La impunidad se quiebra en Grecia

Mijalis Liapis fue uno de los 70.000 griegos que dieron de baja sus veh¨ªculos en 2013 por no poder afrontar el pago del impuesto de circulaci¨®n. Lo hizo en agosto pasado, ante una deuda de 1.320 euros, y desde entonces conduc¨ªa su lujoso todoterreno sin seguro, con placas falsas y, adem¨¢s, salt¨¢ndose de vez en cuando un stop, como el d¨ªa que fue detenido, el pasado 17 de diciembre. Pero el asunto tal vez no habr¨ªa tenido trascendencia de no ser por sus antecedentes: ministro de Transportes (2004-2007) y de Cultura (2007-2009) en Gobiernos de la conservadora Nueva Democracia (ND), el partido del actual primer ministro de Grecia, Andonis Samar¨¢s.

No contento con saltarse la ley a la torera, Liapis se excus¨® asegurando que solo iba a repostar y, conturbado por su detenci¨®n, puso luego rumbo a un hotel de superlujo en Malasia para ¡°relajarse tras tan dram¨¢tico episodio¡±. Al volver a Atenas le han ca¨ªdo cuatro a?os de c¨¢rcel que no cumplir¨¢, y una multa de 780 euros por conducir un veh¨ªculo no asegurado, adem¨¢s de la expulsi¨®n de su partido.

Liapis, sobrino de Konstantinos Karamanl¨ªs ¡ªfundador de ND en 1974, cuatro veces primer ministro y dos veces presidente¡ª, se hizo cargo del Ministerio de Transportes en 2004, el a?o que Grecia celebr¨® los Juegos Ol¨ªmpicos, alrededor de los cuales orbitaron varios esc¨¢ndalos de corrupci¨®n, entre ellos el caso Siemens. Paniaguado de ilustre pedigr¨ª que medr¨® al calor del nepotismo institucionalizado por los dos principales partidos ¡ªel suyo y el socialista Pasok¡ª, Liapis tambi¨¦n se vio implicado en ese affaire, pues presuntamente fue obsequiado por la multinacional alemana con viajes pagados por Europa en 2005 para presenciar partidos de f¨²tbol, como denunci¨® en su d¨ªa el diario Eleftherotypia. La convocatoria de elecciones anticipadas en el verano de 2009 por su primo Kostas Karamanl¨ªs hijo, tras una ola de pavorosos incendios y un descontento social in crescendo, le salv¨® de males mayores. A Liapis, sin embargo, no le sent¨® nada bien el adelanto de unos comicios que ND perder¨ªa en favor del Pasok de Yorgos Papandreu, y acus¨® a su primo de haber cometido ¡°un error hist¨®rico¡±. El mismo que literalmente se atribuy¨® el d¨ªa de su detenci¨®n para excusar su comportamiento.

De la mano de su t¨ªo, Mijalis Liapis organiz¨® las juventudes del partido; fue jefe de gabinete de la presidencia y luego diputado por Atenas, hasta que las salpicaduras del caso Siemens le mostraron la v¨ªa de salida del proscenio. En la ¨¦poca en que asumi¨® la cartera de Transportes, en pleno reflujo de grandes obras de infraestructura para los JJOO y al calor del abundante cr¨¦dito internacional ¡ªGrecia crec¨ªa alegremente en torno al 5% anual, y se endeudaba a gran velocidad¡ª, el parque automovil¨ªstico se renovaba a ojos vistas y ¨¦l se ufanaba de impulsar la nueva normativa de tr¨¢fico, en un pa¨ªs que hasta entonces ten¨ªa uno de los ¨ªndices de siniestralidad m¨¢s altos de Europa por culpa una red de caminos de cabra y unos veh¨ªculos de carraca. Hoy, Grecia tiene un parque m¨®vil de lo m¨¢s presentable, pero en dique seco por culpa de la crisis: entre finales de 2009 y 2011, se dieron de baja medio mill¨®n de veh¨ªculos.

Aunque los logros pol¨ªticos de Liapis nunca estuvieron a la altura de su apellido ¡ªy todos creen que lleg¨® tan alto solo por ser quien era¡ª, no es el ¨²nico que sac¨® partido pol¨ªtica o econ¨®micamente durante ese periodo de vacas gordas, antes de que la crisis se cebara con el pa¨ªs.

La celebraci¨®n de Ayios Basilis (1 de enero) se ha visto sobresaltada este a?o por nuevas revelaciones de otro esc¨¢ndalo, el de sobornos pagados por empresas de armamento extranjeras a altos cargos del Ministerio de Defensa griego. Su antiguo responsable de compras entre 1996 y 2002, Andonis Kandas, reconoci¨® este lunes haber aceptado sobornos por varios millones de euros de empresas alemanas, rusas y francesas a cambio de validar 12 sustanciosos contratos; adem¨¢s, implic¨® en el fraude a unos cuantos cargos del departamento y se?al¨® con el dedo a importantes pol¨ªticos, como dos titulares del ministerio, ambos socialistas; el ex primer ministro conservador Konstantinos Mitsotakis y el antiguo alcalde de Atenas Miltiadis Evert, tambi¨¦n de ND y ya fallecido. Kandas ha devuelto siete millones de euros, que el Gobierno destinar¨¢ a paliar huecos en sanidad y educaci¨®n, en lo que supone el primer ejercicio de arrepentimiento de un representante de la clase pol¨ªtica ante una ciudadan¨ªa exhausta por la sucesi¨®n de recortes.

Del caso Kandas, y en menor medida del affaire Liapis, se deduce ¡ªadem¨¢s de lo ya sabido: que los prestamistas internacionales conced¨ªan cr¨¦ditos con una mano e impon¨ªan contratos de venta de armas con la otra¡ª que la corrupci¨®n ya no sale gratis en Grecia. El indicador m¨¢s notorio de que se hab¨ªa acabado la impunidad fue la condena a 20 a?os de c¨¢rcel del exministro de Defensa socialista Akis Tsojatz¨®pulos, en abril de 2012, por evasi¨®n fiscal y cobro de sobornos. El nombre de Tsojatz¨®pulos tambi¨¦n sali¨® a relucir en las confesiones de Kandas, como el de su sucesor al frente del ministerio, Yanos Papandon¨ªu, que junto con su mujer est¨¢ acusado de evadir tres millones de euros. La unidad de polic¨ªa encargada de los delitos econ¨®micos (SDOE, en sus siglas en griego) ha empezado el a?o a pleno rendimiento, se?al de que algo est¨¢ empezando a cambiar en Grecia: la impunidad de los poderosos.