Los israel¨ªes despiden a Sharon en la capilla ardiente en el Parlamento
El lunes sus restos ser¨¢n trasladados a su rancho, donde ser¨¢ enterrado junto a su esposa
Los israel¨ªes despiden este domingo a Ariel Sharon, quien fuera primer ministro entre 2001 y 2006 y fallecido ayer a los 85 a?os, con honores de estado. Militar y pol¨ªtico tan admirado como detestado, sobre todo por los palestinos que le recriminan la expansi¨®n de los asentamientos en Cisjordania y la inacci¨®n ante la matanza en los campos de refugiados de Sabra y Chatila durante la invasi¨®n de L¨ªbano de 1982, su cad¨¢ver ha sido trasladado a una capilla ardiente frente a la Knesset [parlamento] esta ma?ana. El lunes se celebrar¨¢ un funeral militar al que acudir¨¢n varios l¨ªderes internacionales, entre ellos el vicepresidente norteamericano, Joe Biden; el exprimer ministro brit¨¢nico Tony Blair, y el ministro del Interior espa?ol, Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, que hoy inicia una visita oficial a Israel.
En la reuni¨®n semanal de gobierno, el primer ministro, Benjam¨ªn Netanyahu, le ha definido como ¡°uno de los m¨¢s grandes militares que la gente de Israel ha visto en tiempos recientes y en su historia¡±. ¡°En cada puesto que desempe?¨® ¡ªcomo ministro de Defensa, de Vivienda, de Infraestructuras, de Exteriores¡ª Arik contribuy¨® al Estado de Israel, tal y como hizo tambi¨¦n como primer ministro¡±, a?adi¨®, empleando el diminutivo con que se conoce a Sharon com¨²nmente en Israel.
El presidente del pa¨ªs, Sim¨®n Peres, ha depositado una corona de flores ante el ata¨²d tras su llegada al parlamento en Jerusal¨¦n. Ambos hombres ten¨ªan una estrecha relaci¨®n, a pesar de sus diferencias pol¨ªticas. Hoy, el presidente queda, a sus 90 a?os, como el ¨²ltimo en vida de aquellos a quienes los israel¨ªes reconocen como los padres fundadores de su patria.
Sharon ser¨¢ enterrado el lunes en el rancho familiar de Havat Shikmin, en el sur del pa¨ªs, donde ya yace su segunda esposa, Lily, fallecida a causa de un c¨¢ncer en 2000. Las reuniones oficiales en la Knesset se han suspendido hasta que finalicen las exequias. El hecho de que el funeral sea militar, y que al ata¨²d lo vayan a acompa?ar ma?ana ocho generales, pone de relieve el reconocimiento a la carrera castrense de Sharon, que a los 14 a?os se uni¨® a la Hagan¨¢, una milicia formada para defender y avanzar los intereses de la poblaci¨®n jud¨ªa en lo que entonces era la Palestina del mandato brit¨¢nico. Ascendi¨® entre los rangos del ej¨¦rcito cuando Israel declar¨® su independencia en 1948, y sus acciones fueron decisivas en la toma de la pen¨ªnsula del Sina¨ª en 1967 y en la victoria, contra pron¨®stico inicial, contra Siria y Egipto en el conflicto de 1973.
Sharon estuvo en coma desde enero de 2006, cuando sufri¨® una segunda hemorragia cerebral en apenas un mes. Entonces, como primer ministro, hab¨ªa abandonado ya el partido conservador Likud y hab¨ªa fundado la formaci¨®n centrista Kadima, que gan¨® las elecciones en marzo de aquel a?o con Ehud Olmert a la cabeza. Del legado pol¨ªtico de Sharon queda la retirada unilateral de Israel de la franja de Gaza, que precedi¨® a la toma de poder por el grupo islamista Ham¨¢s y a dos conflictos en 2008 y 2012. Y en el recuerdo de los palestinos queda su incendiaria visita a la Explanada de las Mezquitas en 2000, cuando se presentaba a las elecciones, que prendi¨® la mecha de la segunda intifada. Su muerte fue recibida en las calles palestinas con la quema de sus fotos y gritos de ¡°criminal¡±.
El actual primer ministro israel¨ª, Benjam¨ªn Netanyahu, un viejo rival suyo, despidi¨® a Sharon como un ¡°valiente luchador y gran militar¡±. El presidente Sim¨®n Peres, que queda ahora como el ¨²ltimo de los fundadores de Israel, le record¨® como ¡°uno de los mayores defensores de Israel, que no conoci¨® el miedo¡±. El mismo fallecido admiti¨® en muchas ocasiones que su voluntad principal y casi ¨²nica era defender a toda cosa los intereses de Israel, ya fuera en el campo de batalla o en la pol¨ªtica. Su fiereza en combate le granje¨® el apodo con el que muchos le despidieron tras su muerte, el ¡®bulldozer¡¯.
La principal mancha en su carrera de cara a la comunidad internacional ocurri¨® durante la invasi¨®n israel¨ª de L¨ªbano en 1982. El general, que entonces era ministro de Defensa, no actu¨® para prevenir la matanza de cientos de civiles palestinos en los campos de Sabra y Chatila, en Beirut. Una comisi¨®n de investigaci¨®n israel¨ª le encontr¨® responsable en 1984 de ¡°ignorar el peligro del derrame de sangre y la venganza cuando aprob¨® la entrada de los falangistas en los campos¡±. ?l siempre rechaz¨® esas acusaciones, defini¨¦ndose como un cabeza de turco.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.