Ruanda acusa y veta a Francia
El presidente Paul Kagame carga contra Par¨ªs e impide al embajador galo participar en el vig¨¦simo aniversario del exterminio de 800.000 tutsis
En 100 d¨ªas, entre el 7 de abril y el 4 de julio de 1994, 800.000 hombres, mujeres y ni?os fueron exterminados en Ruanda. La raz¨®n: pertenec¨ªan a la etnia tutsi o intentaron oponerse a las matanzas. Al genocidio m¨¢s r¨¢pido de la historia le siguieron dos d¨¦cadas de cicatrices, impunidad y ocultaci¨®n. Francia protegi¨® a numerosos sospechosos de haber planificado y ejecutado las masacres, manipul¨® pruebas y desvi¨® la atenci¨®n sin pedir excusas. En marzo, una primera condena judicial trat¨® de apaciguar las relaciones bilaterales, y hay 30 casos m¨¢s en espera de ser juzgados en la Fiscal¨ªa del Genocidio en Par¨ªs. Pero Ruanda, el pa¨ªs de las mil colinas, ha vetado la presencia francesa en el 20? aniversario de su tragedia nacional.
El presidente Paul Kagame aprovech¨® este lunes el discurso oficial del 7 de abril, pronunciado ante 30.000 personas en el estadio Amaharo de Kigali, para afirmar por tercera vez en dos semanas que Francia jug¨® un papel protagonista en las masacres. Kagame ha concedido entrevistas a la revista Jeune Afrique y al diario Lib¨¦ration. En la segunda afirm¨®: ¡°Francia y B¨¦lgica tuvieron un papel nefasto en la historia de Ruanda, y contribuyeron al surgimiento de una ideolog¨ªa genocida¡±.
Pero la acusaci¨®n m¨¢s dura estaba en la primera entrevista, del 27 marzo: ¡°Las potencias occidentales querr¨ªan que Ruanda sea un pa¨ªs normal. Pero es imposible. Vean el caso de Francia. Veinte a?os despu¨¦s, el ¨²nico reproche que admite es que no hizo lo suficiente para evitar el genocidio. Es un hecho, pero esconde lo esencial: el papel directo de B¨¦lgica y Francia en la preparaci¨®n pol¨ªtica del genocidio, y la participaci¨®n de esta ¨²ltima en su ejecuci¨®n. Pregunten a los supervivientes de la masacre de Bisesero en junio de 1994, y les dir¨¢n lo que hicieron los soldados franceses de la Operaci¨®n Turquesa. C¨®mplices seguro, en Bisesero y en la llamada zona humanitaria segura. Pero tambi¨¦n actores¡±.
Las palabras de Kagame, el presidente que encarna la victoria contra los genocidas y el nuevo despertar de Ruanda, han abierto una nueva crisis diplom¨¢tica entre Kigali y Par¨ªs. El conservador Alain Jupp¨¦, ministro de Exteriores en 1994 con Fran?ois Mitterrand; y Laurent Fabius, el ministro socialista actual, han expresado su malestar, demostrando que el bloque formado por la derecha y la izquierda para silenciar las aberraciones cometidas en Ruanda sigue vigente. El periodista Patrick de Saint-Exup¨¦ry, que revel¨® c¨®mo el Ej¨¦rcito franc¨¦s toler¨® tres d¨ªas de asesinatos masivos en Biserero, titul¨® su libro sobre aquel episodio con una f¨®rmula elocuente: ¡°Lo inconfesable¡±.
Kagame tiene razones para estar enfadado con Par¨ªs. El presidente ruand¨¦s hab¨ªa invitado a Fran?ois Hollande a acudir a la conmemoraci¨®n, que durar¨¢, como las matanzas, 100 d¨ªas. Pero Par¨ªs decidi¨® mandar, contra toda l¨®gica institucional, a Christiane Taubira, ministra de Justicia y ¨²nica persona de raza negra del Gabinete. Mientras B¨¦lgica no alter¨® sus planes y enviaba a su ministro de Exteriores, Par¨ªs replic¨® al ataque de Kagame dejando que fuera su embajador en Kigali quien asistiera a los actos oficiales. Pero este lunes las autoridades locales indicaron que la presencia del embajador no era ¡°deseada¡±. Poco despu¨¦s, el El¨ªseo emiti¨® una nota en la que se suma al ¡°pueblo ruand¨¦s para honrar la memoria de las v¨ªctimas¡±, y presume de que ¡°la prevenci¨®n de los genocidios es un elemento central de la acci¨®n exterior de Francia¡±.
Los cascos azules fueron retirados de Ruanda en el momento en que m¨¢s se les necesitaba¡± Ban ki-moom
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, que s¨ª estaba en Kigali, reconoci¨® que el genocidio es ¡°una verg¨¹enza¡± para la ONU: ¡°Debimos hacer m¨¢s, los cascos azules fueron retirados de Ruanda en el momento en que m¨¢s se les necesitaba¡±.
La ausencia de Francia erosiona la imagen de libertador de ?frica que ha intentado construirse Hollande tras intervenir militarmente en Mal¨ª y Rep¨²blica Centroafricana. Edwy Plenel, director de Mediapart, ha recordado que Francia tard¨® medio siglo en asumir su responsabilidad directa en el Holocausto, y se ha preguntado por qu¨¦ Hollande no ha ido a Ruanda a ¡°presentar excusas, pedir perd¨®n y decir la verdad¡±, admitiendo que ¡°Francia ¡ªes decir su presidencia, su Gobierno, su Estado y su ej¨¦rcito¡ª, fue c¨®mplice del genocidio¡±.
B¨¦lgica hizo ese ejercicio de contrici¨®n en el a?o 2000, y lo repiti¨® en 2004. En 2010, Nicolas Sarkozy reconoci¨® la ¡°ceguera¡± de Francia, sin ir m¨¢s all¨¢. Ahora, al no hacer una cosa ni otra, la Francia oficial, dice Plenel, ¡°ha deshonrado al pueblo franc¨¦s¡±.
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