Dios entra en las urnas de Costa Rica
Ninguno es un devoto cat¨®lico, ni siquiera casado por la Iglesia, pero los tres principales candidatos aluden a la religi¨®n en sus discursos
Ninguno es un devoto cat¨®lico, ni siquiera casado por la Iglesia, pero el candidato oficialista Johnny Araya remata discursos citando el libro b¨ªblico Eclesiast¨¦s, el de derecha Otto Guevara asegura haber adoptado principios de la Doctrina Social de la Iglesia y el izquierdista Jos¨¦ Mar¨ªa Villalta cita al papa Francisco para criticar al mercado. Son tres de los principales candidatos para las elecciones que celebrar¨¢ Costa Rica este 2 de febrero tras una campa?a que ha abierto espacios para debatir sobre el aborto y sobre la legalizaci¨®n de parejas homosexuales, en medio de la fuerte lucha ideol¨®gica entre las fuerzas pol¨ªticas que se preparan para una probable segunda ronda.
Otro aspirante presidencial que intenta colarse en esa probable segunda vuelta es Luis Guillermo Sol¨ªs (Partido Acci¨®n Ciudadana, centroizquierda) y es el que m¨¢s convence a William, un joven profesional y cat¨®lico que a¨²n se declara dentro del mayor grupo electoral que se?alan las encuestas, el de los indecisos. Votar¨ªa por ¨¦l, cuenta, pero lleva como candidata a vicepresidenta a una mujer que favorece el aborto, y eso ¨¦l no puede aceptarlo. ¡°?l es el candidato m¨¢s serio y capaz de armar un buen di¨¢logo entre sectores pol¨ªticos, pero tengo el problema de que me importa mucho la religi¨®n y no quiero que aqu¨ª se legalice matar ni?os¡±, dice como confes¨¢ndose.
Ese es m¨¢s o menos el llamado que han hecho autoridades de la religi¨®n cat¨®lica, mayoritaria y oficial en este pa¨ªs, acompa?adas en este caso por un tenaz trabajo de iglesias protestantes, a las que representan dos de los trece candidatos presidenciales, con ninguna opci¨®n de triunfo pero s¨ª de colocar en la mesa los temas de moral cristiana, o de aumentar su presencia en la Asamblea Legislativa, donde debe decidirse cualquier reforma.
Quiz¨¢ por esto los obispos dijeron que, m¨¢s que la elecci¨®n del sustituto (todos los aspirantes son hombres) de Laura Chinchilla, la importancia mayor radica en la composici¨®n del nuevo Congreso, con 57 miembros. Lo expresaron en un documento de ¡°iluminaci¨®n¡± que ha servido de gu¨ªa a innumerables homil¨ªas en las misas de cada domingo, espacios masivos valiosos en momentos en que los partidos pol¨ªticos sufren para poder reunir apenas a centenares en sus m¨ªtines.
"Voten por quien quiera, pero no lo hagan por ese que es ateo o que tiene un modo de vida fuera de nuestra tradici¨®n¡±, dijo el domingo 19 de enero en su serm¨®n un sacerdote en la ciudad de Cartago (este del Valle Central), conocida por su conservadurismo y su tradici¨®n cat¨®lica. Lo dijo,sin embargo, sin mencionar a Araya, Villalta, Guevara; tampoco a Sol¨ªs ni a Rodolfo Piza, candidato del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC). Este es el ¨²ltimo de los cinco candidatos presidenciales en quienes los medios han centrado la atenci¨®n, basados en datos de las encuestas de preferencia electoral, aunque hay otros ocho que incluyen a los dos diputados evang¨¦licos Carlos Avenda?o y Justo Orozco, abanderados de la oposici¨®n a la legalizaci¨®n de la fertilizaci¨®n in vitro y del reconocimiento de parejas homosexuales. Tambi¨¦n se incluye otro candidato, el exdiputado ?scar L¨®pez, que ha llegado a ir a debates con una camiseta con el mensaje ¡°no al aborto¡±.
El resto de los candidatos son menos expl¨ªcitos, pero tampoco dejan fuera las alusiones a Dios, a la Biblia o a la doctrina cristiana, cuyos valores dominan en este pa¨ªs donde cerca de un 60% declara profesar el catolicismo y donde crecen con fuerza las iglesias cristianas protestantes. La Iglesia cat¨®lica es una de las tres instituciones que generan m¨¢s confianza en la poblaci¨®n. Entre los candidatos tambi¨¦n se acusan de ser ateos, una caracter¨ªstica de fuertes connotaciones negativas. Incluso Luis Guillermo Sol¨ªs, tratando de defender en un debate eliminar la regla que da al Estado la religi¨®n oficial cat¨®lica, habl¨® de ir hacia el establecimiento de ¡°un Estado laico, pero con Dios¡±.
Un jerarca de la Iglesia, que prefiri¨® guardar su anonimato, dijo que las alusiones a temas religiosos o las cr¨ªticas entre candidatos estaban previstas por las autoridades cat¨®licas, conscientes del valor que algunas posiciones pueden tener en la conquista del electorado. Esto le se?alan, por ejemplo, a Otto Guevara, representante del Movimiento Libertario, que con los a?os ha ido abandonando los principios libertarios y para esta campa?a modific¨® los estatutos de su partido para incluir principios de la Doctrina Social de la Iglesia en torno a la solidaridad, al bien com¨²n y a un modelo de Estado subsidiario.
Una excepci¨®n s¨ª ha habido en esta campa?a, pues los candidatos no est¨¢n en esta ocasi¨®n invitados a la misa matutina en la Catedral Metropolitana el d¨ªa de las elecciones, por decisi¨®n del nuevo arzobispo de San Jos¨¦, Jos¨¦ Rafael Quir¨®s, nombrado por el papa Francisco, que se ha pronunciado en varias ocasiones en favor de formatos de Estados laicos, no confesionales.
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