Un juez declara inconstitucional el sistema de pena de muerte en California
La sentencia considera que los retrasos de d¨¦cadas en las ejecuciones suponen crueldad El Estado acumula tantos condenados que "necesitar¨ªa matar uno a la semana durante 14 a?os"
La oposici¨®n a la pena de muerte en Estados Unidos sum¨® este mi¨¦rcoles un nuevo argumento legal. Un juez federal del Condado de Orange declar¨® inconstitucional la forma en que el Estado de California aplica, o m¨¢s bien no consigue aplicar, la pena capital. En su sentencia, el juez Cormac Carney hace un retrato demoledor de la ineficiencia de un sistema que solo ha conseguido ejecutar a 13 personas de 900 condenas en tres d¨¦cadas. Esta ineficiencia, concluye el juez, es contraria a la Octava Enmienda de la Constituci¨®n, que proh¨ªbe la crueldad y la desproporci¨®n en el castigo.
La sentencia da la raz¨®n al preso Ernest Dewayne Jones, condenado a muerte el 7 de abril de 1995. Jones fue condenado por violar y asesinar a Julia Miller, de 50 a?os, la madre de su novia. Hac¨ªa diez meses que hab¨ªa salido de la c¨¢rcel con un permiso, despu¨¦s de seis a?os encerrado por otra violaci¨®n, tambi¨¦n de la madre de su novia anterior. Jones admiti¨® los hechos en el juicio. Hasta hoy esperaba su ejecuci¨®n, ¡°una generaci¨®n despu¨¦s¡±, destaca el juez. La sentencia, contra la que cabe recurso todav¨ªa en varias instancias, anula la condena a muerte de Jones.
Los retrasos sistem¨¢ticos convierten la pena de muerte en una pena de "cadena perpetua, con posibilidad remota de muerte", dice el juez
¡°La administraci¨®n disfuncional de la pena de muerte en California tiene como resultado, y as¨ª seguir¨¢ siendo, un periodo de retraso impredecible. El retraso sistem¨¢tico ha hecho que las ejecuciones sean tan raras que la pena de muerte, impuesta deliberadamente por un jurado, se ha transformado sigilosamente en una sentencia que ning¨²n jurado podr¨ªa imponer: cadena perpetua, con posibilidad remota de muerte (¡). Esa es la realidad de la pena de muerte hoy en California¡±.
El propio Estado reconoci¨® que el sistema era ¡°disfuncional¡± por el tiempo excesivo que llevan las apelaciones en un informe de una comisi¨®n parlamentaria creada a tal efecto en 2004 y que public¨® sus conclusiones en 2008.
La sentencia pone en perspectiva tambi¨¦n algunos de los argumentos a favor de la pena de muerte. No se pronuncia sobre la pena en s¨ª, sino sobre la forma de llevarla a cabo. ¡°En California, la ejecuci¨®n es tan infrecuente, y los retrasos que la preceden tan extraordinarios, que la pena de muerte queda vaciada de cualquier efecto disuasorio que pudiera haber tenido. Esta situaci¨®n es anti¨¦tica para cualquier noci¨®n de lo que es un castigo justo¡±.
California solo ha ejecutado a 13 personas de 900 condenados desde 1976. Por cada ejecutado, siete mueren en sus celdas
¡°Cuando una persona es condenada a muerte en California, la sentencia lleva impl¨ªcita la promesa del Estado de que se cumplir¨¢¡±, dice el juez en sus conclusiones. Es una promesa hecha a los ciudadanos, que invierten dinero en el sistema de justicia. A los miembros del jurado, que han debido escuchar cr¨ªmenes horribles y han tomado una decisi¨®n. A las v¨ªctimas que buscan resarcimiento. ¡°Pero durante demasiado tiempo, esa promesa ha sido en vano¡±. En esta situaci¨®n, ¡°el sistema no sirve a ning¨²n prop¨®sito penal y es inconstitucional¡±.
California ha ejecutado a 13 presos desde que se levant¨® la moratoria sobre la pena de muerte en 1976 hasta la suspensi¨®n de facto de las ejecuciones, en 2006. Es una cifra peque?a en comparaci¨®n con Estados como Florida u Oklahoma, con m¨¢s de un centenar. Texas ha ejecutado a m¨¢s de 500 en ese tiempo.
Sin embargo, California es el Estado con m¨¢s presos en el corredor de la muerte. Ha sentenciado a 900 personas en estas tres d¨¦cadas. De ellos, 94 han muerto esperando la ejecuci¨®n y 39 vieron revocadas sus condenas. Es decir, que por cada preso ejecutado, siete mueren en sus celdas. Todav¨ªa quedan 748, entre ellos Jones, que no tienen ni idea de cu¨¢ndo puede llegarles su ejecuci¨®n. M¨¢s que cualquier otro Estado. Para poder ejecutarlos a todos, California tendr¨ªa que matar a uno o m¨¢s a la semana durante los pr¨®ximos 14 a?os, dice el juez en su sentencia.
Richard Dieter, director de la organizaci¨®n Death Penalty Information Center, dijo que esta es una conclusi¨®n a la que ya hab¨ªan llegado muchos jueces. ¡°Pero lo que ha hecho este juez es llevarlo un paso m¨¢s all¨¢ y decir que es tan ca¨®tico que no se puede aplicar, que est¨¢ mal aplicar un castigo tan arbitrario e impredecible a cualquiera¡±, dijo Dieter, citado por National Journal. Seg¨²n este experto, la sentencia seguramente ser¨¢ recurrida a la Corte de Apelaci¨®n y podr¨ªa acabar en la Corte Suprema. ¡°Las implicaciones van m¨¢s all¨¢ de California¡±, dijo.
Natasha Minsker, directora de la Uni¨®n Americana por las Libertades Civiles del Norte de California, dijo a Los Angeles Times que es la primera vez que un juez federal considera inconstitucional el sistema de ejecuciones del Estado por su ineficiencia.
El n¨²mero de presos en el corredor de la muerte en Estados Unidos supera los 3.000, seg¨²n datos de la organizaci¨®n Death Penalty Information Center.
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