El Comercio, La Hora y Hoy, y les advirti¨® que de acuerdo a la nueva ley de comunicaciones, ellos est¨¢n obligados a ¡°publicar noticias de inter¨¦s p¨²blico¡±. Durante el mismo programa, continu¨® atacando y descalificando a cada uno de los columnistas que en esa semana hab¨ªan publicado cr¨ªticas en su contra, oblig¨¢ndolos a rectificarse. De no rectificarse, Correa har¨¢ lo que ya ha hecho reiteradamente en el pasado: amenazar a los medios con quitar pauta oficial, o abrir investigaciones contra los propios auspiciantes de estos medios hasta que el peri¨®dico se rectifique o el periodista que escribi¨® la columna sea despedido. Y si esto no funciona, Correa perseguir¨¢ judicialmente a estos medios, imponi¨¦ndoles sanciones millonarias.

Durante el mes de Junio, diferentes medios publicaron noticias sobre una presunta mega operaci¨®n de lavado de dinero entre Venezuela y Ecuador a trav¨¦s del sistema monetario conocido como ¡°SUCRE¡± (Sistema ?nico de Compensaci¨®n Regional). Producto de dichas publicaciones, la fiscal¨ªa ecuatoriana abri¨® una investigaci¨®n sobre 4 empresas involucradas en el lavado. Sin embargo, la investigaci¨®n sobre una de ellas llamada ¡°Fondo Global¡± nunca prosper¨®, presuntamente por los lazos de sus propietarios con funcionarios de los gobiernos de Ecuador y Venezuela. Al d¨ªa de hoy no hay indicios que la justicia proceda a fondo con estos casos. Las operaciones de lavado de dinero y exportaciones ficticias entre ambos pa¨ªses contin¨²an.

Mery Zamora, dirigente del Movimiento Popular Democr¨¢tico (MPD), fue sentenciada tiempo atr¨¢s por un tribunal de primera instancia a 8 a?os de prisi¨®n por el delito de sabotaje por incitar una protesta estudiantil durante el 30 de Septiembre de 2010, mientras se desarrollaba una protesta policial en contra del gobierno. Esta decisi¨®n no es m¨¢s que otra muestra de persecuci¨®n pol¨ªtica contra un grupo abiertamente opositor. El fallo fue apelado por sus abogados. Sin embargo, el juez de segunda instancia a qui¨¦n le toco el caso, es ni m¨¢s ni menos que Gutemberg Vera, abogado personal de Rafael Correa en su juicio contra el diario El Universo.

Estos son solo algunos ejemplos que sirven para mostrar como el Gobierno de Rafael Correa utiliza el sistema judicial arbitrariamente para silenciar periodistas, ocultar posibles casos de corrupci¨®n en los cuales altos funcionarios podr¨ªan estar involucrados, y perseguir a aquellos ecuatorianos que alzan la voz y critican al gobierno.

Pero este control del sistema judicial no ocurri¨® de la noche a la ma?ana, si no que fuer parte de un plan deliberado. En Mayo de 2011, Rafael Correa convoc¨® un refer¨¦ndum para reestructurar la Corte Suprema. A trav¨¦s del mismo, creo un nuevo sistema de selecci¨®n de jueces, el cual en ¨²ltima instancia estar¨ªa controlado por el Ejecutivo. Hoy en d¨ªa, la gran mayor¨ªa de los nuevos jueces elegidos a trav¨¦s de este nuevo mecanismo son o ex funcionarios de su gabinete, o parientes de funcionarios, o jueces que han estado involucrados en decisiones controversiales a favor de los intereses del gobierno. Desde entonces, es pr¨¢cticamente imposible encontrar una sentencia judicial que perjudique los intereses de Rafael Correa.

En Ecuador, las libertades civiles de las personas se esfuman d¨ªa a d¨ªa y cada vez se hace m¨¢s dif¨ªcil hacer oposici¨®n. El miedo reina entre aquellos que quieren opinar diferente. Todo esto ocurre por que la herramienta fundamental para el funcionamiento de una Democracia Constitucional, el sistema judicial, ha sido destruida y es utilizada no como herramienta de justicia, si no de persecuci¨®n.

?Ezequiel V¨¢zquez-Ger es consultor pol¨ªtico basado en Washington DC. Twitter: @ezequielvazquez