Los servicios secretos franceses admiten que colaboran con la NSA

Despu¨¦s de que las autoridades francesas mostraran su indignaci¨®n y estupor ante la amplitud de las escuchas electr¨®nicas supuestamente realizadas por la Agencia Nacional de Seguridad de EEUU (NSA) en Francia, algunos elementos nuevos parecen sugerir que Par¨ªs habr¨ªa fingido, al menos en parte, esa sorpresa.

Tras el espectacular desmentido del jefe de la NSA, el general Keith Alexander, que el martes calific¨® como ¡°completamente falsas¡± las informaciones publicadas por Le Monde y El Mundo en Francia y Espa?a sobre el espionaje masivo de Estados Unidos en Europa ¨CAlexander acus¨® a sus aliados europeos de ser los autores de las escuchas y del env¨ªo a Washington de millones de datos secretos-, el diario franc¨¦s confirma que Francia envi¨® informaci¨®n a la NSA en virtud de un acuerdo secreto vigente desde finales de 2011.

Una fuente an¨®nima de la Direcci¨®n de los Servicios Exteriores (DGSE) afirm¨® a Le Monde que el protocolo de intercambio de datos empez¨® a funcionar a principios de 2012, lo que confirma una informaci¨®n publicada el 28 de octubre por el S¨¹ddeutsche Zeitung, que aseguraba que la NSA y la DGSE mantienen un programa com¨²n de vigilancia llamado Lustre.

Francia, explica Le Monde, goza de una posici¨®n estrat¨¦gica en materia de transporte de datos electr¨®nicos gracias a los cables submarinos por los que transitan la mayor parte de los datos procedentes de ?frica y Afganist¨¢n. Esos cables aterrizan en Marsella y en Penmarc'h (Breta?a), dos puertos controlados por la DGSE, que se ocupa de almacenar el flujo de informaci¨®n entre el extranjero y Francia.

La fuente de la DGSE tambi¨¦n ha revelado al diario de Par¨ªs que la agencia francesa entrega a su hom¨®loga estadounidense ¡°los bloques enteros¡± de informaci¨®n sobre esas zonas del mundo y que, como contrapartida, la NSA da a Francia los datos sobre ¡°las partes del mundo donde Francia est¨¢ ausente¡±. La fuente a?ade que ¡°esa negociaci¨®n no se realiz¨® en una sola vez¡±, y que ¡°el per¨ªmetro de lo que se comparte se ha ampliado al hilo de discusiones que se prolongan hasta ahora mismo¡±.

Seg¨²n el art¨ªculo, los datos enviados por Par¨ªs a Washington pertenecen a ciudadanos privados franceses y extranjeros que viven en las zonas geogr¨¢ficas que controla Francia, lo que sugiere que el Gobierno de Fran?ois Hollande estaba al corriente de esas pr¨¢cticas cuando la semana pasada recrimin¨® p¨²blicamente a la Administraci¨®n de EEUU por espiar de forma masiva en su territorio.

Una fuente cercana al primer ministro ha afirmado que los acuerdos de colaboraci¨®n con la NSA son frecuentes en otros pa¨ªses ¡°como Israel, Suecia o Italia¡±, que reciben otros cables submarinos cargados de datos estrat¨¦gicos para Estados Unidos. La informaci¨®n confirma que, desde 2011, la batalla del espionaje mundial se dirime bajo el mar.

En todo caso, Le Monde mantiene que los documentos filtrados por Edward Snowden siguen demostrando que las operaciones de la NSA se dirigen contra sus aliados, y en este caso concreto contra Francia. Una alta fuente de la DGSE ha reconocido de forma an¨®nima que el intercambio de datos existe, pero ha negado categ¨®ricamente que la DGSE haya transferido ¡°70,3 millones de datos a la NSA¡± en un mes, como sugiri¨® la agencia estadounidense el martes.