El Gobierno de Fern¨¢ndez aumenta el billete del autob¨²s un 66%

Buenos Aires tiene una de las tarifas de autobuses m¨¢s baratas de Latinoam¨¦rica. Aquellos usuarios que han hecho el tr¨¢mite para tener la llamada tarjeta SUBE pagan el equivalente a 0,23 d¨®lares por la tarifa m¨ªnima. Los que no la tienen, que en general son solo los turistas, abonan 0,46. Pero desde el pr¨®ximo mi¨¦rcoles los precios subir¨¢n y el m¨ªnimo se elevar¨¢ el 66%. Con tarjeta SUBE se pagar¨¢n 0,38 d¨®lares y sin ella, 0,77, con lo que los valores porte?os se situar¨¢n en la media de la regi¨®n.

Sin anuncios por los medios de comunicaci¨®n, el Gobierno de la peronista Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner public¨® por sorpresa este viernes en el Bolet¨ªn Oficial la decisi¨®n de elevar el coste del autob¨²s en la capital argentina y sus alrededores. La medida se ha adoptado en d¨ªas en que cientos de usuarios de Buenos Aires protestan por cortes de electricidad, pero en los que tambi¨¦n muchos se han marchado para comenzar a gozar de las vacaciones del verano austral. El momento del anuncio del aumento de tique no es un asunto menor teniendo en cuenta que en junio pasado un incremento de bus en Brasil deriv¨® en protestas populares que despu¨¦s fueron sumando otras reclamaciones hasta transformarse en masivas. Aquellas manifestaciones pusieron en evidencia los desaf¨ªos sociales que persisten en el gigante sudamericano pese a las mejoras introducidas por 11 a?os de gobiernos del Partido de los Trabajadores (PT).

En el caso de Argentina, donde el kirchnerismo lleva diez a?os gobernando, en la resoluci¨®n que aumenta el boleto del colectivo, el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, justific¨® la decisi¨®n por ¡°las mejoras constatadas respecto del salario real de la poblaci¨®n, acompa?adas por una marcada ca¨ªda de los ¨ªndices de desocupaci¨®n (desempleo)¡±. Es cierto que en los ¨²ltimos a?os la media de los salarios ha subido m¨¢s que la inflaci¨®n (25,5% anual en la actualidad y con riesgo de elevarse) y muy por encima que el tique de autob¨²s en Buenos Aires, donde las tarifas aumentan m¨¢s lento porque aqu¨ª vota un tercio de los argentinos y adem¨¢s se mide el ¨ªndice de precios al consumidor (IPC). En las provincias, el transporte p¨²blico es m¨¢s caro. A su vez, el paro en Argentina es del 6,8%, uno de niveles m¨¢s bajos en 22 a?os.

Pero lo que no dice la resoluci¨®n oficial es que el aumento del precio del bus busca reducir las subvenciones que mantienen el servicio. En 2013, y gracias a un aumento de tarifas anunciado hace un a?o, el presupuesto de subsidios al transporte p¨²blico se redujo en t¨¦rminos reales (ajustados por la inflaci¨®n). Sin embargo, el peso de las subvenciones al suministro energ¨¦tico se ha elevado y el d¨¦ficit fiscal superar¨¢ el 2% del PIB este a?o, seg¨²n diversos economistas. De todos modos, la suma de subsidios a la energ¨ªa y el transporte se reducir¨¢ como porcentaje del PIB del 4,3% al 3,8% entre 2012 y 2013, seg¨²n la Comisi¨®n Econ¨®mica para Am¨¦rica Latina y el Caribe (CEPAL).

Analistas cr¨ªticos del Gobierno de Fern¨¢ndez consideran que deber¨ªa aplacar su pol¨ªtica fiscal expansiva para disminuir la inflaci¨®n y que para ello tendr¨ªa que recortar ayudas p¨²blicas, como las del transporte o las que abaratan el consumo de gas y electricidad en hogares de clase media de Buenos Aires. El aumento de tarifas de transporte o energ¨ªa provoca un impacto en la inflaci¨®n en el mes en que entra en vigencia, pero se supone que a lo largo del resto del a?o sirve para contraerla al disminuir el impulso fiscal. El Gobierno de Fern¨¢ndez siempre ha rechazado recetas ortodoxas para bajar la inflaci¨®n que impliquen pol¨ªticas fiscales o monetarias que enfr¨ªen la econom¨ªa. Sin embargo, este aumento del precio del bus apunta en esa direcci¨®n.

Tambi¨¦n van en el mismo sentido las declaraciones que esta semana hizo el presidente del Banco Central, Juan Carlos F¨¢brega, de que en 2014 se reducir¨¢ la emisi¨®n monetaria, que en 2013 se elev¨® el 25%. El ministro de Econom¨ªa, Axel Kicillof, ha anunciado adem¨¢s un acuerdo de precios de 180 productos b¨¢sicos para los primeros tres meses del a?o pr¨®ximo. Tanto F¨¢brega como Kicillof llevan poco m¨¢s de un mes en su cargo y est¨¢n tratando de enderezar el rumbo de una econom¨ªa que ha dejado de crecer tan r¨¢pido como entre 2003 y 2011 y en la que la inflaci¨®n persiste por encima del 20% anual desde 2007, con la ¨²nica excepci¨®n de 2009, a?o de la crisis mundial.