EE UU captura en Libia al cabecilla del ataque al consulado en 2012

El Pent¨¢gono ha confirmado hoy martes la captura en Libia de Ahmed Abu Khattala, supuesto cabecilla del ataque contra el consulado de Estados Unidos en Bengasi en septiembre de 2012, donde fallecieron cuatro norteamericanos, entre ellos el embajador en ese pa¨ªs, Chris Stevens. Khattala fue apresado el pasado domingo durante una operaci¨®n secreta de fuerzas especiales norteamericanas y ayer se encontraba en ¡°un lugar seguro¡± fuera de Libia y ser¨ªa transportado pronto a EE UU, siempre seg¨²n el Pent¨¢gono.

Sin que se disparara una sola bala y sin ninguna baja durante la operaci¨®n, todos los norteamericanos que participaron en el asalto est¨¢n ya fuera de Libia, asegur¨® el secretario de prensa del Pent¨¢gono, el almirante John Kirby. El diario The Washington Post fue quien primero dio la noticia, tras mantenerla embargada durante 24 horas por petici¨®n expresa de la Casa Blanca por motivos de seguridad.

La detenci¨®n de Khattala supone una importante victoria para la Administraci¨®n de Barack Obama

La detenci¨®n de Khattala supone una importante victoria para la Administraci¨®n de Barack Obama, que hasta el momento no hab¨ªa logrado sentar a nadie en el banquillo de los acusados por la muerte de cuatro ciudadanos norteamericanos en un ataque terrorista que conmocion¨® el final de la campa?a presidencial de 2012, justo el d¨ªa que se conmemoraba el aniversario del 11-S. El ataque marc¨® tambi¨¦n el final de mandato ¨Chasta entonces sin baches- de la secretaria de Estado, Hillary Clinton, y los republicanos en el Congreso y las voces medi¨¢ticas m¨¢s radicales han hecho de aquel d¨ªa su caballo de batalla contra la exprimera dama y la administraci¨®n dem¨®crata.

El presidente Obama daba luz verde a la operaci¨®n el pasado viernes por la noche. Esta tarde, el mandatario aprovechaba un acto en Pittsburg para declarar que Khattala enfrentar¨¢ muy pronto ¡°todo el peso de la ley¡±. ¡°Con esta operaci¨®n, EE UU ha demostrado una vez m¨¢s que siempre haremos todo lo que sea necesario para asegurarnos que se hace justicia cuando la gente da?a a los americanos¡±, dijo. ¡°Continuaremos con nuestros esfuerzos para llevar ante la justicia a todos los responsables del ataque de Bengasi¡±, asegur¨® el mandatario, que insisti¨® en que no importa el tiempo que pase, al final los responsables del terror son llevados ante un juez.

Seg¨²n fuentes citadas por medios norteamericanos, la orden de captura contra Khattala llevaba m¨¢s de un a?o sobre la mesa del despacho Oval del presidente norteamericano, pero el temor a desestabilizar a¨²n m¨¢s la vol¨¢til situaci¨®n en el Gobierno libio y no tener suficientes pruebas para acusar al sospechoso han hecho que la detenci¨®n se retrasara. Khattala, l¨ªder del grupo integrista isl¨¢mico Ansar al Shariah, puede llegar a enfrentar la pena de muerte en Estados Unidos seg¨²n se le a?adan cargos al ya existente de perpetrar actos de terrorismo contra personas e intereses norteamericanos. Seg¨²n Eric Holder, fiscal general de EE UU, sobre Khattala penden hasta el momento tres cargos criminales federales que hacen autom¨¢tica la persecuci¨®n del sospechoso en un juzgado de EEUU.

Sin estar todav¨ªa el sospechoso en territorio estadounidense, la Administraci¨®n Obama ya est¨¢ sufriendo la presi¨®n por parte de los republicanos para que se obtenga de Khattala toda la informaci¨®n posible, en lo que parece ser una velada petici¨®n de tortura de un detenido. Kelly Ayotte, senadora por New Hampshire, consideraba que no hab¨ªa necesidad de darse prisa en leerle al detenido sus derechos constitucionales y que ser¨ªa m¨¢s productivo ponerle en manos de profesionales que puedan obtener informaci¨®n que ayude a esclarecer qu¨¦ paso y capturar al resto de los responsables del ataque.

Por su parte, el senador Marco Rubio, reclamaba el traslado de Khattala a Guant¨¢namo. ¡°La Administraci¨®n de Obama deber¨ªa transferir inmediatamente al preso al centro de detenci¨®n de Guant¨¢namo para que sea interrogado, de manera que se obtenga la informaci¨®n que haga posible apresar a los otros individuos asociados con el asalto que provoc¨® la muerte de cuatro norteamericanos¡±, manifest¨® Rubio a trav¨¦s de un comunicado.

Khattala, l¨ªder del grupo integrista isl¨¢mico Ansar al Shariah, puede llegar a enfrentar la pena de muerte en Estados Unidos

¡°A veces parece que esta Administraci¨®n est¨¢ m¨¢s interesada en la pol¨ªtica de la guerra contra el terrorismo que en la ejecuci¨®n de la misma y carece de una pol¨ªtica de detenciones desde hace seis a?os¡±, prosigui¨® Rubio en su comunicado. El senador mostraba su curiosidad por saber c¨®mo pensaba la Administraci¨®n extraer informaci¨®n del detenido y donde pensaba encerrarle, ya que ¡°America sigue en guerra¡±.

Por su parte, el senador John McCain, prisionero de guerra y torturado en Vietnam, consider¨® que el ¨²nico lugar apropiado para juzgar a Khattala era la base militar naval de Guant¨¢namo. ¡°?D¨®nde m¨¢s se le puede llevar?¡±, se cuestion¨®.

El portavoz de Obama, Jay Carney, insist¨ªa en que la captura de Khattala probaba que EE UU cumple con su promesa de llevar ante la justicia a los responsables de terrorismo y puntualiz¨® que la detenci¨®n del l¨ªder de Ansar al Shariah ¡°no es el fin de un proceso pero s¨ª un hito muy importante¡±.

Hasta el pasado domingo, Khattala hab¨ªa logrado escapar a la justicia, llegando en momentos su actitud a ser burlona, ya que en m¨¢s de una ocasi¨®n ha concedido entrevistas, ya fuera a CNN o a la cadena Fox. Este hecho llev¨® a congresistas republicanos a acusar a la Administraci¨®n dem¨®crata de estar encubriendo lo que realmente sucedi¨® en Bengasi as¨ª como criticar al departamento de Justicia por no llevar ante un juez al sospechoso.

Dos a?os y medio despu¨¦s y con Khattala detenido, lo que sucedi¨® en Bengasi sigue siendo piedra de toque para la oposici¨®n republicana, que continua dudando de que el recinto diplom¨¢tico estuviera bien protegido y que no perder¨¢ ocasi¨®n de utilizar lo sucedido contra Clinton si esta finalmente decide ser candidata a la presidencia en 2016.