Muere Huber Matos, comandante de la revoluci¨®n y el exilio

Huber Matos fue de todo en la revoluci¨®n cubana: lleg¨® a lo m¨¢s alto en la guerrilla de Fidel Castro, y tambi¨¦n fue l¨ªder en la c¨¢rcel y en el exilio de Miami. Baj¨® de la Sierra Maestra como comandante y tom¨® la ciudad de Santiago de Cuba el 1 de enero de 1959, entrando una semana m¨¢s tarde a La Habana como un h¨¦roe junto a Camilo Cienfuegos y Castro. Condenado por traici¨®n a los diez meses del triunfo revolucionario, cumpli¨® 20 a?os de c¨¢rcel en diversas prisiones de la isla, convirti¨¦ndose en un reo legendario. Al ser excarcelado y llegar a Miami, Matos fund¨® la organizaci¨®n anticastrista Cuba Independiente y Democr¨¢tica (CID), con la que abog¨® por el derrocamiento de Castro por las buenas o por las malas. El jueves, a la edad de 94 a?os, muri¨® de un infarto en la capital del exilio cubano y hasta el ¨²ltimo momento mantuvo sus posiciones radicales. Tanto por su tono como por su contenido, la voz de Matos en la radio de Miami era de las que m¨¢s fuerte sonaba, hasta el extremo de que hace unos a?os lleg¨® a hacer un llamado a los militares cubanos para que se alzasen contra el Gobierno.

Huber Matos Ben¨ªtez naci¨® el 26 de noviembre de 1918 en el poblado de Yara, en la antigua provincia de Oriente. Era el hijo mayor de un agricultor y la maestra del pueblo, lo que le permiti¨® educarse. Desde ni?o ayud¨® a su padre en las tareas del campo y para escapar a ese destino estudi¨® Magisterio, gradu¨¢ndose en la Escuela Normal para Maestros de Santiago de Cuba en 1940. Cuatro a?os m¨¢s tarde obtuvo un doctorado en Pedagog¨ªa en la Universidad de La Habana.

Durante alg¨²n tiempo trabaj¨® en varias escuelas rurales del oriente cubano, donde comenz¨® a adquirir conciencia pol¨ªtica. A los 18 a?os entr¨® en el Partido Revolucionario Aut¨¦ntico y en 1947, luego de que fue fundado el Partido del Pueblo Cubano (Ortodoxo) por Eddy Chib¨¢s, entr¨® a militar en esta organizaci¨®n, a la cual perteneci¨® tambi¨¦n Fidel Castro. En 1950 fue nombrado vicedecano del Magisterio Nacional.

La vida de Cuba y de Huber Matos cambiaron radicalmente con el golpe de Estado que dio Fulgencio Batista el 13 de marzo de 1952, a pocos meses de unas elecciones generales en las que Castro se presentaba como candidato al Congreso por el Partido Ortodoxo. En ese momento Matos trabajaba como profesor de la Escuela Normal para Maestros de Manzanillo, una de las principales ciudades de la provincia de Oriente, donde ense?aba C¨ªvica e Historia.

Su oposici¨®n a la dictadura batistiana le llev¨® a exiliarse en Costa Rica en 1956, donde entabl¨® amistad con el presidente Jos¨¦ Figueres. Cuando Castro organiz¨® la expedici¨®n del yate Granma y se hizo fuerte en la Sierra Maestra, Matos consigui¨® preparar una expedici¨®n con armas y voluntarios y aterriz¨® con una avioneta en las monta?as de Cuba, uni¨¦ndose a los barbudos. Termin¨® la guerra con el grado de comandante, el m¨¢s alto de la guerrilla, al frente de la columna 9? Antonio Guiteras.

Tras tomar Santiago de Cuba y entrar triunfalmente en La Habana en el mismo jeep de Castro y Cienfuegos, ocup¨® diversas responsabilidades hasta que fue designado jefe del Ej¨¦rcito Rebelde en la provincia de Camag¨¹ey.

Desde muy pronto Matos se opuso al giro radical de la revoluci¨®n, y cuando percibi¨® que esta se inclinaba hacia el socialismo y entraban en las instituciones del Gobierno miembros del antiguo partido comunista (el Partido Socialista Popular) escribi¨® una carta personal a Castro renunciando a su cargo. ¡°No deseo convertirme en un obst¨¢culo para la revoluci¨®n y creo que, teniendo que escoger entre acomodarme a las circunstancias o hacerme a un lado para no causar ning¨²n da?o, lo m¨¢s revolucionario para m¨ª es irme¡­¡±, dec¨ªa en la misiva, enviada al l¨ªder cubano el 19 de octubre de 1959.

Matos agregaba: ¡°Si se quiere que la revoluci¨®n triunfe, d¨ªgase a d¨®nde vamos y c¨®mo vamos, ¨®iganse menos los chismes y las intrigas, y no se trate de conjurado o de reaccionario al que con criterio honrado plantee estas cosas¡±. Aunque Matos siempre asegur¨® que esta carta fue la verdadera causa de su encarcelamiento, Fidel Castro y sus seguidores dijeron que en realidad preparaba un levantamiento en Camag¨¹ey y Camilo Cienfuegos fue enviado a detenerle all¨ª. Huber Matos se entreg¨® sin oponer resistencia, y Cienfuegos, al regresar a La Habana, se estrell¨® en una avioneta debido al mal tiempo.

El juicio a Matos se celebr¨® el 11 de diciembre en el antiguo campamento militar de Columbia y all¨ª intervino Castro durante varias horas seguidas para acusar a su antiguo comandante de traici¨®n. El Che Guevara y R¨¢ul Castro eran partidarios de la pena de muerte, pero Fidel Castro dijo que si se hac¨ªa eso se le convertir¨ªa en un ¡°m¨¢rtir¡±. Finalmente el tribunal lo conden¨® a 20 a?os de prisi¨®n, de los que no se le perdon¨® ni una hora.

En presidio realiz¨® varias huelgas de hambre y denunci¨® que estuvo a?os aislado en una celda, convirti¨¦ndose en uno de los famosos presos ¡°plantados¡±, denominados as¨ª por negarse a vestir el uniforme de reo com¨²n. Al salir de la c¨¢rcel en 1979 se instal¨® en Costa Rica y posteriormente se traslad¨® a Miami, donde fund¨® la organizaci¨®n Cuba Independiente y Democr¨¢tica, uno de los grupos anticastristas que con m¨¢s beligerancia atac¨® al r¨¦gimen de Fidel Castro en las ¨²ltimas d¨¦cadas y que apoy¨® la ley Helms-Burton, que hizo extraterritorial el embargo norteamericano, cuando fue promulgada en 1996. En 2001 gan¨® en Espa?a el XIV Premio Comillas por su libro de memorias C¨®mo lleg¨® la noche.