Simon Peres: ¡°La victoria ser¨¢ la paz¡±

Dos viejos amigos se sentaron ayer a charlar en la Feria del Libro de Guadalajara. De un lado, el presidente de Israel y premio Nobel de la Paz, Simon Peres, que se defini¨® como un ¡°optimista insatisfecho¡±, con esa insatisfacci¨®n que ha sido ¡°la mayor contribuci¨®n del juda¨ªsmo a la historia de la humanidad¡±. Del otro, el expresidente espa?ol Felipe Gonz¨¢lez, un ¡°cristiano con minusval¨ªa al que abandon¨® la fe¡±. Moderados por el escritor e historiador mexicano Enrique Krauze, los dos estadistas hablaron de la tolerancia, del poder, de la ciencia, de Dios, de los desaf¨ªos de la democracia en el siglo XXI. De lo que ha cambiado el mundo desde que se conocieron, hace 40 a?os. Pero sobre todo, de lo que no ha cambiado: del complicado camino hacia la paz en Oriente Pr¨®ximo.

En Peres lat¨ªa la melancol¨ªa por las oportunidades perdidas. Pero apel¨® precisamente a la historia para so?ar con un futuro optimista. ¡°Cuando echo la vista atr¨¢s veo que hemos llegado a la paz con Egipto y hemos llegado a la paz con Jordania, devolviendo todos los territorios ocupados¡±. Y se mostr¨® conciliador: ¡°No podemos seguir siendo jud¨ªos y dominar a otro pueblo, va en contra de lo que significa el juda¨ªsmo. Cuando dicen que somos el pueblo elegido quiere decir que hemos elegido el valor moral. Fuimos atacados siete veces por enemigos superiores, y ganamos siempre. Pero incluso cuando ganamos dijimos que no quer¨ªamos esa victoria, la vitoria ser¨¢ la paz, porque las victorias militares son temporales.¡±.

Pero esa paz, seg¨²n el presidente israel¨ª, choca una y otra vez contra un grave escollo: que los palestinos no tengan una posici¨®n com¨²n. ¡°El problema de verdad es que los ¨¢rabes est¨¢n divididos, una parte est¨¢ con la paz y otra con el terrorismo¡­ Los israel¨ªes tambi¨¦n tienen diferencias, pero no nos matamos entre nosotros¡±. E hizo una petici¨®n a los ¨¢rabes que quieran ayudar a solucionar al conflicto: ¡°Vayan y d¨ªganle a los palestinos de Gaza que dejen de disparar, para facilitar¨¢n un gran acuerdo¡±. Y una soluci¨®n que favorecer¨ªa a ambas partes: "Para nosotros un Oriente Pr¨®ximo tranquilo es una bendici¨®n. No nos da ning¨²n placer ver a la gente sufriendo o a ni?os hambrientos".

Gonz¨¢lez coincidi¨® en que el tema es complejo. ¡°Le he dicho muchas veces a los palestinos que el problema de la paz depende de la renuncia a toda clase de violencia¡±. Pero advirti¨® de que, igual que hay que decirles las verdades a los amigos, tambi¨¦n deb¨ªa dec¨ªrselas a Israel. Y as¨ª record¨® al pa¨ªs que preside Simon Peres que hay un momento hist¨®rico irrepetible para alcanzar la paz, con una regi¨®n agitada por los vientos de la Primavera ?rabe, por mucho que para algunos se haya enfriado en una suerte de invierno ¨¢rabe; con unas negociaciones nucleares con Ir¨¢n; y con crisis irreversible en Siria. Su conclusi¨®n es que Israel debe llegar a un acuerdo cuanto antes. Pero al acuerdo de una paz que ¡°no va a depender de la eficacia de un muro que recuerda a los guetos impuestos a su pueblo¡±.

Tampoco vale, seg¨²n el expresidente espa?ol, que el objetivo sea solo sentarse a negociar. Y, si se rompe el di¨¢logo, volverse a sentar. ¡°El objetivo tiene que ser alcanzar un acuerdo: el doble estado, ambos viables, con seguridad¡±. Y dej¨® en el aire dos preocupaciones. De un lado que Israel, al que calific¨® de Estado amigo, est¨¦ perdiendo la comprensi¨®n y el apoyo de la opini¨®n p¨²blica internacional. De otro, la necesidad de comprometer a Europa seriamente en el proceso, porque su p¨¦rdida de relevancia es ¡°una desgracia¡±.

?Vive efectivamente Oriente Pr¨®ximo una ocasi¨®n hist¨®rica para alcanzar la paz? La ¨²ltima palabra del debate para contestar a esa pregunta la tuvo Peres. ¡°Creo que hay una oportunidad, aunque hay dificultades¡±. Y cit¨® no solo la divisi¨®n entre los palestinos, tambi¨¦n las resistencias en la opini¨®n p¨²blica israel¨ª: ¡°?Por qu¨¦ pagar un precio tan alto? ?Por qu¨¦ fiarnos de ellos?¡±. Por ello, invit¨® a los negociadores a no ser totalmente racionales, ¡°porque solo hay dos cosas que no pueden hacerse con los ojos abiertos, el amor y la paz. Hay que cerrarlos un poco¡±. Y dej¨® para concluir un mensaje de esperanza. ¡°No desespero. Igual que firmamos la paz con Egipto y Jordania, la firmaremos con los palestinos, esa es la prioridad... Negociar depende de no perder los nervios y de no perder la esperanza. Si uno fracasa, levantarse y no mirar atr¨¢s¡±.