Egipto aplaza el juicio a Morsi
Las autoridades alegan "mal tiempo" para no trasladarle de Alejandr¨ªa a El Cairo Se han producido enfrentamientos en las puertas del lugar donde se iba a celebrar la vista
Las autoridades de Egipto, alegando malas condiciones meteorol¨®gicas, anunciaron este mi¨¦rcoles el aplazamiento de la segunda comparecencia del expresidente Mohamed Morsi, depuesto en un golpe de Estado en julio, al que se juzga junto a otros asociados islamistas por incitar al asesinato de opositores cuando era presidente, en diciembre de 2012. Morsi se halla detenido en la ciudad costera de Alejandr¨ªa, y se le iba a trasladar a El Cairo en helic¨®ptero, pero la televisi¨®n estatal egipcia, citando fuentes militares, ha anunciado el retraso de su comparecencia ante el juez hasta el uno de febrero.
Antes del inicio previsto de la reanudaci¨®n del juicio se vivieron enfrentamientos entre partidarios y detractores del expresidente en las puertas de la academia policial donde se celebran las vistas orales. Un grupo af¨ªn a los Hermanos Musulmanes hab¨ªa convocado manifestaciones de protesta en todo el pa¨ªs, varias en El Cairo.
Son de momento dos las causas abiertas por el nuevo r¨¦gimen militar contra Morsi. La ¨²ltima, anunciada el mes pasado, por conspirar con los grupos islamistas Ham¨¢s, de Palestina, y Hezbol¨¢, de L¨ªbano, para escapar de prisi¨®n junto a otros disidentes durante la revuelta contra Hosni Mubarak de 2011 y por incitar ¡°al terrorismo, preparando a sus aliados a cumplir con los objetivos marcados por la agrupaci¨®n internacional de los Hermanos Musulmanes¡±. La fiscal¨ªa acusa al expresidente de ofrecerle a esas organizaciones extranjeras ¡°secretos de Estado¡± para que prepararan atentados contra las fuerzas armadas egicpias.
Dos narrativas distintas se enfrentan en las vistas orales del juicio a Morsi, la primera de las cuales tuvo lugar el 4 de noviembre. El expresidente y sus allegados de la cofrad¨ªa de los Hermanos Musulmanes se presentan como los representantes leg¨ªtimos del pueblo egipcio, ganadores de todas las elecciones a las que se presentaron en los primeros meses de la truncada democracia. Los fiscales, en representaci¨®n del nuevo gobierno auspiciado por los militares, le acusan de formar parte de una conspiraci¨®n islamista internacional, le atribuyen m¨¦todos terroristas y buscan justificar su deposici¨®n en el argumento de que su presidencia arruin¨® y da?¨® gravemente la estabilidad y la paz en Egipto.
La estrategia de Morsi es declararse e rebeld¨ªa. En su primera comparecencia, el expresidente le dijo en reiteradas ocasiones al juez y a los fiscales: ¡°Yo soy el presidente leg¨ªtimo de Egipto. No aceptar¨¦ la legalidad de este juicio ni este tribunal¡±. Son ya cientos los miembros de la cofrad¨ªa isl¨¢mica que han sido arrestados, en un goteo constante. A finales de diciembre fueron arrestados 23. Paralelamente, el nuevo ejecutivo, que en teor¨ªa es s¨®lo interino y se deber¨ªa limitar a tutelar un nuevo proceso constituyente y electoral, ha declarado formalmente a los Hermanos Musulmanes ¡°organizaci¨®n terrorista armada¡±.
Egipto sin embargo se halla lejos de la reconciliaci¨®n nacional. Muchos islamistas han vuelto a la clandestinidad en la que vivieron durante d¨¦cadas de reg¨ªmenes autoritarios. P¨²blicamente, una amalgama de disidentes bautizada como la Alianza Contra el Golpe convoca frecuentemente manifestaciones contra medidas gubernamentales y juicios como el de hoy. En previsi¨®n de esas concentraciones, la polic¨ªa cort¨® este mi¨¦rcoles los accesos a la ic¨®nica plaza cairota de Tahrir.
Pero las protestas callejeras no son el peor problema del nuevo gobierno y los generales que facilitaron el golpe de Estado. Los ¨²ltimos meses han visto un notable aumento de los ataques contra las fuerzas del orden y de atentados con explosivos en diversos puntos el pa¨ªs, desde la pen¨ªnsula del Sina¨ª a las afueras de El Cairo. El martes unos desconocidos lanzaron explosivos y abrieron fuego contra un ret¨¦n policial en Giza. Incidentes como esos apuntan a un tipo de insurgencia que podr¨ªa arrastrar a Egipto a un conflicto civil en un rocoso camino que ya han recorrido Algeria o Libia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.