¡°No basta que te entreguen un caj¨®n cerrado y te digan ac¨¢ est¨¢ tu hijo¡±
La forense argentina Mercedes Doretti, cuyo equipo colabora con M¨¦xico en el an¨¢lisis de cad¨¢veres no identificados, habla de los retos de esta tarea
Mercedes Doretti (Buenos Aires, 1959) ha ayudado a identificar restos humanos en Argentina, en Per¨², en la antigua Yugoslavia despu¨¦s de la guerra, en El Salvador, en Filipinas, en casi cualquier lugar donde revelar el nombre de las v¨ªctimas fuese una urgencia nacional. Despu¨¦s de m¨¢s de tres d¨¦cadas de trabajo est¨¢ convencida de que una de las obligaciones de los gobiernos es la transparencia con las familias de los muertos.
"A veces no se trata de problemas t¨¦cnicos en la identificaci¨®n sino de credibilidad. A veces hay un celo exagerado sobre la secrec¨ªa de los casos, y los familiares son gente a la que le ha pasado lo peor: perder un marido, un hijo, una hija. Y obviamente uno quiere saber qu¨¦ pas¨®, c¨®mo muri¨®, c¨®mo lo han identificado. No basta solamente la palabra, que te entreguen un caj¨®n cerrado y te digan ac¨¢ est¨¢ tu hijo. Las identificaciones forenses no son actos de fe".
Doretti, una de las fundadoras del reputado Equipo Argentino de Antropolog¨ªa Forense, est¨¢ en M¨¦xico colaborando con la fiscal¨ªa federal en el an¨¢lisis de los restos de tres masacres de migrantes paradigm¨¢ticas de la narcoviolencia del norte del pa¨ªs: las del estado de Tamaulipas (en el mismo municipio, San Fernando, aparecieron 72 cad¨¢veres juntos en 2010 y 193 repartidos en varias fosas en 2011) y la de Cadereyta, estado de Nuevo Le¨®n, en la que los criminales dejaron tirados de madrugada en una carretera los torsos seccionados de 49 personas. Otro asunto en el que est¨¢n empezando a ayudar es la identificaci¨®n definitiva de 13 j¨®venes asesinados en M¨¦xico DF en 2013 despu¨¦s de haber sido secuestrados a la salida de una discoteca.
Y justo esta semana ha surgido una controversia sobre otro caso del norte de M¨¦xico. En el estado de Coahuila las autoridades anunciaron el descubrimiento de narcofosas y, tras unos d¨ªas de informaci¨®n confusa que a¨²n no se ha podido aclarar, las v¨ªctimas de la zona han calificado de "farsa" estos trabajos de b¨²squeda.
En M¨¦xico la tarea es dif¨ªcil pero posible, y depende enormemente de la voluntad pol¨ªtica
Las palabras de un familiar de un desaparecido de Coahuila en una entrevista con este diario reflejan el problema de la falta de credibilidad de las autoridades. "Si nos dicen que son los nuestros,?no lo vamos a aceptar, necesitamos pruebas. No es solo que los entreguen y se quiten el problema".
La cuesti¨®n de los desaparecidos en M¨¦xico se agudiz¨® durante 2006 y 2012 por los efectos de la estrategia de lucha frontal contra el narcotr¨¢fico. El gobierno afirma que en ese periodo fueron asesinados 70.000 ciudadanos, entre los que se han contabilizado alrededor de 25.000 a¨²n sin identificar. Adem¨¢s hubo 26.000 desapariciones que siguen sin resolverse.
Doretti considera que M¨¦xico afronta un reto complejo, y pone el caso de Argentina como ejemplo del trayecto que le queda a ese pa¨ªs. "Nosotros pasamos por una situaci¨®n parecida,?con un muy alto n¨²mero de desaparecidos. Tuvimos que implementar un banco nacional de datos de familiares de desaparecidos y un programa de exhumaciones que dur¨® muchos a?os. Todo esto implica un fortalecimiento que lleva tiempo. La tarea es dif¨ªcil pero posible, y depende enormemente de la voluntad pol¨ªtica".
Aparte de la situaci¨®n espec¨ªfica de M¨¦xico, la forense argentina habla del programa regional que est¨¢ desarrollando su equipo. El Proyecto Frontera. Se trata de una red de bancos de datos que est¨¢n estableciendo en todo el corredor migratorio americano, desde los pa¨ªses centroamericanos de origen hasta el destino mayoritario, el sur de Estados Unidos, pasando por M¨¦xico, el amplio terreno intermedio.
Los bancos implican la labor conjunta de organismos p¨²blicos y ONG de cada pa¨ªs. En ellos se recogen datos de los desaparecidos con entrevistas a los familiares y tambi¨¦n muestras de ADN. Doretti explica que no existe un sistema interregional de cruce de informaci¨®n. En el que est¨¢n desarrollando ellos, que empez¨® a funcionar en 2011, ya tienen integrados 633 casos, y han logrado identificar a 67 migrantes.?
Su equipo lleva un plan interregional de identificaci¨®n de migrantes
Su ambici¨®n es que el Proyecto Frontera llegue a tener el calado y el apoyo suficientes para resolver la situaci¨®n actual, en la que la mayor¨ªa de migrantes de los que se pierde el rastro se esfuman para siempre en un agujero negro de desinter¨¦s general e ineficiencia institucional.
La forense advierte de que los problemas no solo suceden en los pa¨ªses en desarrollo, sino tambi¨¦n en algunas localidades con pocos recursos de Estados Unidos.
Pone el ejemplo del condado de Brooks (Tejas), donde en 2012 se encontraron 127 cad¨¢veres de migrantes y no dispone siquiera de una morgue. Por entonces, si no lograban identificar los cuerpos los enterraban en una fosa. Cuando se supo lo que pasaba vinieron las protestas y desde hace unos meses Brooks env¨ªa sus cuerpos a otro condado donde hay morgue.
Pero muchos otros condados tejanos siguen en la situaci¨®n en la que estaba Brooks: cada cad¨¢ver an¨®nimo se va para un agujero y ah¨ª se cierra la historia de una persona que cruz¨® miles de kil¨®metros para prosperar y que alguna vez tuvo un nombre.
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